22: You are enough

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Autismo: Trastorno del neuro desarrollo que se caracteriza por la intensa concentración de una persona en su propio mundo interior y la progresiva pérdida de contacto con la realidad exterior.

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– P-Perdón Lío -sollozo Guillermo.

– Tranquilo, no llores por favor, no me dolió, te lo juro -susurro Lionel acariciando los rizos del menor para calmarlo.

Lo que pasa es que después de terminar el rompecabezas ambos se pararon para recoger todo, por accidente el mexicano se tropezó y termino pisando a su querido novio, le dolió pero no tanto en realidad, solo se escuchó un "auch!" De Messi para que el contrario se pusiera a llorar pidiéndole perdón casi de rodillas.

– E-Es que es la t-tercera vez q-que te piso e-en el día, s-soy un ¡Tonto!

– No lo eres, los accidentes pasan, vamos respira conmigo, inhala -indico Messi y el otro lo siguió- exhala, nuevamente.

Siguieron así hasta que se calmo, limpio sus lágrimas y dejo de mirar a el argentino por un rato avergonzado, este no sabía la razón, de igual forma era raro que Guillermo hiciera contacto visual con la persona que hablaba, siempre se perdía mirando otra cosa pero escuchando atentamente.

– Guille, ¿Sucede algo?

– Y-Yo -se mordió el labio intentando no volver a llorar- siento q-que estar c-conmigo es como si salieras c-con un niño c-chiquito, no me gusta sentirme a-así, m-mereces algo mejor...

– No digas eso por favor, eres suficiente, ya te lo he dicho, tienes bastantes cualidades lo que hace que me enamoré de ti, amo lo mucho que te esfuerzas para que te guste lo que a mí por ejemplo lo de la música, te haré sentir suficiente, ojalá pudieras verte como yo te veo.

Guillermo no dijo nada, las palabras no salían, solo se acercó y abrazo a Lío sin decir una sola palabra, suspiro pesadamente.

...

Nuevo día, nueva aventura que Guillermo no quería pasar, se despertó con un poco de gripa y claro que su padre era un plato de nervios, al no tener a su esposa para ayudarle se ponía peor, si, la llamo y está apesar de los problemas que tenía en esos momentos le dijo que solo lo llevará abrigado, le diera una bebida caliente y listo para la escuela pero este se negó diciendo que su adorado hijo podía empeorar y la única forma de estar tranquilo era que se quedará en casa, tenía varios pendientes lo cual complicaba las cosas ya que no podría quedarse pero si enemigo más personal podía ser útil, Juan que desde que golpeó a Javier la tensión entre ellos era notoria, no tenía otra opción.

– ¿Cuánto me vas a pagar? -pregunto sin alguna vergüenza de por medio.

– ¿Pagarte? ¿Por cuidar a Guillermo un día? No me jodas Juan.

– Siempre dices que es tu hijo, yo solo soy su "tío" necesito que me pagues de mi valioso tiempo -se burlo el señor Juan.

– Pero cállate -intento silenciarlo ya que Francisco estaba solo a unos pasos en el comedor tomando un té que su papá había preparado- tu ganas mal nacido.

Consiguió el señor Juan que le pagarán algo de dinero, después de que el señor Guillermo se fuera ambos se quedaron en un silencio algo tenso.

Nuestra melodía | MechoaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora