Prefecto Perfecto.- Percy Weasley y Tú.

Capitulo 31.

⚠️ Advertencia: Este capítulo contiene escenas +18, no trato de sexualizar a nadie dado que es un personaje ficticio, en fin, continúen.⚠️

...

A la mañana siguiente, todos se levantaron para dirigirse al King's Cross, Percy trataba inútilmente de hacer el nudo de su corbata.

—Ven aquí— la joven dejo su escoba apoyada en la cama y el pelirrojo se acercó con la corbata colgando—, algún día podrás hacerlo solo.

—Lo dudo, tendrás que ayudarme con esto el resto de tu vida.

—Estaré encantada, solo piénsalo, cuando Percy Weasley trabaje en el ministerio de magia y tenga que hacerle el nudo de la corbata cada mañana, Merlin, podría ser lo único que haga el resto de mi vida.

Percy sonrió divertido y puso sus manos en la cintura baja de la chica apegandola a si mismo para besar sus labios.

—¿Puedes bajar a nuestras lechuzas?— la joven asintió—, yo bajaré tu equipaje.

El señor Weasley, que había aguardado fuera a los coches del Ministerio, se asomó al interior.

—Suban —dijo el señor Weasley, mirando a ambos lados de la calle llena de gente. El viaje hasta King's Cross fue muy tranquilo. Llegaron a King's Cross con veinte minutos de adelanto; los conductores del Ministerio les consiguieron carritos, descargaron los baúles, saludaron al señor Weasley y se alejaron.

—Bien, pues —propuso mirándolos a todos—. Como somos muchos, vamos a entrar de dos en dos. Yo pasaré primero con Harry.

—Sigan ustedes— le dijo Molly a Percy y a __, ambos jóvenes asintieron, y luego estuvieron todos en la plataforma—. He preparado bocadillos para todos.
Aquí los tenéis, Ron... no, no son de conserva de buey.. Fred... ¿dónde está Fred? ¡Ah, estás ahí, cariño...!

Se oyó un potente silbido y pasaron unos guardias cerrando todas las puertas del tren. Percy y __ subieron corriendo porque habían sido los últimos en recibir los sandwiches de Molly. Fueron por el pasillo en busca de un compartimento vacío, pero todos estaban llenos salvo uno que se encontraba justo al final.

—Nunca me había sentado al fondo— dijo __—, y eso que parece ser el compartimento más privado, digo, mira, tiene cortinas oscuras.

—Que oportuno— dijo Percy sacando su bata y dejándola sobre el asiento, __ vio como tomaba su varita y pronunciaba dos hechizos, con los cuales cerró la puerta y silencio el lugar—. Llevo queriendo hacer esto desde anoche.

—¿Que haces, Weasley?— dijo en voz baja, casi como un susurro, porque sabía las intenciones del joven—. ¿En qué piensas?

___ pensaba seguir hablando al notar que sus preguntas no fueron contestadas pero la próxima pregunta se quedó en el aire cuando Percy rodeó su mano en su cuello robándole un jadeo, y la apego contra la pared.

—¿Eso te gusta?— pregunto Percy con los ojos entrecerrados, ella afirmó, sintió como sus piernas eran separadas por la rodilla del pelirrojo, él la beso como había anhelado hacerlo hace tiempo—, ¿Qué quieres que haga?

—Yo...

—Pide lo que quieras— la voz ronca de Percy en el oído de la joven le provocaba sensaciones que nunca había experimentado—, no seas tímida, cariño.

—Solo tocame, por favor.

—Dilo otra vez— él apretó más fuerte su cuello.

—Por favor.

Sus cuerpos estaban tan cerca que podían sentir sus respiraciones y los latidos de sus corazones, la mano de Percy abandono el cuello de la chica para bajar hasta sus pechos los cuales acaricio por sobre la blusa, y luego siguió bajando hasta su cadera dónde posó ambas manos, __ busco nuevamente los labios del chico y este beso fue aún más fogoso que el anterior, ella se separó cuando sintió los dedos de Percy subir por sus muslos entrometiéndose debajo de su falda, pero antes de llegar a dónde ella quería se separó.

—Eso no se hace— se quejo la joven y Percy sonrió, él se sentó y tomo las manos de __ para sentarla sobre si—, Perce...

—Dime, cariño— él acaricio a su novia por encima de las bragas sintiendo como se mojaban más—, ¿que ibas a decirme?

—Nada, solo sigue.

Percy sonrió y __ dejó caer su cabeza en su hombro, el pelirrojo corrió la tela para hacer círculos en el clítoris de la chica, obtuvo a cambio varios gemidos en tono bajo, y algunos temblores en el cuerpo, los espasmos de la chica hacían que su cuerpo rozará con la entrepierna de Percy haciendo que soltará suspiros pesados. ___ gimió aferrándose a Percy cuando esté metió un par de dedos mientras seguía frotando su clítoris con el pulgar, hacía movimientos profundos y rápidos, sus dedos ligeramente curvados golpeaban los lugares correctos.

—Percy...

—Espera.

El retiro sus dedos dejando a __ deseosa de más, pues estaba por obtener su orgasmo, Percy la sentó sobre su miembro y mordió su labio para evitar sonidos, a pesar de que había hecho el hechizo silenciador, sus manos estaban en la cintura de la chica guiando sus movimientos, cada vez eran más rápidos y fuertes, ambos comenzaron a gemir bastante alto por la fricción, las piernas de __ temblaban, ella desabrochó el pantalón de su novio y saco su miembro erecto y que goteaba el espeso pre-semen, lo masturbo un poco y Percy dejo caer su cabeza hacia atrás con los ojos cerrados y pequeños gemidos que aumentaron cuando ella se dejó resbalar en él.

—Se siente bien— dijo Percy entre gemidos, recostó a __ en el asiento con él encima, sus embestidas eran duras, cortas y rápidas sacando fuertes gemidos de ambos—. Oh, mierda.

La espalda de __ se arqueó chocando su pecho con el de Percy, él la sostuvo mientras tenía su orgasmo y poco después él llegó al suyo, en ese mismo momento el tren se detuvo anunciando la llegada a Hogwarts. Ambos trataron de regular su respiración, Percy se acomodo la ropa y se colocó la bata, mientras __ arreglaba su falda y su cabello.

—¿Estás bien?— pregunto Percy, la chica asintió con una sonrisa—. Bien.

—Deberíamos hacer esto más seguido— Percy miró a __ con una ceja alzada y una sonrisa burlesca—. Digo, si quieres.

—Se me ocurren varios lugares.

—¿Si?

—Si, pero primero preocúpate de salir del tren.

__ soltó una risa y salió del compartimento, el tren ya estaba casi vacío pero aún les daba tiempo de irse sin problema, al bajar, Percy tomo la mano de __ e ingresaron al colegio.

—¿Sabes? Creo que me estoy enamorando de ti.

Percy soltó una carcajada y asintió ante la frase.

—¿Tu crees? Yo creo que me enamoré de ti hace siete años.

—Si...y vamos por muchos años más.

—Por muchos más, cariño.