𝗦𝗨𝗠𝗠𝗘𝗥 𝗛𝗢𝗨𝗦𝗘; 𝗲𝗻𝘇𝗼 𝘅 𝗷𝘂𝗹𝗶𝗮́𝗻 ✓

27

Lisandro y Cristian se pasaron un poco de la siesta, al no poner alarma dormían a más no poder.
Se levantaron a las ocho y después de un rato más de fiaca en la cama fueron al comedor donde había un torneo de truco improvisado.

— ¿Qué hace' ahí parado? — le preguntó Cristian a Nahuel.

— No sé jugar. — admitió y el otro lo miró incrédulo.

— Me 'tas bolaceando. —

— No boludo, nunca supe jugar. — admitió y Lisandro se carcajeó.

— Ya sé porque perdíamos siempre cuando hacíamos equipo entonces. — comentó el gualeyo entre risas.

Julián entra a la casa cerrando la puerta tras él y a Lisandro lo invade el miedo y los nervios.
Cristian acaricia su mano y le susurra unas palabras que lo tranquilizan y lo animan a por fin decirle la verdad a Álvarez.

-Juli, ¿Puedo hablar con vos?- le preguntó Lisandro.

-Sí, obvio Licha- asintió Julián y salen juntos a la galería.

Parece ser que era el lugar de las charlas serias.

-Se que te vas a enojar conmigo por esto, pero espero que me perdones porque no lo hice con mala intención- comenzó casi temblando.

Estaba cagado hasta las patas.
Julián frunció su ceño, no entendía lo que Lisandro le quería decir.

-¿Enojar con vos Licha? No creo- negó con su cabeza.

-Fuí yo el que le mandó el mensaje a Paulo- admite por fin y solo recibe una dura mirada del cordobés.

Julián estaba procesando todo, no podía creer que hubiera sido Lisandro quien envió aquél mensaje desde su celular. ¡Hasta se había peleado con Enzo! Había desconfiado de él y resultó ser la persona que menos esperaba.
Álvarez se levantó sin dirigirle una sola palabra y eso fue como una bala al pecho, su primer amigo real después de tanto y la cagaba con algo tan boludo como enviar un mensaje.
Entró de nuevo en la casa con ganas de quedarse llorando sin hacer nada, buscó a Cristian y lo abrazó con fuerza, sintiendo como los brazos del morocho en un instante se envolvían en su cuerpo.
Lisandro se hacía mucho la cabeza y cuando la cagaba con alguien era mil veces peor, se culpaba demasiado y realmente terminaba sintiéndose mal consigo mismo.

-Ya está, amor. Hiciste bien en decirle- le aseguró Cristian acariciando su espalda con suavidad, paseando su mano de arriba a abajo.

-Soy un boludo- soltó con bronca y tristeza mezcladas.

Sentía tanto a la vez que hasta el costaba formular una idea coherente.
Mientras Lisandro se lamentaba con el consuelo de su chico, Julián buscaba a Enzo por todos los rincones de la casa, hasta que lo vió sentado en la parte de abajo de la escalera, un lugar bien escondido.
Utilizaba su celular, estaba en malla y sentado contra la pared.

-Enzo..- lo llamó Álvarez y el otro lo miró de reojo, pero no le dijo nada.

Julián suspiró, esta vez la había cagado él y disculparse era más complicado de lo que pensaba.
Se sentía algo nervioso, era el efecto Fernández o eso suponía.

‐Enzo ya sé que no fuiste vos- comenzó.

-Ah- contestó el otro de forma fría y distante.

¿Qué quiere? ¿Que lo felicite y le haga una fiesta con una torta que diga "¡Te diste cuenta!" piensa el bonaerense.
Realmente se había enojado con Julián, ¿Qué culpa tenía el de que alguien hubiera mandado un mensaje en su nombre? ¿Por qué no le había creído que no fue él? ¿Acaso no confiaba?

-¿No me vas a decir nada?-

-¿Yo soy el que te tiene que decir algo Julián? Me tiraste mierda sin pensarlo dos veces y ¿Qué? ¿Me tengo que disculpar yo? Dejate de joder- dice indignado por la postura del otro.

Cierra el jueguito de truco de su celular, se levanta y pasa por el lado de Álvarez, tratando de huir de esa conversación porque siendo honesto no tiene ganas de escuchar a Julián en ese momento.

-Enzo- escuchó a sus espaldas, pero lo ignoró.

Y bueno, estaba dolido por lo que Julián le había dicho, necesitaba un tiempo para él aunque sabía que iba a terminar perdonando a Julián.
Álvarez no insistió después de haber sido ignorado por Enzo, se quedó angustiandose solo.

-¿Fuiste vos, culiado?- le preguntó Enzo a Lisandro que estaba como garrapata con Cristian.

Romero le dedica una mala mirada a Enzo.

-¿Lo del mensaje?- le preguntó Lisandro.

-Sí- asintió Enzo.

-Sí, fui yo, perdón Enzo- se disculpó apenado y Fernández le restó importancia.

-Ya fue- negó con su cabeza. -¿Salimos hoy a la noche?- preguntó de la nada haciendo que Cristian suelte una risa.

-¿Te querés poner en pedo?- le preguntó y el bonaerense asintió. -Salgamos entonces, si los pibes quieren-

Con rapidez organizaron algo para la noche, decididos a dársela en la pera, como Enzo decía.
Julián no se veía muy contento con aquellos planes, pero no iba a quedarse solo en la casa, lamentándose por sus errores.
Además de que Paulo le había insistido para que fuera.

-Sabes..- soltó Dybala peinándose.

-¿Mh?-

-La extraño a Ori- admitió atándose los cordones. -Pero me dí cuenta que así estamos mejor, ¿Viste? Como que nuestra relación no era nada que ver a lo que Lean y Rodri me hacen sentir. Es como muy diferente y me emociona, pero a la vez me pone nervioso-

Julián lo escucha atentamente y le dedica una sonrisa suave y comprensiva.

-Las relaciones siempre son distintas, porque las personas lo son. Lo importante es que vos estés bien, feliz, además de que estás experimentando y es normal- asintió Julián revisando su pantalón.

Odiaba un poquito a los pantalones negros porque parecía que nunca terminaban de estar cien por ciento limpios, pero le encantaba como le quedaba dicho color.

-Sí, lo sé, pero re brusco el cambio. De estar en una relación heterosexual a estar con dos chabones- pensó.en voz alta.

-¿¡Ya están juntos!?- preguntó Julián.

-Es una forma de decir, tarado. Nos estamos conociendo y así, besito por acá, besito por allá y todo eso- le comentó sobre su relación.

Cuando la charla termina y los chicos les gritan que bajen porque están por irse, acatan esa orden.
Al llegar a la sala Julián ve a Enzo y siente que puede caerse en cualquier momento.
Este sale a matar pensó.

n/a: chau amistad julicha(? jajdj
hay un os julienzo del partido de hoy en mi perfil si se quieren pasar 💞