Encuentro

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Pov Atsushi.

Atsushi levantó la vista intentando distinguir a la persona que era poseedora de esa voz, intención que era entorpecida por las lágrimas que llenaban sus ojos nublando su vista, incluso aunque las limpiaba con el dorso de mano, más comenzaban a derramarse sustituyendolas, se sentía aún más patético que antes, estaba allí llorando e intentando ocultar sus sollozos frente a un total desconocido al cual no podía distinguir por culpa de una estúpidas lágrimas que no podía detener causadas por el dolor de un corazón roto y engañado. No solo eso había comenzado a entrar en pánico lo cual hizo que inevitablemente liberará feromonas en el aire y regaba porque aquel frente a él no fuera un alfa.

Ese temor quedó atrás cuando notó que no había reacción del contrario finalmente logrando limpiar sus lágrimas con un pañuelo que este le había ofrecido, volviendo a levantar la vista encontrándose con un hombre posiblemente solo unos años mayor que él o eso es lo que pensaba y con una apariencia un tanto peculiar en especial su cabello divino a la mitad entre dos colores, plateado y un lila verdaderamente hermoso, inmediatamente pensó que igual debía ser un omega si solo se dejaba llevar por su hermosa figura pero sobre todo por esa sonrisa amable que estaba dibujada en sus facciones que inmediatamente le hacían confiar.

Se levantó con la intención de agradecerle e irse de allí considerando que ya le había ocasionado suficientes problemas a la persona frente a él, era algo como esto lo que quería evitar al alejarse tanto pensando que nadie estaría allí pero al parecer se había equivocado, en cuanto enderezó su cuerpo inmediatamente sintió un enorme mareo viendo como todo a su alrededor comenzaba a dar vueltas..eso no estaba bien, lo último que escucho fue un grito que parecía ser de preocupación antes de caer al vacío.

Pov Sigma.

En cuanto vió que aquel hermoso chico , que ahora sabía que era un omega,  comenzaba a caer actuó lo más rápido que pudo siendo impulsado por su instinto atrapandolo antes de que pudiera golpearse contra el suelo, estrechandolo correctamente en sus brazos permitiéndose analizarlo por un segundo, frunciendo el ceño al ver la clara expresión de sufrimiento y las marcas que habían dejado las lágrimas en aquel rostro, que aún así era hermoso pero el mismo no podía luchar contra la opresión que surgía en su pecho al pensar que algo pudo hacerle tanto daño como para que formará semejante expresión.

Un quejido del chico lo devolvió a la realidad levantándose con cuidado aún con el menor en brazos dispuesto a llevarlo su ático en el casino donde actualmente se estaba quedando, no estaba dispuesto ni por asomo a dejar al albino en esa situación, ¿que pasaría si alguien decidiera atacarlo aprovechando su debilidad? Había considerado llevarlo devuelta a la agencia pero no podía exponerse de esa forma y pensó que si el chico se había arriesgado de esa forma es porque algo sucedió por lo cual no quería regresar allí así que suspiro resignado continuando con su camino, sintiéndose mal al notar que el peso del albino en sus brazos era menor del que debería tener.

**Time skip**

Una vez llegó a su destino dejó el albino en su cama luego se alejó un momento de la cama regresando a los minutos con unas ropas para cambiarlo y que estuviera más cómodo mientras dormía y sinceramente dudaba que fuera despertarse si no lo había hecho hasta ahora, le retiro la ropa que ya traía puesta haciendo una ligera mueca ante las cicatrices en su abdomen haciendo todo lo posible para no mirar de más mientras le colocaba las nuevas ropas, una vez terminó lo cubrió correctamente con las sábanas dispuesto a marcharse para dejarlo descansar.

