Treinta y nueve

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Rayleigh

Muchas cosas de las que Rayleigh tuvo que soportar fueron las etapas de Roger.

Supo que era un maniático cuando lo conoció, pero lo subestimó demasiado.
Muchas veces la Marina los superaba en número, pero él jamás retrocedía. Reía y seguía luchando como si no fuese un mañana.
Rayleigh pensaba si era muy valiente o era un idiota que no apreciaba su vida.

Aunque poco a poco fue entendiendo la filosofía de Roger.
Era maldita mente valiente, no le tenía miedo a nada.
Se enojaba demasiado, bueno, no era a si. Pero cuando lo hacía no había quien le tuviera frente.

¿Quien te hizo eso?— Rayleigh estaba demasiado concentrado en ver si no había perdido la vista de su ojo, había sido rasgado por un marine por descuido suyo.

Ah.. Ahg.. maldita sea.. vámonos Roger— Pero no, Roger dejó su sombrero en la mano libre de Rayleigh y se fue.
Ese día Roger acabó con dos barcos armados de la marina el solo.
Después lo tenía más que preocupado, habían ido con Crokus ya que a Rayleigh le había dado fiebre ¿por la cortada? No sabía, pero Rayleigh en ese momento se dio cuenta de que Roger tenía preocupaciones.

¿Te sientes mejor? — Roger tocó la frente de su amigo, y luego tocó la suya.
Al ver la gran diferencia empujó nuevamente a Rayleigh a la cama.

Rayleigh le salió una vena en la frente y empujó a Roger con su pie.

Ya estoy bien idiota— Roger aún en el piso sonrió.
Claro, estaba bien, pero podría estar mejor.

Después aguanto todo el viaje a Roger mirándole el ojo, ya que no lo había perdido.

Los piratas de Roger se hicieron más grandes. Llegó El Oro Jackson a ellos.
Para Rayleigh fue un gran alivio.
Pensó que no tendría que aguantar más. Pero se equivocó.
El nombre de Gol D Roger sonaba por todos lados, claro, roger siempre iba a su habitación en la madrugada y le contaba lo que soñaba.

¡Algún día! Tendré al mundo en la palma de mi mano compañero— Dijo Roger señalando su palma. Rayleigh no entendió, no traía lentes y su cerebro aún no procesaba sus palabras.
Claro, no era buena hora para hacerlo.

Roger, ve a dormir— Dijo casi suplicándole. Para su desgracia roger había iniciado el día.

Algo que Rayleigh también sobre pensaba, era lo mucho que había crecido.
Roger se había echo más alto y grande.
Más fuerte claramente. Su cúspide llegó en sus treinta.
Oh vaya dolor de cabeza.

Se enojaba por todo primeramente. Fue una etapa en donde se la pasaba luchando contra Newgate, y muchos piratas poderosos a morir.
No importaba que tan lastimado saliera, siempre lo hacía.

Rayleigh pensaba que tenía algún tipo de frustración.
Pero en ese momento Roger tenía todo.
Hasta que conocieron la historia de el siglo perdido.

Y con ellos descubrieron antiguas escrituras, la existencia de un ser. Joy Boy.
Roger cambió.
Queriendo todo eso de inmediato para el, cambio el objetivo, quería todo, quería saber todo, Roger estaba decidido.

Dejo los juegos para enfocarse en lo que quería. Por qué si, cuando Roger quería algo siempre lo conseguía.

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