Cuando el océano peligra y el balance vital entre las tres grandes entidades del mundo se ve roto, solo el sacrificio de dos corazones podrá restaurarlo.
JiMin es solo un humano con horribles pesadilla y un profundo miedo al océano. Mientras que Yo...
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—¡Taxi!
Un vehículo amarillo se detuvo frente al grupo de chicos mientras estaban sentados esperando. JiMin se levantó, pasando el brazo de TaeHyung por sus hombros y colocando una mano en su cintura, acercándose al taxi. JungKook le abrió la puerta, ayudándolo con el mayor.
—Ya está. Gracias, Kookie.
—De nada.
—¿Seguro que no quieren irse unos aquí y los demás en otro? —les preguntó. NamJoon negó.
—No hace falta. Vivimos cerca. Ve tranquilo, JiMin y no te olvides de avisarnos cuando lleguen a casa. —pidió recordando que se quedaría con TaeHyung esa noche para cuidarlo.
—Lo haré. Buenas noches.
—Buenas noches.
—Duerme bien. —agregó YoonGi. El menor le sonrió, entró al taxi y partió rumbo al hogar de TaeHyung.
NamJoon suspiró, acomodando a un profundamente dormido SeokJin en su espalda, antes de levantarse de su asiento, listo para ir a casa también.
—Si te sientes cansado, puedo ayudarte, hyung.
—Gracias. Te avisaré en ese caso.
Caminaron bajo la oscuridad de la noche, iluminados solamente por los faroles de la ciudad, el cielo estaba nublado y corría una brisa fresca agradable para sus cuerpos.
—Mañana va a llover. —anunció HoSeok, sonriente. El resto asintió.
—Será nuestra primera lluvia en el mundo humano —dijo JungKook—. ¿Qué se hace en esos días hyung?
NamJoon lo pensó un segundo.
—Depende. En invierno, aquellos que salen de sus casas, van por ahí con un paraguas y cubiertos de mucha ropa, los que se quedan, suelen encender la estufa y beber chocolate caliente para abrigarse, o un café si están en el trabajo. En verano, como ahora, disfrutan un poco más de la lluvia debido a que la temperatura no baja tanto como en invierno, pero de todas formas usan paraguas y tratan de quedarse en casa, comiendo algo dulce y fresco, en ocasiones.
—Eso suena bien —comentó YoonGi—. ¿Hyung y tú, qué harán?
—Jinnie probablemente no irá al trabajo por la jaqueca que va a tener. Yo... Uhm, no, no tengo nada que hacer afuera así que también me quedaré.
—¿Los humanos van al mar cuando llueve? —preguntó HoSeok con una idea en la cabeza.
—Uh-uh —negó—, es demasiado peligroso para ellos.
—¿Entonces cómo terminará Tae su pintura?
—¿Te sacó una foto mientras estábamos en la playa? —El contrario asintió— Entonces con eso. O quizás, vaya a la casa para terminar con él. Eso depende de cómo amanez...
