47. "Un comienzo, un final"

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Capítulo 47

"Un comienzo, un final"

Samuel

Durante muchos años había imaginado cómo sería el día de mi graduación. Si al final del camino Luke alcanzaría esa meta junto a mí, quiénes de mis amigos también lograrían llegar hasta ese punto. Soñaba con ver a mi papá orgulloso de mí, que Nate me observara sonriente desde el público, o tal vez que Lindsay se animara a asistir.

Había visto muchísimas fotografías de promociones que me antecedían, todas se habían hecho en el centro de la pista de atletismo y habían sido adornadas por los colores insignias de la universidad: rojo, azul y blanco.

La decoración había sido prácticamente la misma, y eso no hacía más que aumentar mi emoción. Cientos de sillas estaban agrupadas en el centro de la pista, un escenario inmenso estaba al frente y en las partes laterales y trasera estaban las gradas en las que se encontraban los espectadores.

Los aplausos inundaron el ambiente una vez que entramos en fila hacia el acto, era un día radiante y lleno de vida. En el ambiente se respiraba un aura de felicidad y júbilo, y sabiendo que tenía a mi padre y a mis dos hermanos entre la muchedumbre no podía estar más tranquilo.

Me tocó tomar asiento junto a varios compañeros a los que no trataba demasiado, pero eso no hizo que me sintiera mejor emocionado cuando les tocó recibir su título a mis amigos, de hecho casi lloré cuando vi a Luke arriba del escenario más sonriente de lo habitual. Cuando llegó mi turno no pude evitar buscar mi familia con la mirada, no estaban demasiado lejos de Gianna y America, todos aplaudían de pie en mi honor.

Lo había logrado, después de cuatro años de altas y bajas lo había logrado.

Una vez que el acto llegó a su fin Luke prácticamente corrió hacia mí, nos fundimos en un abrazo que duró al menos diez segundos. Era nuestra segunda graduación en conjunto, no había otra persona con la que hubiera deseado más compartir tales momentos.

—Dime que van a venir a almorzar con nosotros —dijo Luke luego de romper el contacto entre ambos—, todos los Bianchelli están en la ciudad y eso solo significa diversión y buena comida.

—Hablé con Harvey anoche y estuvo de acuerdo, Lindsay y Nate tampoco pusieron objeción. —Hecho que me sorprendió un poco, pero no quise ahondar en el asunto—. Al fin y al cabo somos sólo nosotros cuatro, iba a ser una tarde solitaria si no nos sumamos a sus planes.

—Mañana podremos cometer locuras en la fiesta que organizamos junto a los demás chicos, pero hoy es día familiar y no me iba a sentir tranquilo si no venías. —Volvió a abrazarme—-. Eres el hermano que nunca tuve Samuel Wright, me destroza saber que me vas a dejar para irte a Europa de nuevo.

—No seas dramático, seguro me estarás llamando por llamada todos los días. Eso sin contar que vendré de vez en cuando y que tú seguramente podrás visitarme también. —Él no soltó el agarre ni por un instante—. También eres como un hermano para mí. Un hermano chismoso pero leal y divertido.

—Te haré reír hasta que estés por marcharte en el aeropuerto, así capaz me extrañes lo suficiente como para devolverte lo más pronto posible. —Sonreí solamente para ocultar el sentimiento de tristeza que empezaba a manifestarse en mi cuerpo—. Pero mientras tanto podemos ir a mi casa.

***

El clima en Filadelfia había estado cálido por unas cuantas semanas, por esa razón había terminado abandonando mi saco y corbata, de hecho tuve que doblar las mangas de mi camisa y desabrochar unos cuantos botones. No me había visto en ningún espejo, pero tampoco dudaba que mi piel estuviera un poco más rosácea.

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