Sigma se removió incómodo en su asiento. Había pensado que Fyodor e Ivan se irían en cuanto Gogol saliera tras Atsushi, dejándolo solo para continuar su trabajo.
Pero no fue así. Los oscuros ojos de el azabache aún lo miraban fijamente, taladrando su mente. El hombre emanaba un aura peligrosa y calculadora que helaba la sangre.
Ivan por su parte mantenía su acostumbrada sonrisa burlona, divertido al parecer con la situación. Sigma ya se arrepentía de haber propuesto una partida de poker para aliviar la tensión.
Fyodor:¿ Otra ronda querido Sigma?
Sigma:S-Si, claro
Barajaba las cartas con manos temblorosas. Reparte las cartas, temiendo lo peor. Efectivamente, su mano no podía ir peor. Fyodor por su parte lucía otra combinación ganadora.
El albino rió entre dientes mientras Sigma dejaba caer sus cartas con un suspiro. La tensión no había hecho más que aumentar y ahora se sentía completamente vulnerable ante esos hombres.
Solo podía rezar porque Gogol y Atsushi regresaran pronto para liberarlo de aquel tormento. O quizás nunca debiera haberse involucrado con personas tan peligrosas.
Los minutos pasaban como horas para Sigma, quien no dejaba de lanzar miradas nerviosas hacia la puerta de la sala de espera. Fyodor e Ivan continuaban con su juego silencioso, pero él podía sentir sus intensas miradas sobre su nuca.
De pronto, un ruido le hizo enderezarse en el asiento. La puerta se abrió lentamente, dejando pasar una delgada figura familiar. Era Atsushi, quien ingresó regalando su acostumbrada calida sonrisa.
Gogol entró tras él, aferrado posesivamente a su brazo . Al menos esto trajo cierta calma al corazón de el bicolor, quien suspiró aliviado.
Sigma: ¿Cómo te fue en la consulta?
Atsushi: Bien, Yosano-sensei dijo que solo necesito descansar.
Por su parte, Ivan y Fyodor se pusieron de pie de forma discreta. Al parecer su interés se había evaporado con la llegada de los recién llegados.
Fyodor: Será mejor que nos retiremos
Y sin más, los tres hombres se marcharon en silencio. Por fin el gerente podía respirar aliviado.
El día había sido extremadamente agotador para Sigma y los empleados del casino. La inesperada llegada de aquellos visitantes había traído consigo un aire de tensión y desasosiego.
Cuando finalmente se marcharon, todos pudieron respirar aliviados. No obstante, la inquietud aún se reflejaba en el semblante cansado de el bicolor.
Este se pasó una mano por el rostro, intentando disipar la irritación que sentía tras la larga discusión. Tenía mucho papeleo acumulado y sabía que los problemas no tardarían en apilarse si no los atendía pronto.
Sigma: Debo volver a mi oficina.Quedan varios informes pendientes.
El joven omega, quien había observado en silencio todo este tiempo, notó la evidente fatiga en la voz de el gerente. Preocupado, se acercó a él.
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Nuevo amor
FanfictionAtsushi es un omega que fue abandonado por el alfa que había jurado permanecer a su lado, el hombre que creyó era el amor de su vida así que dolido al ver que su pareja lo dejaba por alguien más decide dejar la agencia, llevándose consigo su un cora...