Camina conmigo

Capitulo 41

El día sábado fue un martirio para Chay, cuando despertó descubrió qué su hijo no estaba. Reviso el closet encontrando su ropa y mochilas, al menos no había huido, pero tampoco le dijo donde estaba.

Llamo a Pete para preguntar si estaba con Venice pero no fue así, intento llamar a algunos compañeros de clases pero nadie lo había contactado. Le dio su espacio, quizás debía dejarlo respirar un poco, se dedico a las labores de la casa para distraerse, pasado el medio día Pete llego a visitarlo, podía sentir que algo estaba mal y aprovecho para llevar a Bee de regreso.

-Ya dime que sucede ¿Lo encontraste?- pregunto bebiendo café en la cocina mientras los niños jugaban videojuegos en la sala.

-Se dio cuenta- comentó suspirando- Ya lo sabe-

-¿Qué? ¿Como?- pregunto en voz baja.

-En el hospital.. descubrió qué no tenemos el mismo grupo sanguíneo, ninguno de los dos- mantuvo su mirada en el café.

-Mhh.. es difícil contradecir eso- Pete soltó otro suspiro- ¿Huyó?-

-No- negó con la cabeza- su habitación esta intacta... creo que solo quiere pensar-

-¿Como lo tomó?- preguntó.

-¿Como crees? Se puso como loco.. me grito, incluso..- suspiro recordando el jaloneo- bueno.. obviamente estaba herido, molesto.. dice que lo aceptaron en su familia por lastima y que no.. confía en mi-

-Es porque aun es joven, no lo entiende..- tomo una de sus manos dándole fuerza.

-Tengo mucho miedo.. se que le va a hacer preguntas a Macau- suspiro levantando la vista.

-Es normal, va a buscar respuestas.. ¿te pregunto por el?- pregunto con calma.

-Si pero.. si le dice lo mismo que a mi, Macau se sentirá horrible, para él si es su hijo y yo siento que Jao lo va a rechazar- limpio sus lagrimas con la mano libre- Si me pregunto.. pero no le dije nada-

-¿No le diste el nombre?- pregunto.

-Claro que no, no quiero que lo conozca, es una basura ese idiota, no lo quiero cerca de mi hijo. Se mantuvo lejos todos estos años, no le interesa conocerlo- dijo firme.

-Lo se pero.. Jao no va a entender eso. El solo va a buscar respuestas- comentó con una mueca el mayor.

-Y lo entiendo pero.. ir a verlo no sirve de nada, solo lo tratara mal, lo va a decepcionar, no quiero que lo lastime asi- bajo su mirada de nuevo al café.

-Pero quizás tiene que pasar.. hay muchas cosas que no nos gustan pero son necesarias Chay, quiza deba conocerlo para darse cuenta que no vale la pena.. y que Macau es el mejor padre que la vida le ha dado- comentó encogiendose de hombros.

-El corazón de mi Jao es muy fragil, como yo. No le gusta pensar mal de los demás, pero ahora no lo se.. esta herido, por eso me dijo esas cosas pero se que es sensible y un chico de buenos sentimientos..- suspiro- Si lo conoce.. solo le romperá su ilusión de conocer a su verdadero papá, para terminar encontrando un imbecil abusivo y violento, que le dira sin dudar que fue el hijo de una aventura, solo para lastimarlo-

-Lo se, también puedo imaginar que algo así le dirá.. pero Chay. Ya te dije..quizás debe vivirlo para no idealizar situaciones, su ingenuidad e inmadurez no le permite ver que pudo haber causas mayores para alejarlo de él- se puso de pie para acercarse- Jao solo conoce el calor de casa, nunca se imaginaria la clase de animal que es ese hombre-

-No, mi hijo no conoce los abusos, el cree que la gente solo tiene un mal día y por eso se alteran, pero no disfrutan lastimar.. yo también era así de tonto, pero si hay gente que disfruta hacer daño..- levanto su vista de nuevo- Si lo conoce.. ¿Lo pondra en mi contra?-

-No lo creo, pero si pienso que intentara lastimarlo, alejarlo de su vida, rechazarlo, porque no le conviene- le dio un pequeño abrazo- Pero no puedes negarselo.. sabes que tiene derecho a conocerlo si eso quiere- se separo.

-Lo se... pero es que- dejo de hablar cuando escucho la puerta cerrarse.

-Llegaste, mira.. Jao- Bee lo siguió a paso rápido detras- Sun tiene el nuevo juego de...-

-No me importa- se dio la vuelta para detenerlo- no me sigas, es molesto-

-Pero.. lo vimos juntos ¿No quieres jugar?- pregunto mirándolo.

-No. Quedate con tu primo- giro su cabeza hacía donde estaban Pete y Chay.

-¿Donde estabas?- pregunto suavemente.

-Por ahi- se dio la vuelta para subir las escaleras.

-¿Dije algo malo papi?- pregunto el menor mirando a Chay.

-No- camino hasta el pequeño- Creo que tu hermano estaba de mal humor- beso su cabeza- ve a seguir jugando con Sun-

-Esta muy enojado- dijo Pete llegando hasta Chay.

-Lo se..- mordió su labio con fuerza- ¿Qué hago?- pregunto.

-No lo se.. deben hablar los dos con él, hacerlo entender como fueron las cosas.. y aunque tampoco me gustaría que lo buscara.. la verdad es que tiene derecho a conocerlo- suspiro.

-Ya no se si hicimos lo correcto- negó con la cabeza.

-Amas a tu hijo, hiciste lo mejor para él, tiene un padre y una familia qué lo ama sin importar lo demás.. Es cuestión de tiempo, lo entenderá- le dio una pequeña sonrisa- Vamos, necesitas terminar ese café, te ves tenso-

Volvieron a su lugar en la cocina, cambiando el tema y preparado todo entre los dos para la comida juntos.

Se sentaron con los pequeños en la mesa, siendo Chay quien subió a avisarle a su hijo qué debía bajar a comer.

-No- respondió desde el otro lado de la puerta sin abrir.

-Jao.. ven a comer- intento abrirla nuevamente pero estaba con seguro.

-No quiero. No te quiero ver. Prefiero quedarme asi- contesto molesto.

-Vamos, tienes que comer. Aun estas en recuperación de la operación, es importante recuperar tu alimentación ahora... por favor, Bee también esta preguntando por ti- intento convencerlo.

-Dije que no quiero, tampoco quiero verlo, esta siendo engañado igual que yo, ni siquiera es mi hermano del todo-

-No digas cosas como esa- toco la puerta- abre cariño, por favor..habla conmigo-

-No quiero. Dejame tranquilo, quiero estar solo- respondió.

Chay suspiro dandose por vencido, no quería generar un problema ni una discusion, no con Pete y los niños en casa.

Regreso al comedor excusando a su hijo mayor con que se sentía enfermo y por eso no bajaría a comer. El apetito se fue por completo y solo jugueteo con su comida un poco mientras los demás si comían todo con tranquilidad.

Debería dejar a Bee con Pete un par de días mientras resolvían esta situación, no quería que su hijo menor escuchara todo, aunque ya tenía duda de que tan buena idea era intentar protegerlo también escondiendo cosas.