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Varios días habían pasado desde la confirmación de Paulo y Oriana como pareja. Todos los habían felicitado y por supuesto, Dybala había sido descansado por pollera.
Julián movía la cabeza a la par de Enzo mientras se encargaban de la comida. Habían puesto música y disfrutaban del momento al ritmo de canciones que Enzo había puesto.
-Muñeca yo te gusto cuando hago rkt, sé que estás buscando que está turra te la dé- canta Enzo picando cebolla.
Julián ríe y toma un trago de agua.
-Habría que ir llamándolos para que coman- piensa Álvarez en voz alta y Enzo asiente.
‐¡El que no se levanta se queda abajo de la mesa!- grita al pie de la escalera y el castaño suelta una carcajada por su forma de despertar al resto.
Oriana y Paulo bajan instantáneamente al estar despiertos desde temprano.
-¿Qué cocinaron?- pregunta Paulo acercandose a la cocina.
-Fideito' con tuco- habla Enzo y tira un beso al aire con la mano haciendo montoncito.
‐¿Qué haces?- ríe Julián mirándolo.
-Así hacen los italianos, cero cultura general vos- dice y Álvarez suelta una carcajada que retumba en la casa.
-Sos un tarado- niega.
-¡Sí es verdad!- habla indignado.
-Pau, vamos a poner la mesa- habla Oriana y el cordobés asiente ayudándola con aquella tarea.
La mesa está puesta y los platos empiezan a ser servidos cuando el resto de la casa está sentada. Cristian y Lisandro tan melosos como siempre, Julián riendo de las pavadas de Enzo pero cierta tensión hay en el ambiente, justo en la punta de la mesa.
-Che, habría que hablar de las tareas de la casa- empieza Paulo y todos le prestan atención. -Porque hay algunos que no hacen ni bosta- suelta mirando fijamente a una de las chicas.
La rubia lo mira indignada.
-¿Más obvio no querés ser?- recrimina soltando el tenedor bruscamente.
Lisandro mira el chisme de cerca, palpando la tensión, siendo tan chusma como solo puede serlo él.
-Y bueno, ¿Qué queré' que te diga? E' la verdad- alza sus hombros Dybala.
-Flaco la tenés conmigo, dejate de joder- rueda sus ojos. -El otro día en la playa también, flasheaste y te pusiste a pelear- habla con indignación.
Paulo suelta una risa amarga.
-Vos me discutiste ese día, primero que nada- habla serio. -Y segundo, las cosas como son, vos no haces nada para colaborar en la casa- rueda los ojos indignado.
-A mí no me trates como a Oriana- dice y esa frase hace que Dybala estalle.
-Pero, ¿Qué mierda decís? ¿Cuándo la traté mal yo a Ori? Y a vos ni te falté el respeto- rueda los ojos bastante enojado.
