Persiguiendo mi sueño // Pablo Gavi

Capitulo 5, "Fin del trayecto"

Estábamos las dos sin saber que hacer, que pensar, como reaccionar... un tornado de pensamientos nos llenaba completamente de pies a cabeza.

- A ver, lo primero es mantener la calma porque como estamos ahora mismo no podemos decidir - me dijo Lina intentando mantener un poco la calma.

- Tienes razón. Vamos a tranquilizarnos primero. - le respondí.

Nos tranquilizamos rápidamente. Estuvimos rebuscando un rato entre nuestras ideas y Lina me devolvió a la realidad cuando me dijo lo siguiente:

- A ver, no se lo que pensarás tú pero yo no me voy a rendir, hemos estado toda la vida soñando con este momento, hemos ideado todo, en el poco tiempo que llevamos con esta misión hemos pasado por momentos divertidos al igual que otros peores. No podemos rendirnos ahora, si nos pasa algo, lo habremos intentado, y mira, si por lo que sea este fuese nuestro fin, dicen que todo pasa por algo, a si que como que yo me llamo Lina, no me pienso rendir, y te animo a seguir conmigo ya que eres la mejor persona que he conocido jamás. Te lo digo desde el corazón y aún que tengamos nuestras diferencias y momentos malos, siempre te querré tal y como eres.

Me quede flipando durante unos segundos. Lina siempre había sido la típica amiga graciosa, que le da un poco igual todo. Esta vez había sido diferente. Había sido muy seria, muy conmovedora, tanto que no pude evitar que se me escaparan unas pequeñas lágrimas de alegría por tenerla. Era una chica convencida y segura de ella misma con lo que hacía. Me alegraba mucho por ella y por mi al tenerla. ¿Cómo pretendéis que no la quiera?

Cuando pude volver a la Tierra tras escuchar sus palabras, le di un fuerte abrazo, por lo que decidimos que sí, la misión seguía en pie.

- Lina quiero que sepas que eres una persona muy importante para mi y no se lo que haría sin ti - le respondí.

- Yo también te quiero tonti - me dijo ella. - Oye una cosa Sofía, perdona que te cambie de tema. - me dijo line saliendo por las ramas.

- Dime - le contesté yo.

- ¿Y si cogemos la muñeca y la vemos más de cerca? Podemos aprovechar que esta cerrada la ventanilla - me preguntó Lina.

- ¿No será muy arriesgado? - le dije.

- Es una muñeca, no creo que se le pongan los ojos, bueno el ojo rojo y nos saque el alma, esto no es una película de miedo - me respondió Lina.

- Pues lo haces tu. Si te sacan el alma será a ti - le advertí.

- Que miedica - se burlaba de mi Lina.

- No soy miedica, soy prevenida - le respondí con tono serio.

Las dos nos reímos un rato por nuestras propias tonterías.

- Ala venga, pues la cojo yo, miedica - me dijo Lina haciendo énfasis en la palabra "miedica".

Como le encantaba rabiarme... jajaja.

Lina cogió la muñeca. Estaba tan tranquila como si la hubiese visto desde el día que le empezó a gustar el barça, es decir, desde que nació. No como yo, que yo estaba cagada de miedo. A ver, admito que soy un poco miedica, pero siempre esta bien tener un poco de cuidado, nunca se sabe lo que va a pasar.

Mientras Lina la inspeccionaba, del susto que se llevó, sin querer se le calló la muñeca el suelo. Luis bajo la ventanilla.

- ¿Cómo vais chicas? Ya llegamos enseguida - nos dijo Luis.

- Emm... muy bien... - respondimos las dos al unísono.

- ¿Habéis cogido la muñeca? - nos preguntó Luis.

En ese momento nos quedamos en blanco y hasta Lina no sabía que responder.

(En mi mente: mierda)

- ¿Hola? - dijo Luis al no escuchar una respuesta.

- Emm... perdona, es que... emm... ¿cómo es que le falta un ojo? - esta vez lo dije yo, no se como lo conseguí.

- Le falta el ojo porque a mi hermana se le cayeron los ojos de su muñeca tras un enfado, ya que la estrelló contra la puerta. Por lo que yo decidí darle un ojo de la mía. En ese momento no me importaba mucho esa muñeca por lo que no me importó. Ya se que es muy raro, pero esa es la historia - nos contó Luis.

- A vale, es que nos acabamos de dar cuenta y nos habíamos asombrado - dijo Lina ya más tranquila.

Después de mas o menos media hora, por fin llegamos al aeropuerto de Luton y quedaba la peor parte, pagar. No es que hubiésemos llevado mucho dinero y no contábamos con la idea de llegar hasta Manchester y volver en taxi, bueno, en limusina, por lo que nos asustaríamos al ver las grandes cifras. - 208,90€ - estaba escrito en la pequeña pantallita. Lina y yo abrimos los ojos como platos al percatarnos del precio. Luis se dio cuenta de nuestra sorpresa.

- ¿Todo bien? - nos preguntó Luis.

- No - le respondió con total sinceridad Lina.

- ¿Por? - nos dijo Luis.

(En mi mente: y todavía pregunta...)

- Por el precio, no contábamos con tanto dinero por lo que no sabemos si podremos pagarnos el resto del viaje - le dije yo

Yo creo que llevábamos bastante dinero pero lo hice para dar un poco más de pena. Ya se que estaba mal pero también era un poco verdad, llevábamos el dinero bastante justo y no contábamos con estos inconvenientes.

- Bueno, lo haré por esta vez, os lo rebajo a 50€ - nos dijo Luis

Nuestras caras cambiaron en un instante, ¡nos había rebajado más de un 50%!

- ¡Muchísimas gracias! - le dijimos Lina y yo el unísono. - Te lo recompensaremos.

Le dimos un abrazo en ese mismo momento.

- Siempre te recordaremos Luis, te echaremos mucho de menos - le dije yo.

- Un placer conoceros, ya sabéis, cuando necesites transporte, tenéis mi tarjeta - nos dijo Luis mientras nos daba una tarjeta con un número y guiñándonoslo un ojo mientras subía la ventanilla.
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Holaaaa!! Perdonarme si estos días estoy un poco más inactiva y no subo muchos capítulos. Estoy un poco ocupada. En cuanto pueda os subiré más seguidamente!!