epilogue | our worlds collide forever

999 103 18
                                    





Recuerden la presentación no debe de tener fallas a la hora de presentar la tesis de grado. Debido a ella pueden, o no, graduarse. Esfuércense y den lo mejor de ustedes. Buena suerte.

Los pasillos de la universidad se sentían tan ajenos para Jungkook, a pesar de haber estado estudiando allí durante tres años y medio. Su alrededor de repente se volvía extraño cuando su graduación estaba a la vuelta de la esquina.

Sostuvo con una mano el tirante de la mochila que estaba colgada en un solo de sus hombros.

Había sol y no sabía si era por la costumbre de convivir con su prometido e hijo en las penumbras, pero el caliente le hacía entrecerrar los ojos y sentía la piel quemándole, a pesar de ni siquiera estar sudando. Eran apenas las tres de la tarde, por suerte, ya era su hora de salida.

—¡Jungkook!

El rubio se giró al momento en el que aquel grito resonó entre todos los murmullos estudiantiles que se detuvieron por un momento para ver el perteneciente de aquel llamado, pero luego los demás siguieron con lo suyo.

Cha Eunwoo se había vuelto un buen amigo de él, a pesar de que Jungkook desde el momento en que llegó fue una persona demasiado reservada. Tardó más de un año en poder mantener una conversación estable con el rubio, pero lo logró y después de ahí se volvieron cercanos... solo en la universidad, por supuesto, porque Kook se mantenía al margen con lo que de su vida privada se trataba.

La mayoría de los estudiantes también se lo preguntaban, porque, a pesar de que trataba de pasar desapercibido, un rostro como el de Jungkook no se podía dejar pasar. Una tez pálida, un cuerpo esculpido, una cintura pequeña, ojos cafés bonitos y un cabello rubio que gritaba 'mírame, mírame'. Fueron muchas las personas que trataron de acercársele, con buenas y malas intenciones, pero trató de evitarlas, lográndolo. Ellos le observaban cuando llegaba, cuando pasaba y cuando se iba; ojos puestos en él. Y así había sido hasta el día más reciente, no podía culparlos, por supuesto.

—¡Te gradúas en un mes! ¡Pero no te veo feliz, anda, una sonrisita, hombre! —Eunwoo exclamó. Él era más alto que Jungkook, le pasaba casi por diez centímetros y era cómico verlos lado-lado por la diferencia que había entre ellos.

—Ah, tenía otras cosas en mente —respondió, en cambio, el susodicho.

Eunwoo relajó el rostro y le sonrió, mientras acompañaba al rubio a la salida, como venía haciendo desde hace un mes atrás.

—Estaba pensando —mencionó Eunwoo, mientras chasqueaba sus nudillos—. Podríamos salir como celebración después de recibir el título, ¿qué dices?

Uh.

Jungkook miró de reojo a Eunwoo antes de seguir caminando con cuidado de no chocar con nadie. No era un secreto para nadie que no podía, y no por no poder en sí, sino que ya tenía planes con Taehyung y su bebé de próximamente cuatro años. Oh, sí, cuatro, pero parecía de dos y medio. Sonrió un poco ante el recuerdo a la vez que divisaba el exterior y al mismo carro que venía recogiéndolo desde siempre. ¡Y sorpresa! Taehyung le estaba esperando con una expresión aburrida en el rostro, mientras que estaba apoyado en el auto.

—Lo siento, no puedo, Eunwoo. Tengo planes, pero podríamos hacer una comida de celebración y de mi parte por agradecimiento por ayudarme los últimos dos años —señaló Jungkook.

Eunwoo parecía un poco desilusionado ante su respuesta, pero terminó asintiendo. Sin indagar en lo que hacía el rubio, puesto a que sabía que a él no le agradaba eso.

—Está bien.

Taehyung divisó a Jungkook a metros de distancia, sonriendo para sí mismo. También se dio cuenta del chico que le acompañaba, por supuesto que él sabía quién era. Ambos, tanto Taehyung como Jungkook, se habían tomado muy en serio el "no secretos", visto todos los problemas que desencadenó aquello entre ellos en el pasado. En vez de mostrarse celoso o disgustado, más bien estuvo curioso.

Night lovers | taekookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora