37. "La Cena"

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Capítulo 37

"La cena"

Samuel

Una cena.

Una cena era la actividad planeada para conocer a los padres de mi novia.

Una cena que tenía el poder necesario para determinar el funcionamiento de nuestra relación de allí en adelante, de saber en qué punto me dejaba con su familia.

Y es que dos días después de haberse ido de su casa Avery habló con su padres de nuevo, y aunque ella fue lo suficientemente amable e insistente en llevarme a celebrar año nuevo en su casa, su única condición fue: una cena el día anterior a la nochevieja.

El plan inicial había sido viajar el último día del año hasta Cleveland, pero con las novedades surgidas los boletos fueron comprados para el día treinta de diciembre. Así que luego de haber llegado en la mañana al aeropuerto, y de haber volado por más de ocho horas llegamos en un horario propicio al hotel en donde yo me iba a hospedar. Ya Avery me había aclarado que aunque sus padres terminaran amándome difícilmente me dejarían quedarme con ella, lamentaba que no hubiera ninguna sede de los hoteles de mi familia en la ciudad, pero al menos así nadie me reconocería tan fácil.

El sol estaba terminando de ocultarse en el cielo cuando los dos salimos del edificio a esperar un taxi, cuando estábamos a punto de llegar no pude evitar sentir la presión. Me consideraba una persona extrovertida a la cual se le hacía fácil adaptarse a cualquier grupo de personas, pero basado en las referencias que me había dado mi novia acerca de sus padres presentía que el encuentro iba a ser complicado.

—Ya mis padres llegaron —habló ella una vez que habíamos bajado del auto, tenía su teléfono en su mano y procedió a guardarlo en el bolsillo de su abrigo—, es la primera vez que les presento a alguien así que no estás solo en la incertidumbre.

No le di ninguna respuesta más que empujar la puerta del restaurante, si ella había tratado de darme ánimos estaba fracasando, porque parecía haber hecho todo lo contrario. El olor a carne, especias y picante invadió mis fosas nasales una vez que ingresé al lugar pautado. Un pequeño establecimiento de comida mexicana, de aspecto acogedor, mesas de madera y sillas acolchadas.

Un gran ventanal daba vista a la noche fría y nevada del exterior, muy cerca de él se encontraba una pareja que pasaban de sus cincuentas, y al notar que Avery caminaba hacia ellos me supuse que eran sus padres. Ella tomó aire antes de hablar y captar su atención, yo me mantuve a su lado sin decir una palabra antes del tiempo que considerara prudente.

—Buenas noches, lamento si los hicimos esperar un poco. —Los dos señores voltearon a verla, sin embargo, sus miradas se desviaron hacia mí tal vez por mucho tiempo—. Saben cómo es el tráfico navideño, nunca se llega temprano en estas fechas.

—Llegamos hace menos de diez minutos, también nos detuvo el tráfico —respondió el señor sin dejar de observarme—. Tú debes ser el novio, no sabía de tu existencia hasta hace unos días.

—Papá él es Samuel, mi novio. —Avery volteó a verme sutilmente antes de seguir hablando—. Samuel ellos son mis padres, Lewis y Rachel Cooper.

—Un placer —dije al extender mi mano derecha hasta apretar la de cada uno de ellos—, me alegra al fin poder conocerlos.

—Claro, porque no hubo suficiente tiempo en dos meses —rechistó Rachel.

—No se queden allí parados. —El padre de Avery señaló las sillas desocupadas—. Nos adelantamos y pedimos una buena cantidad de tacos al pastor.

Unexpected LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora