Luna Negra: Lo que nos une

"Clan Bennett"

“La leyenda de Izan”

Eso tocó sus alarmas de curiosidad y lo tomó. Al abrirlo, en la portada había una imagen de una figura masculina posicionado con un pie detrás del otro y los brazos extendidos, rodeado por ruinas y escombros, con figuras pequeñas arrodilladas ante la figura.

A la bruja le pareció magnifico e intrigante de cojones, estaba ansiosa por leerlo. Así que fue a la primera página, había frases muy interesantes.

Izan, es un nombre de la época de los inicios de la magia y de nuestro mundo, no se sabe el significado exacto, pero lo que más se le acercan son: Él es único, ninguno se le iguala, el excepcional, el que ha venido a juzgar, entre otras.

“Él es el destino, por lo tanto, él lo forja”

“Es el apocalipsis en persona, es la vida y la muerte, todo en un solo ser”

“La realidad es su esclava, pero la naturaleza lo esclaviza a él”

Esa frase es la que más le interesó. ¿Qué significaba que la realidad era su esclava, pero la naturaleza lo esclavizaba a él? Era como un acertijo y a ella le encantaban los acertijos. Tomaría nota de algunas frases.

El libro hablaba de un ser que supuestamente existió hace dos mil años, durante una guerra sobrenatural de todas las especies. También nombraba a otras especies extrañas que ya no existían, las cuales se extinguieron durante la guerra, por culpa de este ser llamado Izan.

Entre ellas los Slibings, que cambiaban de forma en todas posibilidades. Los Metranos, que su composición física cambiaba a lo que fuera que tocaran, incluidos otras especies sobrenaturales. Los Dalemurs, seres eléctricos que controlaban la electricidad, incluida la del cerebro. Los humanos pantera, que se convertían en panteras, Los humanos ave, quienes tenían alas de ave y partes de esta. Humanos araña. Humanos alacrán. Eran infinitas las especies que se nombraba.

El libro nombraba muchas más, una más abrumadora que la otra, era difícil creer que hace miles de años el mundo sobrenatural fuera tan extenso y variado y que ya no existieran. Se preguntaba como habría sido si aun vivieran esas especies. Y más difícil aun, pensar que según el libro este ser ultra poderoso había acabado con todas ellas por sí solo.

Una frase en particular le llamó la atención.

“Destrucción total de todos nosotros”

Es inmortal, no puede ser destruido, no hay nadie capaz. Nadie lo alejará de su objetivo, no se detendrá hasta que nos hayamos ido de este mundo, aunque deba regresar cada miles de años las veces que sean necesarias.

El libro ya la estaba asustando, así que lo cerró y lo colocó donde correspondía. Ese libro tenía algo, no eran solo las palabras, era el libro como tal, al tocarlo y leerlo te sentías abrumado, asustado. Era un sentimiento extraño. No sabía qué era, pero no quería volver a leerlo. En lugar de eso siguió buscando el libro que había ido a buscar.

Se encontró con un título y sonrió.

“El clan Bennett”

Decidió llevárselo a casa, para leerlo con tranquilidad. De pronto se escuchó que alguien se acercaba, se escondió detrás de una librería, pensó en teletransportarse, pero ese era un hechizo muy complicado y avanzado para ella. Estaba jodida.

El hombre se acercaba hacia ella, el miedo la invadió y más que nunca deseó salir de allí, cerró los ojos rendida y cuando los volvió a abrir se encontraba fuera de la academia.

— ¿Qué? — fue lo que le salió — ¿Eh? — no entendía nada. ¿Se había teletransportado? ¿Sin realizar un hechizo? Eso no era posible.

No le dio importancia y corrió hasta su casa. Abrió el libro y lo terminó en 1 hora ya que era corto. Tal libro hablaba de que el clan Bennett era el más antiguo del mundo mágico, no se tenía registro oficial de cuando había nacido. Fue el clan más poderoso de hechicería que haya existido jamás. Pero poco a poco fue desapareciendo hasta que no quedo nada de dicho clan. Fue el más respetado, el más temido e idolatrado por la comunidad de hechicería.