Se detuvo unos momentos apreciando mejor su rostro preguntando que había llevado al detective a ese callejón porque no era tonto sabía quién era, no podía considerar que estaba haciendo bien su trabajo si no lo supiera, si no fueran suficiente los titulares de esos periódicos sobre el incidente con Guild lo suficiente para alertarlo de quien en realidad era, ahora lo que le preocupaba era que alguien se enterara de que lo había llevado allí e intentara dañarlo, ni siquiera sabía de dónde salía toda esa preocupación por el omega, apenas lo conocía desde hace unos minutos.

Se alejó de allí sentándose en el sofá de su sala de estar sin saber realmente que hacer con el chico, y sinceramente la curiosidad lo estaba matando ¿ qué estaba haciendo en ese callejón? Además parecía que no había tenido precisamente la mejor vida, pero solo le hacía preguntarse que le hizo que se alejara del lugar que lo había acogido y el cual seguramente el menor consideraba su hogar ¿ qué pudo haber sido tan grave? Las ganas de volver a acercarse a este para conseguir la información hacía que le diera ansiedad, con una habilidad como la suya seguramente le resultaría muy fácil. Pero hacer eso no sería muy amable de su parte y quizás si preguntaba directamente este se lo diría. Así que solo le quedaba esperar que despertara, acomodandose en el sofá se dispuso a recordar todo lo que sucedió esa tarde.

**F.B**

Le habían dado ganas de distraerse un poco después de un cliente especialmente malo en el casino. Era extraño que el dejara el trabajo solo por eso pero uno de sus empleados le había dicho que no sería bueno que trabajara todo el tiempo así que decidió seguir su consejo y salir unas horas además de esa forma aprovechaba para realizar unas compras que se le habían estado acumulando, pues sus suministros siempre terminaban acabándose antes del tiempo que había calculado debido a que cierto bufón siempre los tomaba sin su permiso. Unas vez conseguido todo lo primordial, continuó con lo que como tal lo había llevado a las calles de Yokohama ese día. El paseo le había servido para despejar su mente no había sido nada de otro mundo y era bastante relajante aunque por más que miraba a su alrededor no sabía realmente que hacer existiendo aún tantas cosas que desconocía.

Dando la vuelta sobre sus talones encantado de tomar el  camino de regreso al casino hasta que al pasar por un callejón escuchó unos quejidos que rápidamente se convirtieron en un sollozo, podría perfectamente haberlos ignorado pero sabía que su consciencia luego le recriminaria así que se adentró en este viendo a un chico, albino por lo que notaba acurrucado contra una pared mientras se abrazaba las piernas, se acercó suavemente tratando de alterarlo y si no lo había reconocido hasta ahora ver su rostro seguramente lo hizo y no supo porque ver esos ojos cegados por las lágrimas removió algo en su corazón.

**F.F.B**

Un fuerte estruendo lo rescató de sus pensamientos levantándose de un salto al notar de donde venía este corriendo hacia la habitación encontrándose con Atsushi en el suelo aún inconsciente acercandose rápidamente para volver a tomarlo en brazos, alertandose cuando vió el rojo que cubria su rostro agregándose sus respiraciones irregulares, una vez estuvo de nuevo en la cama colocó su mano en la frente del chico confirmando sus sospechas, a las vez que sentía la ansiedad llenarlo, el albino ardía en fiebre y decía ser atención urgentemente.

Mientras tanto en la agencia Dazai estaba tranquilamente en su sofá con su pareja, Kunikida había salido en busca del albino, Kenji como rara ves era tenía una expresión seria en el rostro, los hermanos Tanizaki sujetaban a una  furiosa Kyoka para evitar que matar al vendado intentando calmarla aunque ellos mismos estuvieran ardiendo en ira, Haruno miraba a todos con una expresión de angustia, Fukusawa igualmente preocupado que todos lo cual difícilmente podría creerse debido a su expresión,Ranpo por alguna razón se negaba a revelar la ubicación del menor y de Yosano no se sabía nada desde hace varios minutos atrás.

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Nuevo amor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora