- ¿Todo listo?
- Sí, señor. Todos los invitados confirmaron su asistencia, y los fotógrafos contratados ya están haciendo el cubrimiento del lugar.
El día del quinto aniversario de DBA Technology había llegado, y todos los invitados se estaban preparando para tan esperado evento. Se trataba de una increíble fiesta, a la que por supuesto, solo podrían ingresar las personas con una invitación y sus acompañantes, previamente confirmados.
Antes de dicha fiesta, el presidente de la compañía tenía preparada una rueda de prensa, en donde informaría sobre algunos ajustes y cambios al sistema operativo ya existente, así como el lanzamiento de uno nuevo, mucho más avanzado y eficaz que su predecesor.
- Muy bien, puedes retirarte. Nos vemos en la noche - finalizó su corta conversación, dándole a su asistente personal el permiso para ir hasta su casa a prepararse para el evento, en donde cumpliría el papel de una invitada más.
Cuando el cielo finalmente se oscureció, las llamativas luces del salón en donde se llevaría a cabo la celebración fueron encendidas, y los lujosos vehículos en donde empezaron a llegar los invitados fueron deteniéndose uno a uno en la larguísima fila.
- ¿Habremos llegado muy tarde? - preguntó Aaron, viendo a todos los carros que había delante del suyo, a través de la ventana. Él, Gia y Sarah habían decidido ir en el mismo carro, con la intención de llegar los tres juntos, a pesar de que iban por separado. Aaron y Sarah con una invitación, y Gia con la otra.
- Aaron, ¿Cuándo has visto que una fiesta empiece a la hora que indica la invitación? - respondió con obviedad Gia, que iba en los asientos de atrás junto a Sarah.
- Pero la fiesta ya empezó, ¿No ves el salón? - y era verdad. El salón ya estaba iluminado, y se lograba ver movimiento dentro de el. Ambas mujeres rodaron los ojos.
- Se refiere, a que la mejor parte de la fiesta siempre empieza más tarde, Miller - aclaró Sarah, sin dejar de ver su celular - ¿Y se supone que fue el mejor de la clase? - murmuró. Gia rio al ver el gesto de ofensa que había hecho Aaron, luego de oír a la mujer.
El lujoso vehículo en el que iban estaba casi en la mitad de la fila, y suponían que, a la velocidad con la que estaban avanzando, estarían dentro del salón en media hora, aproximadamente.
- ¡Alex! - llamó una voz femenina, desde no muy lejos. El mencionado se dio vuelta en busca de la persona que lo había llamado y ahí los vio. Daniel y Juliette, sus mejores y casi únicos amigos habían llegado.
- Llegan tarde - reprendió él, dirigiendo su mirada a su muñeca izquierda, en donde yacía un Rolex de color negro con detalles en oro.
- ¿Acaso no has visto la cantidad tan alarmante de carros esperando por entrar? - preguntó Daniel, cuando ya estuvieron frente a su amigo - En realidad, llegamos hace una hora, pero hasta ahora logramos ingresar.
- Debieron llegar más temprano. Después de todo, son mis amigos - dijo, fingiendo indiferencia. Juliette hizo un puchero en respuesta.
- En fin, ¿Cómo va todo? - Daniel se refería al evento en sí.
- Bastante tranquilo. La rueda de prensa fue un éxito y la fiesta aún no ha empezado - respondió con simpleza, percatándose de algo - ¿Ustedes vienen juntos?
- Sí, estuve tan ocupada trabajando que no logré conseguir algo mejor - dijo Juliette, encogiéndose de hombros con resignación. Daniel le dedicó una mala mirada en respuesta.
- Y tú, ¿Solo otra vez? - la pregunta era retórica. Daniel pasó su brazo sobre los hombros de Alex y suspiró exageradamente - Ay, mi estimado amigo, ¿Pretendes quedarte solo de por vida? - y, antes de que pudiera responder, ambos vieron entrar a tres personas, aunque solo una captó realmente su atención. Juliette frunció el ceño, confundida, y al girar sobre sus talones, también los vio.
ESTÁS LEYENDO
Dos cuerpos, un deseo || COMPLETA
RomancePolos opuestos se atraen... Pero, ¿Qué sucede si dos polos iguales se acercan demasiado? Poder, dinero, belleza, inteligencia... Cosas que cualquier persona desearía tener, y que a ellos les sobraba. Podían con todo, pero había una sola cosa que pod...