Dos cuerpos, un deseo || COMPLETA

La Subasta.

Typa girl - BLACKPINK

- ¿Ya están allá? - preguntó Gia, conduciendo hacia el salón en donde la subasta de beneficencia se llevaría a cabo.

Dicha subasta era organizada anualmente por la familia de Sarah, siendo ese su décimo año, con el fin de recaudar fondos para todos los hospitales infantiles y especializados de la ciudad. Las personas donaban pertenecías exclusivas o muy valiosas, y recibían el diez por ciento del precio vendido, el resto del dinero iba al fondo anual para la donación que se hacía al final de cada año.

- Sí, ¿Tardas mucho? - preguntó Aaron, desde el otro lado del teléfono.

- En cinco minutos estoy allá, nos vemos - finalizó, colgando la llamada desde su audífono.

- No está muy lejos.

Aaron, Sarah y Gia compartirían su mesa con Juliette Morgan, Daniel Brown y Alexander Dubois, según los encargados de logística del evento. Claramente, todos se conocían entre ellos, a excepción de Gia, quien jamás había asistido a ninguna actividad pública, hasta la noche anterior.

- ¿Quién es la señorita Gia? - preguntó Juliette, ya que ninguno de los dos mencionaba a la mujer, pues se mantenían bastante reservados cuando de ella se trataba.

- Ella es la...

- Es una ejecutiva en nuestra empresa, pero es muy reservada con su vida - respondió Aaron con rapidez, evitando que la verdad se supiera por boca de Sarah - y es nuestra amiga desde hace años, así que la familia de Sarah la invitó - Juliette asintió, y vio a sus dos amigos, los cuales no parecían tener la misma curiosidad que ella por la mujer.

- ¿Ustedes ya la conocen? - ambos asintieron.

- Anoche en la fiesta - respondió Alex, recordando el caótico momento que pasó con ella.

- ¿También sabe dónde vivo? - preguntó con una ceja elevada. Gia lo miró fijamente, negando con suavidad, casi hipnotizada por sus afiliados ojos azules y su cálido aliento - ¿Y no le gustaría saber? - propuso, acercándose lentamente.

Cuando sus labios estuvieron a punto de rozarse, algo los empujó de lado, causando que se tropezaran. Eventualmente, el momento y el beso fueron estropeados.

- ¿Se encuentra bien? - preguntó alertado, sosteniéndola por la cintura. De no haber sido por su reacción, un poco más rápida que la de Gia, habrían caído estrepitosamente en medio del gentío.

- Yo...

Y justo antes de que respondiera, los gritos captaron la atención de ambos. Había un revuelo porque dos hombres bastante ebrios se habían chocado, causando todo un alboroto. Alex se incorporó y ayudó a Gia rápidamente, saliendo del salón para evitar quedar en medio de la riña.

- Gracias - mencionó ella, sintiendo el frío viento en todo su cuerpo. No había llevado abrigo, así que se abrazó a sí misma.

- ¿La acompaño? - preguntó, siguiéndola desde atrás. Su largo cabello revoloteaba libremente, dejando a la vista su espalda desnuda.

- No es necesario, pero gracias por su compañía. Hasta pronto - se despidió, entrando en uno de los tantos vehículos alquilados por la empresa para llevar a todos los invitados hasta sus residencias, sin darle espacio para refutar.

- Ah, ¿Ella era la chica a la que no dejaron de ver en toda la fiesta? - preguntó, con una sonrisa.

- ¡No! - exclamó Daniel con nerviosismo - ¿Qué dices? Ella...