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Tomé de mi zumo escuchando a Seonhu hablando de uno de sus amigos de clase, al parecer se durmió en plena charla del coordinador babeando sus apuntes. Mi mente no estaba prestándole mucha atención, tenía los ojos fijos en Yeonjun que entraba al campus con Wooyoung y Beomgyu. Supuse que se habían saltado sus clases.

-Enamorada, ¿Quieres caramelos o no?

Asentí a Myung aceptando sus dulces. Volví la mirada al frente, se estaba acercando Beomgyu con lo que aparentemente eran bolsas del McDonald's. Asintió según se iba acercando y sacó unas patatas de dentro de la bolsa.

-¡Gracias!

Beomgyu miró hacia donde se iba su grupo y murmuró que Yeonjun tenía los nuggets.

-Yo también quiero amigos así-susurró Ali agarrando una de mis patatas.

Tenía suerte, mucha a decir verdad. La existencia de esos cuatro chicos me habían salvado la vida, y no exageraba en absoluto.
Yeonjun aceleró el paso hacia nosotros sin quitar su deslumbrante sonrisa. Me dejó la caja de nuggets sobre la palma de la mano y dejó un beso en mi frente.

-¿Tus clases bien?

-Mejor que las tuyas-susurré.

Se mordió el labio conteniendo la sonrisa. No me estaba riendo, para nada. Llevaba allí casi una semana y no le vi entrar más que una vez al edificio, no sé si a clase o al baño. Beomgyu se fue gritando a Hannie que ella tenía su refresco. Esos dos se llevaban genial, seguramente pot su gran parecido.

-¿Hoy haces algo?

Señalé a Haru y asentí. Yeonjun hizo una pequeña mueca moviendo el refresco de su mano. Haru no tardó en decirme que pasara el receso con él ya que luego estaríamos ocupados. Yeonjun tiró de mi mano sin dejar que respondiera. Al parecer le gustó bastante la idea que le había dado Haru.

-¿A dónde vamos?

Me llevó hasta su grupo de amigos. Agarró un par de cosas de la bolsa de un rubio mientras hablaban de algo que no llegué a escuchar. El aura de su grupo era extrañamente desagradable, como si estuvieran mirándome y hablando de mí; aunque no era el caso. me sentía insegura entre tanto desconocido. No conocía ni a un cuarto del grupo, y sorprendentemente ellos a mí sí me conocían porque me llamaban por mi nombre.

-Eres su novia, ¿no?-preguntó un sonriente chico. Asentí incómoda, ¿Por qué me llevó allí?-Ya...-el chico rió mientras se alejaba, ¿Qué significaba eso?

-Ya está, vamos a sentarnos por ahí.

Seguí a Yeonjun procesando lo raro que eran sus amigos y lo bien que le quedaba el azul oscuro en la ropa. Me dio una pequeña vuelta antes de sentarse en un banco bajo la sombra de un árbol. Me senté a su lado comiendo los nuggets en silencio. Mis ojos no se apartaban de su perfil, él tenía la mirada perdida mientras comía patatas, al menos hasta que decidió romper el hielo y cazarme de lleno observándolo.

-¿Cómo vas en cla...? ¿Me estás mirando?

-¿No puedo?

Yeonjun sonrió volviendo a mirar al frente. Me preguntó qué tal mis clases y en casa, la verdad, me gustaban mucho. Me entretenía, y sino tenía a Haru y Myung para pasarnos notitas durante las clases. En casa también iba bien, Soobin cada día era más cercano a mis amigos y hacía todo más cómodo. Echaba de menos despertar con Yeonjun, y sobre todo a Inna. Pero Uk tenía nuevos amigos en casa, aunque interactuaban menos que Inna y Uk.

-Tu grupo de amigos es un poco raro.

-Lo sé, ¿Te dijeron algo?

-Nada importante-seguí comiendo, me apoyé en su hombro y le susurré que le quedaba bien el azul marino. Él me susurró que me quedaba bien el morado, sabía que diría eso. Acaricié su cabello antes de decirle que me gustaba su cabello largo, Yeonjun tocó con cuidafo mi rostro antes de susurrar que no se lo cortaba porque me gustaba. Sonreí antes de que nuestros labios se juntaran. Sentía un poco de necesidad en el ritmo, pero a su vez era uno bonito. Lamió mi labio inferior dejando en mi rostro una pequeña sonrisa. Me subió sobre sus piernas rodeando mi cintura.

PARADISE, FULL OF LIES - YEONJUNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora