🥀•;;𝒯𝑒𝓃𝓉𝒶𝒸𝒾ó𝓃 2 «ᴊᴇᴏɴ ʜɪʙᴏᴜ»🎇 [𝙺𝚘𝚘𝚔𝚖𝚒𝚗] {𝙾𝚖𝚎𝚐𝚊𝚟𝚎𝚛𝚜𝚎}

CAPÍTULO 3. Esperanza

Suspiró cansada y caminó hasta pronto estar llegando a su casa en las montañas, un nuevo día se reflejó, la vida le estaba sonriendo, por lo menos ya ganaba más dinero y eso era muchísimo apoyo, no se encontraba tan delgada como antes, el estar vendiendo verduras que ella misma cosechaba había sido una idea espléndida.

Silbó una melodía que llevaba en la mente y después abrió la puerta de su casa ingresando, acomodó todo en su respectivo lugar hasta que concluyó, se fue a sentar a la orilla de la cama, de su bolsa sacó unas vendas las cuales mojó y después puso en la frente del chico postrado en cama.

—Hoy volví a salir también en busca del chico lindo rubio que vi aquel día junto a ti pero... ya jamás me encontré con el de nueva cuenta.—Mencionó la anciana limpiando el rostro del alfa quien mantenía sus ojos cerrados.

Ya habían pasado 5 años desde aquel accidente en donde Jihyo luego de haber rescatado el cuerpo del joven lo cuidó, llamó al médico poco después, un conocido de ella quien le dió el diagnóstico del hombre, dijo que debía llevarlo al hospital, la anciana le mencionó que era su hijo perdido y solo así pudieron dejarlo entrar al lugar.

Luego de una fuerte y larga operación le lograron sacar el tubo en el abdomen, tenía heridas graves pero afortunadamente pudo sobrevivir sin embargo hubo un problema, su estado final fue vegetativo.

Así comenzaron a pasar los años, si no fuera por el amigo de Jihyo y su hijo llamado Park Chanyeol las cosas jamás hubieran salido bien con el joven que tenía en su casa, todo los gastos médicos fueron cubiertos por Yeol quien venía de vez en cuando a ver al alfa pelinegro quien seguía en estado vegetal desde hace ya bastante tiempo.

Un sonido fuerte se escuchó desde afuera, la omega curiosa se levantó y fue a abrir la puerta cuando al otro lado notó que estaba Chanyeol como siempre a la misma hora y con su traje blanco impecable.

—Hola Jihyo, vine a revisar a su hijo.—Mencionó el alfa con su característica sonrisa.

—Hola Chan, adelante por favor.—Jihyo se hizo a un lado dejando pasar al joven.

Al estar adentro, el alfa comenzó a revisar al chico de cabellos negros, abrió su camiseta y puso lo indispensable en su pecho para así ver como se encontraba, hizo lo necesario hasta que luego de 10 minutos concluyó.

—Mi hijo... ¿aún no abrirá sus ojos?.—Preguntó la omega con una esperanza en sus luceros.

—No. Lo lamento Jihyo, pero está estable, su respiración, su pulso, todo lo demás se encuentra en perfecto estado el único detalle es que no puede despertar, sigue en estado de coma.—Mencionó el doctor directamente.

—¿Despertará?.—Volvió a cuestionar ella llevando sus manos hacia su pecho entrelazando sus dedos con los de la otra mano.

—No puedo asegurarlo por ahora pero tal vez si haya una respuesta por parte de su hijo más adelante.—Afirmó dirigiendo su vista hacia el pelinegro.—Aunque... hay algo que me deja un poco desconcertado, ¿me permitiría dejar que le saque sangre para analizarla? Es extraño ¿sabe? Después de haber llegado al hospital con un tubo atravesado y estar bien luego de 5 años es prácticamente un milagro, ningún alfa hubiera resistido a eso.—Contó reflejando la curiosidad y la intriga en su rostro.

—¿Es necesario hacer eso?.—Preguntó no muy convencida sobre aceptar o no.

—Si, también al analizar su sangre sabré cómo se encuentra por dentro.—Chanyeol habló con sinceridad, no notaba muy convencida a la amiga de su padre.

—Está bien...—Accedió finalmente la omega y después se sentó a un lado del chico alfa postrado en la cama.

—Perfecto, entonces déjeme preparar mis cosas.—Indicó Chan comenzando a realizar lo necesario para extraer la sangre del alfa.