Julián se levanta con la luz entrando por la ventana una vez más. Ya se le hizo costumbre, dejó de molestarle tanto.
Mira a la cama del lado, Cristian y Lisandro compartiendo el colchón de una plaza.
Ríe bajo viendo como los pies del cordobés se escapan de las colchas y sale de la habitación.Se dirige al baño, se lava el rostro y baja a la cocina para poder desayunar debidamente.
Se prepara el café y frunce el ceño escuchando un par de puteadas provenientes de afuera, se asoma por el ventanal corriendo la cortina y ve a Enzo hablar por teléfono.
Su ceño está fruncido, su mano parece apretar el teléfono con bronca pero su mirada denota otra emoción que Julián no logra descifrar.Su pecho duele un poco al verlo en ese estado, alterado, enojado. No le gusta.
Decide no indagar hasta que el muchacho termine con la llamada por lo que sigue con el desayuno dándole vueltas al asunto en su mente.
Después de un buen rato entra a la cocina refregandose el rostro, gira al escuchar la taza apoyarse y ve a Julián quien le dedica una sonrisa sincera.-Buen día- saluda el castaño y Enzo alza una mano subiendo las escaleras.
A Álvarez no le gusta ese saludo.
Lo sigue con la mirada y ve que aún teclea mensajes para alguien.
Mueve el café y decide tomar lo que le queda de un solo trago, se le fue el apetito.-Hola- saluda alguien y Julián se gira, es Nahuel.
-Hola- corresponde el saludo con una sonrisa que no es tan genuina actualmente.
No después de ver a Enzo así.
-¿Todo bien?- pregunta Nahuel y a Julián le parece raro que este le saque charla pero aún así contesta.
-Todo bien, ¿Vos?- lava su taza y la enjuaga con rapidez.
-Todo tranqui- asintió y Julián dejó a Molina desayunando solo por subir al piso de arriba esperando ver si Enzo se encuentra bien.
Sube las escaleras y ve a Enzo a punto de entrar al baño.
-Enzo- habla para que este se detenga y lo hace.
-¿Pasa algo?- pregunta mirando al cordobés.
-¿Estás bien?- se acerca de a poco y en los ojos del azabache se lee con claridad la duda.
-Eh sí- responde después de unos minutos. -Voy a...- señala el baño excusándose y entra dejando a Julián solo.
Álvarez suspira y se gira escuchando otra puerta abrirse, es la de su habitación.
-Hola Juli- saluda Lisandro sonriendole, Cristian alza una mano saludandolo también y baja a la cocina.
-Hola Licha- le sonríe y besa su mejilla.
-¿'Tas bien? Tenías una carita recién- comenta y Julián suspira.
-Sí, va, qué se yo- alza sus hombros. -Después te cuento bien- asiente con una mueca en el rostro.
La mañana transcurre con tranquilidad hasta que a Joaquín se le ocurre poner música al palo y Julián solo quiere un rato de paz y silencio.
-¡Salimos a comer en quince!- grita Paulo sin haber avisado nada con anterioridad y Julián tiene que buscar con rapidez que va a usar para salir.
Arma varios conjuntos y cuando se decide por estar más satisfecho con alguno se cambia y baja las escaleras.
En el living está Oriana charlando con Lisando y Cristian mientras que Enzo teclea cosas en su teléfono nuevamente.
A quién le escribirá piensa Julián y es sacado de su repentino pensamiento por Paulo quien avisa que ya encontró a donde salir a comer.El grupo sale de la casa y sienten como la ola de calor los arrasa. El sol arde por la hora del día y no corre ni un poco de viento haciendo que comiencen a sudar a los pocos minutos de caminar.
El camino no es largo, llegan hasta el centro a un local que parece bastante nuevo y con un aire juvenil que les agrada.
Entrar y se ubican en varias mesas juntándolas. Un mesero toma su orden y charlan sobre trivialidades mientras esperan la comida.
Julián aporta poco y nada a la conversación de Lisandro y Paulo ya que está muy entretenido mirando a Enzo.Fernández escribe, escribe y escribe y a Julián cada vez la intriga lo come más.
En un descuido, Enzo estira su pie y le pega a Julián. Cruzan miradas y Enzo la evita al instante fingiendo que nada ocurrió y Julián suspira nuevamente.
Odia tanto la indiferencia que el morocho está teniendo con él.-Ya les traigo lo que falta- avisa el mesero para seguir trayendo los platos faltantes y las bebidas junto con eso.
La comida es un tanto densa para Julián que se la pasa alternando su mirada entre la comida y a quien tiene sentado al frente.
Fernández come con rapidez y sigue usando su teléfono ahí mismo.
Como le gustaría a Julián que le contará a él las cosas y no a quien le hablaba por su teléfono.-¿Siesta y un ratito de playa?- pregunta Paulo y el resto acepta encantados.
Pagan las consumiciones y salen del lugar caminando de vuelta a la casa.
Una brisa pasajera los acompaña cada tanto y eso aliviana un poco el calor y la angustia que Julián lleva consigo.
Entran a la casa y sube cada uno rápidamente a su habitación.-Andá a dormir un rato y después voy- promete Lisandro a Cristian quien asiente y después de un pico fugaz cada uno se marcha a donde debe.
Julián se encuentra en la habitación acostado boca arriba dándole vueltas a su angustia desde hace un buen rato.
Lisandro entra a la habitación y se tira encima de él recibiendo unas buenas puteadas.
Después de acomodarse finalmente en la cama de Lisandro este le pregunta a su amigo.-¿Por qué estás así?-
-¿Así como?- pregunta Julián mirándolo.
-Angustiado, triste, no sé- alza sus hombros y Álvarez se refriega el rostro.
-Me preocupa Enzo- admite y Lisandro posa su atención en su amigo quien le cuenta lo que escuchó y vió esa mañana.
Martinez se había dado cuenta de que a Enzo le sucedía algo ya que siempre estaba molestando o hablando y hoy no hacía ninguna de ellas.
Cuando Enzo está mal no pasa desapercibido a los ojos de nadie.n/a: comenten, mua mua💞💞