capitulo 7: No Quiero Querela

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Pov lauren

Mis uñas se estropearon al leer el mensaje de lucy en donde decía que ya estaba en camino, joder, mi cuerpo temblaba, tenía la necesidad de esconderme debajo de algún mueble o ser invisible para ella, no sé, me siento tan avergonzada.

Estoy aquí amor. El libro que traía en las manos voló por gran parte de la sala, estaba tratando de leer para olvidar el asunto pero como era obvio había sido en vano. ¿Estas bien? Rió divertida al ver como me tocaba el pecho. Disculpa si te asusté. Se acercó a mi para dejar un beso corto en mis labios. ¿Como te fue? Se sentó a mi lado con una mano en el respaldar del sofá sosteniendo su cabeza, mil veces mierda! Parecía que estaba buscando algo en mi mirada, no, obvio no, ella estaba tranquila y sonriendo, me estaba volviendo loca.

Ahmm bien. Me acomodé mejor en mi lugar. Bueno no, wilson dijo que yo solo iba a cantar ciertos géneros, ciertas notas, porque según el mi voz no encajaba para cualquier canción, yo me negué porque ellos no pueden privarme de sacar la música que a mi me gusta en el género que desee. Comenté sin mirarla.

Es un idiota. Bufó. No sabe del talento que se pierde. Besó mi mejilla. Encontraremos una mejor disquera. Susurró en mi oido. Donde valoren lo que hagas, he estado pensando en los ángeles o miami...

No.

¿No?

No. La miré con miedo. Buscaré una en Inglaterra, yo no quiero estar aquí, es mas, vamonos, lo antes posible por favor. Ella me miró confundida. No estoy bien acá. Cerré los ojos.

Claro ¿reservo un vuelo para mañana? Su voz era comprensiva, acarició mi hombro con delicadeza.

Por favor. Me acurruqué en ella sintiendo sus brazos envolverme rápidamente, vi como entraba a su celular para separar nuestros boletos.

Todo va a estar bien laur. No, nada iba a estar bien, mi mente luchaba por sacar a camila de ahí pero simplemente no podía, no quería pasar por esto otra vez. ¿Quieres comer algo? Tomó mi barbilla para que la mire.

No... Solo necesito dormir. Suspiré y me volví a pegar a ella.

Bien. Antes de poder imaginarlo me tomó en sus brazos y caminó hasta el dormitorio, me recostó con delicadeza en la cama, se acercó al armario y sacó una pijama en color negro. ¿Quieres ducharte? Entrelazó su mano con la mía. Asentí.

Bañate conmigo por favor. Ella sonrió.

Con gusto. Me besó calidamente, caminamos hacia la bañera y luego de unos minutos ya estabamos entre las burbujas, ella estaba sentada pegada al borde de la tina y yo entre sus piernas, sentía como sus manos pasaban el jabón por cada parte de mi cuerpo, quería relajarme, tal como lo hacía antes con sus caricias pero se me era imposible, la imagen de camila seguía torturandome, harta de eso, me voltee ahora quedando sentada en el regazo de lucia, mirándonos frete a frente, sin pensarlo dos veces la besé sin control, invitándola a que me siga y haga lo que estoy esperando, así lo hizo.

Ahora ambas estábamos recostadas en la cama, mi novia abrazaba mi cintura, podía sentir su respiración detrás de mi cuello, suspiré y luché para que el sueño llegue a mi, no pasó, ya de mal humor me senté en la cama gruñendo y sin el mínimo cuidado de mi acompañante la cual imitó mi posición un segundo despues que yo.

¿Pasa algo laur? Se sobó un ojo con su mano. ¿Tuviste una pesadilla? ¿Te duele algo? Su rostro emanaba preocupación, suspiré.

Nada solo... No puedo dormir, yo saldré a la terraza un rato. Me paré de la cama y busqué un abrigo para ponermelo, la noche estaba helada.

Cuando Nadie Ve ll Donde viven las historias. Descúbrelo ahora