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Releí numerables veces el mensaje que Beomgyu me había enviado. Me había citado en una hora en el parque para que aprendiera a montar bicicleta. Pensaba que era algo que dijo para hacerme sentir mejor, no que fuera a enseñarme de verdad. Sentí la adrenalina subir por mi cuerpo, ¡Iba a aprender a montar bicicleta! Pataleé en el colchón de la ilusión, siempre había querido aprender. Miré la hora de nuevo, tenía cuarenta minutos para prepararme. Mi hermano bajó las escaleras del sótano preparado para irse al gimnasio, en la mañana se quedó dormido y por eso había decidido pasar la tarde allí con sus queridísimas pesas. Aunque en el fondo quería quedarse con Uk en casa.

-Papá está en el salón-vi cómo abrió la pequeña nevera del sótano sacando una botella de agua antes de darse la vuelta-¿Tenías pensado salir?

Me miró tras ponerse la bolsa al hombro. Estaba literalmente luciendo mis bragas de Snoopy dando la vuelta a los pantalones cargo negros para ponérmelos. Si no fuera porque mi hermano se dio la vuelta alarmado ye pidió perdón rápidamente, estaría escuchando mis gritos llamándolo de todo.

-Supongo que sí-susurró-¿A dónde vas?

-A dar una vuelta-me subí los pantalones y le indiques que podía darse la vuelta.

Sonreí con todo el pelo en la cara, al ponerme la camiseta me había despeinado por completo. Mi hermano dejó la mochila y se acercó susurrando que era un desastre. Me mandó darle la espalda y en menos de un minuto ya me había hecho una coleta alta. Un peinado que no me molestaría para mi objetivo: aprender a montar en bici.

-Vamos, llego tarde al gimnasio.

Agarré la cartera y mi móvil antes de salir tras él escaleras arriba. Anduve a su lado siendo tapada por él, mi padre no me vio. Salí ilusionada, sientiendo la euforia de aprender algo tan básico.

En el parque visualicé a Beomgyu junto a su bicicleta de aluminio, o de lo que fuera. Estaba sentado en un banco mirando el celular con unos cascos puestos. Paré frente a él con una sonrisa, me la devolvió tras inspeccionar mi ropa.

-He visto tutoriales para enseñarte de forma satisfactoria, Soohael; si no aprendes en un par de días es por tus capacidades.

Le di una inofensiva patada contra su zapatilla. Se estaba metiendo conmigo de nuevo. Se levantó estirando.

-Tengo que irme en una hora y poco, así que vamos a ello.

-¿A dónde vas?

Agarró su bicicleta y comenzó a tocar el sillín, estaba acomodándolo a mi altura.

-Kai y yo tenemos pendiente un partido de baloncesto, ¿Quieres venir?

-No me apetece mucho, los balones y yo no nos llevamos muy bien.

Terminó de acomodar la bicicleta. Me miró esperando a que me subiera. Respiré hondo antes de pasar la pierna por encima para acomodarme en el sillín. Beomgyu me explicó los frenos, el timbre y que no girara el manillar de forma brusca. Parecía sencillo, pero sabía que iba a matarme más de lo que pensaba. Primero me sugirió caminar sentada sobre el sillín, para hacerme al idea de la inestabilidad del manillar. Beomgyu iba tras de mí grabándome, si me caía le haría borrar ese vídeo. Me sentía estúpida, y agradecí que no hubiera nadie en el parque, o en esa zona al menos.

-Mi niña se hace mayor.

Fingió secarse las lágrimas. Si pudiera le lanzaría la bicicleta a la cabeza.

-Ahora trata de dar pasos más largos, manteniendo el equilibrio un segundo.

-¿Seguro de que esto va a funcionar?

-Lo decía el tutorial.

Me caí, dos veces contra la arena y a ls tercera decidimos dejarlo por hoy. Nos sentamos en el banco. El maldito de Beomgyu se estaba riendo de mi arañazo en el brazo. Según él era una marca de batalla y de alguna forma lo empezó a enlazar con un videojuego en el cual ganó a Yeonjun y a Taehyun hace poco. La manera de enlazar temas de esta persona era fascinante.

PARADISE, FULL OF LIES - YEONJUNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora