All; Todo

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Jimin lo intimidaba, eso era un hecho; lo hacía sentir en su estado más vulnerable, como si tuviera catorce años de nuevo y estuviera en esa fría habitación de paredes blancas mientras era violentado principalmente por esa chica de cabellos naranja.

Incluso, podía decir que el castaño lo intimidaba más que ella, en especial en momentos como este, cuando él simplemente lo sentaba en su regazo y lo miraba fijamente, sin hacer nada más.

Su mirada era vacía y carente de cualquier emoción, en ocasiones brillaba en algo parecido a la furia y algo más que realmente no podía describir.

No le gustaba sostener el contacto visual, pero él se enojaría si no lo hacía, así que no le quedaba de otra que seguir mirándolo también, con lágrimas de puro terror en los ojos.

— Eres realmente precioso, Yoongi, ¿Lo sabías? — comenzó a acariciar su mejilla — Mírate, incluso temblando y a nada de llorar te ves tan adorable como un gatito.

— ¿Q-qué es lo que quieres de mí? — su voz salió inestable, realmente sentía que podía romper a llorar en ese momento.

— Lo quiero todo Yoongi — la frialdad en esos ojos café lo hizo sentir más tétrico de lo que era — quiero tenerte para mí, porque desde la primera vez que te vi no pude dejar de pensar en ti.

>> No sabes cómo ardía en rabia cuando dejabas que ese tonto te utilizara — aquellas palabras salieron entre dientes — yo te cuidaré, te daré el cariño que siempre has querido recibir mi amor — sus dedos subieron a los negros cabellos para acariciarlos — sólo tienes que comportarte y no te haré daño — le sonrió.

>> Si no lo haces entonces tendré que hacer cosas que no quiero, y tú tampoco quieres, ¿O sí? — negó — Que buen niño eres mi amor.

[...]

Yoongi tiene una larga lista de traumas desde abandono hasta abuso. Investigar sobre su pasado definitivamente me había servido bastante, sólo necesitaba manipularlo un poco para conseguir que cayera.

Él sólo era un niño asustado, casi como un cachorro buscando un lugar donde sentirse seguro. Hoseok era lo más cercano a eso que tenía y ahora que se lo había quitado pronto no tendría más opciones que aferrarse a mí.

No era demasiado complejo entenderlo. Lo traté como un bebé las veces que ha mojado la cama desde que lo tengo conmigo y eso había ayudado a disipar un poco el temor tan exagerado que me tenía.

Comencé a dormir junto a él y como imaginé, había dejado de hacerse encima.

¿Ven? Sólo buscaba un lugar donde sentirse seguro.

Y yo le iba a hacer creer que tenía uno.

Por otro lado, Hoseok parecía cada vez más desequilibrado e incluso demacrado, siempre me llamaba queriendo algún tipo de consuelo y había pegado un montón de volantes en casi todo Seúl informando sobre la desaparición de Yoongi y preguntando si alguien sabía algo.

Como si se lo fuera a dejar así de fácil. Tonto.

También tenía mis ojos en Taehyung, se había retraído completamente en las últimas audiencias, pareciendo aún más inestable de lo que era, parecía afectado pero resignado.

Somi, quien sabía que era la jueza estaba claramente indecisa, pero sólo era cuestión de tiempo para que mordiera el anzuelo, así como Lalisa Manoban lo había hecho.

Por Jungkook no me preocupaba demasiado, sabía que debía tener un montón de lagunas mentales por el estado semiinconsciente en el que estuvo todo el tiempo secuestrado, por lo que incluso si lo daban de alta del hospital o lo ponían a declarar sus ideas estarían inconexas.

Sin embargo, algo me estaba causando intriga y eso era la repentina aparición de Kim Seokjin en el panorama, sabía que no era ningún relativo de Taehyung o de sus padres, por lo que ellos no podrían haberlo contratado.

El hombre parecía empeñado en demostrar que no lo había hecho, al menos no en un estado cien por ciento racional, y eso era lo que mantenía a Somi tan indecisa.

Estaba comenzando a irritarme su presencia, pero me encargaría de investigarlo bien luego.

Ahora conducía camino a la universidad, después de todo la clave aquí era seguir actuando normal, se suponía que yo no conocía a Yoongi en lo más mínimo ni había tenido ningún tipo de relación con él. Sabía de su existencia por un par de menciones de Hoseok entre conversación y conversación.

De resto, éramos extraños. 

Obsessed | JimSuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora