[1]Desde que te conocí

Nota final

Si me hubiesen dicho hace un año, que estaría escribiendo esto aquí, no me lo creería. Sobre todo cuando ni siquiera tenía esta historia terminada o corregida. Pero aquí estamos... wow.

Cuando empecé a escribir esta historia, estaba pasando por un momento muy raro en mi vida. Para mí, escribir era desconectar de todo el ajetreo de mi vida y en la historia de Eila encontré un refugio muy agradable; solo espero que se haya convertido en el refugio de alguien más. 

Desde el primer capítulo, supe que no podría dejar esta historia de lado. Y así, a lo tonto, acabé escribiendo más de trescientas hojas de word bajo el título de Desde que te conocí. 

Así que si habéis llegado hasta aquí, gracias. Por la paciencia, por darme una oportunidad y por dársela también a Ethan y a Eila. Sois como un ramo de flores en un día gris, alegrándome un poquito la vida. Gracias. 

Suena a frase cliché, pero lo cierto es que esta historia no sería nada sin vosotros, los lectores, que le dedicáis tiempo, la leéis y seguís con cada actualización y nuevo capítulo. No pensé que esto llegaría a tanta gente y espero que a todos a los que ha llegado, les haya gustado y se hayan reído y emocionado. 

Para mí, habéis sido como un abrazo muy muy fuerte que te deja sonriendo, solo por haber leído todas las palabras de esa niña que pensaba que no valía para nada. Si pudiese ver todo lo que ha logrado, desde sus ojos, estaría llorando de la emoción. 

Ahora, esta historia es tan vuestra como mía y de esa niña insegura, así que ojalá la cuidéis tanto como lo hago yo. 

Dicho esto, me despido, pero no con un "Adiós", sino con un "Hasta pronto". 

se os quiere mucho, mucho, mucho

<3