DEVUELVEME LAS ALAS VEGASPETE BIBLEBUILD MPREG KINNPORSCHE

Capítulo 11: Arm

Otra porque ya me desesperé y a lo mejor el fin de semana no avanzo porque me estoy mudando y ya voy a entrar a la escuela 🤡🤡🤡

Más de un mes, había pasado exactamente, más de un mes desde que Pete llevaba trabajando en aquella cafetería, exactamente un mes. Era el mejor trabajo de su vida últimamente sus últimos trabajos habían sido los mejores, el restaurante donde estaba era muy bueno si no fuera porque gracias a Vegas lo despidieron así que desde ese día decidió no dar ningún aviso al menor sobre el lugar donde estaba.

-Me gusta tu tatuaje. - Esas palabras vinieron tan de pronto a los oídos de Pete que hizo que cubriera su tatuaje.

-Gracias.

-¿Pero por qué lo ocultas? me parece muy bonito, ¿tienes otros?

-Sí tengo- respondió un poco nervioso -Pero no los muestro mucho, lo se soy extraño.

Arm sonrió acercándose a Pete despeinándolo al verlo un poco serio -No te enojes.

-No estoy enojado- Pete sonrió.

-Si lo estabas.

-Dejen de pelearse como novios- uno de los chicos ingreso amarrándose el mandil.

-Yo no... ah olvídalo, iré a almorzar- Pete dejo los billetes en orden y se fue al lugar donde solía almorzar cada vez que el otro trabajador venia.

El café ese día cerró una hora antes y recibió su segundo sueldo así que aprovecho para llevar pollo frito a casa. Apenas abrió la puerta escucho los singulares gritos de pelea de los demás, esa parecía una típica casa de niños y con Chay susceptible las 24 horas del día era aún peor.

-¡Te comiste todo el helado!- Grito Chay con un recipiente vacío.

-Ya no había casi nada- Khun le dio la espalda.

-¡Pero era mío!, yo lo necesito más que tú.

-Al final lo terminas vomitando- Pete tiro sus llaves en el mostrador

-¿No puedo llegar sin verlos pelear?- preguntó.

-¡Khun se comió el helado que Porsche me compro!

-Khun sabes muy bien...

-Si ya se, que él bebé bla bla, pero yo también tengo antojos, tantita justicia para mi estómago - Porsche salió de la cocina al reconocer la voz de Pete. El pelinegro dejo las bolsas en la mesa y todos corrieron ante el olor del pollo, cualquier pelea había sido olvidada y todos estaban en silencio devorando sus piezas de crujiente y caliente pollo.

-Saliste temprano- Porsche fue el primero en terminar.

-Sí, cerraron temprano hoy así que aproveche para comprar algo.

-Gracias- hablo Chay con un pedazo de pollo en su boca.

-Vegas llamo aquí, dijo que estaba tratando de comunicarse contigo sobre algo urgente pero no le contestaste ninguna llamada.

-Que molesto ese tipo- el timbre había sonado en ese mismo instante y todos se miraron deteniendo cualquier movimiento que estuvieran a punto de hacer.

-Oh no... seguro es Vegas, por favor que salga alguien que no sea Khun, díganle que no estoy, que llegare a las 5 de la mañana.

-Que exagerado- Chay soltó el ala de pollo que tenía, limpio sus manos y fue hasta la puerta, generalmente estaba destinado a cubrir a Pete, ni siquiera se molestó en ver por la pantalla de la cámara porque ya sabía que era Vegas pero al abrir la puerta su sorpresa fue otra. El peli marrón se quedó de pie, con la mano en la manija, sin mover un musculo y con una sensación de sorpresa al ver a Vegas parado frente a él y a su lado la persona por la que había llorado más de un mes. La primera reacción de Chay fue cerrar la puerta pero Vegas colocó su mano impidiendo que lo haga.