Nuevo amor

Alianza "forzada"

Ranpo observaba la discusión entre Yosano y Chuuya. A pesar de la evidente tensión en el ambiente, lo único que le importaba era resolver el caso lo antes posible.

Chuuya se enfrentaba a Yosano con el ceño fruncido. Sus ojos grises llameaban bajo el ala de su sombrero negro.   

Chuuya: No me diste toda la información sobre Dazai y Akutagawa. Si hubiera sabido antes de su relación, le habría partido la cara a ese bastardo. Por tu culpa, Ryu acabó secuestrado.

La doctora sabía que sus palabras enfurecerían aún más a Chuuya, pero no había podido prever que Dazai fuera capaz de lastimar de esa forma al omega que había marcado. Se había equivocado al no dar la alarma antes.

Miró al pequeño beta, quien hervía de ira frente a ella. Debía admitir que tenía razón en reclamarle. Aunque verlo en ese estado despertaba una sensación extraña en su pecho, y no pudo evitar pensar que se veía adorable.

Rápidamente sacudió la cabeza para alejar ese pensamiento. Definitivamente no era el momento.

Yosano: Lo siento. Debí haberte informado antes. Asumí erróneamente que ni siquiera Dazai sería tan estúpido.

La tensión podía cortarse con un cuchillo en la habitación. El pelirrojo fulminaba a Yosano con la mirada, mientras ella se mantenía imperturbable, aunque internamente culpable por no haber sido más franca.

De pronto, Ranpo se levantó elegantemente de su asiento, hastiado de la disputa.

Ranpo: Basta de peleas .Lamentables o no, ya no pueden remediarse los errores del pasado

Yosano asintió, agradecida por la intervención del detective. Sin embargo, no pudo evitar que su mirada se desviara de nuevo hacia Chuuya.

Debía admitir que el temperamental beta resultaba bastante atractivo cuando se enojaba de esa manera, con el ceño fruncido y los ojos llameantes.

Ranpo: Sé dónde encontrar a Dazai.

Todos lo miraron expectantes. Chuuya enarcó una ceja, invitándolo a continuar. Ranpo esbozó una enigmática sonrisa y reveló el fruto de su asombrosa deducción.

Chuuya apretó los dientes, ansioso por partir. Pero Ranpo lo detuvo con una mirada.

Ranpo: Llévate a la doctora. Su habilidad podría ser crucial

El orgulloso ejecutivo entornó los ojos, aún resentido. Sin embargo, algo en la penetrante mirada de el detective le hizo entender que no tenía opción.

Gruñendo una maldición, miró de soslayo a Yosano. Ella le devolvió una mirada decidida, preparada para lo que fuera.

Chuuya: Muy bien. Vámonos ya, doctora.

Ambos salieron a toda prisa.

El mafioso maldijo internamente mientras caminaba al lado de Yosano. Sabía que la doctora no sentía ningún aprecio real por Akutagawa o la mafia. Su único interés era detener a Dazai.

Aún así, había aceptado su ayuda gracias a las palabras de Ranpo. El detective rara vez se equivocaba y Chuuya estaba consciente de que la habilidad de Yosano podía serles de utilidad.