PARADISE, FULL OF LIES - YEONJUN

20

Notaba mis piernas temblar. Podría llevar diez minutos frente al espejo viendo el vestido aferrado a mi cuerpo y el peinado que mi hermano me había hecho hacía unos veinte minutos. Había llegado el día, mi graduación. El grupo que tenía con Sunjin y el resto no paraba de sonar, estaban mandando muchísimos mensajes igual de nerviosos que yo; pero el hecho de que iba a obtener el diploma de mi graduación no me tenía así de nerviosa. Las invitaciones a la graduación habían llegado a Yeonjun, Kai, Beomgyu y Taehyun, todos iban a venir. Estaba preparándome mentalmente para que mi hermano supiera que pasé por completo de su aviso y me había acercado a todos ellos. Y lo más raro de todo, mi madre iba a asistir a la graduación. No estaba alegre o enfadada, simplemente indiferente. Tenerla allí no me afectaba en nada, pensaba que no estaría y di por hecho que estaría ausente. Saber que iba sería como que la madre de otra persona fuera, no me importaba en absoluto. En cambio, me emocionana que mis amigos fueran.

—¿Estás lista?—mi hermano me abrazó el cuello por detrás.

Sonreí al espejo, estaba muy guapo también. Nos hicimos un par de fotos antes de subir con cuidado de no despertar a papá, que de nuevo dormía en el sofá junto a su botella de alcohol. Mamá estaba fuera con un coche que no veía desde hacía años; ¿Conducir se olvidaba o era como la bici? Me acerqué de la mano con Soobin. El coche llevaría aparcado meses, desde año nuevo casi.

—Disfruta la graduación, ¿Vale? Lo demás no importa.

Me abroché el cinturón conteniendo la emoción. Miré el teléfono leyendo los mensajes de Sunjin, literalmente mandaba mensajes incoherentes, solo letras aleatorias y Doyoun mandando fotos de su cara cerca de la cámara diciendo en rojo que Sunjin se desmayó sobre el teclado.

Llegando al instituto salió en mi pantalla: "Beom mandó una foto". Entré en el chat encontrándome una foto de los cuatro apoyados en el muro de mi instituto. Beom llevaba pajarita al igual que Kai mientras que Taehyun llevaba corbata. Los tres sonreían en la cámara. Tras ellos se veía a Yeonjun fumando con la mirada perdida en el suelo. ¿Qué narices llevaba puesto? Siempre vestía con un estilo particular, pero no pensaba que hasta cuando el concepto era elegante y traje podía permitirse innovar tanto. Llevaba una camisa que al parecer no tenía mangas, una chaqueta de vestir que había transformado en un chaleco, ¿Esto eran guantes de cuero? Le llegaban hasta el codo, y la corbata estaba bastante desarada. Los pantalones eran de vestir, y llevaba unas botas puestas, pero la parte superior era fascinante.

—¿Invitaste a alguien más?—preguntó Soobin mirándome confuso.

Mamá paró frente a la puerta y nos dijo que saliéramos, ella buscaría dónde aparcar y entraría por su cuenta.

—Sí, gente que no te va a gustar.

Abrí la puerta buscando con la mirada a los cuatro estúpidos. Mi hermano salió llamándome.

—¿Qué quieres decir con que no me va a gustar, Soohael?

—¿Te acuerdas de que te dije que no te sorprendieras si yo también te ocultaba algo?

—¿Qué has hecho, Soohael?

Iba a responder cuando los problemas se hicieron paso primero. Escuché a Beomgyu gritar mi nombre. Me di la vuelta sonriendo al ver a los cuatro acercándose. Yeonjun apagó el cigarro con sus botas negras que llegaría hasta la mitad de su espinilla.

—No me jodas—escuché susurrar a mi hermano.

Me acerqué a Beomgyu y permití que este agarrara mi mano y me diera una vuelta.

—¡Estás preciosa!—gritó llevándose la mano a la boca después.

Kai grababa desde un par de metros más lejos y se acercó preguntándome cómo me sentía al estar a punto de graduarme. Respondí a la cámara que estaba nerviosa, demasiado. Taehyun me enseñó el dedo pulgar, eso era que aprobaba el vestido. Di dos pasos hasta estar frente a Yeonjun, podía ser la quinta vez que me inspeccionaba. Llevó su mano derecha a la mía, me dio una vuelta como Beomgyu y asintió sonriente.