🥀•;;𝒯𝑒𝓃𝓉𝒶𝒸𝒾ó𝓃 2 «ᴊᴇᴏɴ ʜɪʙᴏᴜ»🎇 [𝙺𝚘𝚘𝚔𝚖𝚒𝚗] {𝙾𝚖𝚎𝚐𝚊𝚟𝚎𝚛𝚜𝚎}

CAPÍTULO 36. Cachorro de plata

Jeon contemplaba el gran bosque de su mansión, sintió como la puerta se abría e ingresaba un aroma a sandía suave.

—Señor Jeon—Lo llamó Xiumin acercándose al más grande.—Me alegra poder encontrarlo aquí.

El omega llevó despacio su mano hacia el brazo del alfa sin embargo Jeon solo giró su cabeza un poco.

—Mantén tus manos alejadas de mi cuerpo si no quieres que te las arranque.—Lo amenazó el pelinegro.

Rápido el castaño se detuvo. Todas las noches que se veían solo conversaban, jamás se llegaron a tocar pero Xiumin liberaba su aroma tratando de seducirlo y llevarlo a la cama pero no lo conseguía.

—Parece que no ha tenido un buen día ¿puedo ayudarlo? Soy increíble quitando el estrés.—Comentó sonriendo.

—No es necesario. Solo tuve una pelea con mi omega pero nada fuera de lo normal.—Habló Jeon suspirando.

—¿Se refiere al Señor Hibou? tal vez solo le vendría mejor fijarse en alguien que no es él.

—Es difícil de manejar, demasiado terco, terminé recibiendo una cachetada hace nada.—Musitó Jungkook cruzándose de brazos.

—Yo soy todo lo contrario a él, sé cuando un alfa marca territorio y solo desea que nosotros obedezcamos, tenga por seguro que puedo cumplir con lo que mi jefe no hace con usted.—Comenzó a contar el chico acercándose más a Jeon.

El alfa soltó una risa, no necesitaba sobras, tenía oro en manos, Jimin era único, sería un imbécil si llegaba a ponerle los malditos cuernos con alguien tan asqueroso como Xiumin, no se refería a su físico, Jeon se fijaba exactamente en la mierda de personalidad que poseía el chico y en la envidia inminente que tenía hacia su destinado, sin mencionar la forma tan pésima en cómo lo estaban controlando.

—Solo quédate a mi lado, odio el contacto físico Xiumin. Tu presencia basta.—Mencionó Jungkook fingiendo interés.

Xiumin se emocionó, no le molestaba para nada la compañía del narco más peligroso del mundo, dejando de lado su imponente cuerpo, amaba el como era tan frío aunque... quien aún le hacía palpitar su pequeño corazón era Jeff.

El día finalmente comenzó a transcurrir así, por la noche Jeon como pudo se deshizo de la presencia del omega, se escabulló y comenzó a preparar todo el mismo para la sorpresa de Jimin, al cabo de un tiempo y ya que la noche había llegado se quedó esperándolo pacientemente.

Mientras tanto, en la mansión y en la habitación de Jimin yacía en el sofá aferrándose a Jeff. Hubo un suave silencio y Jimin no había comido nada lo cual preocupó bastante al pelinegro.

—Jimin ¿podrías comer? Por favor, me preocupas mucho.—Pidió el alfa.

Finalmente el omega se alejó un poco y observó el rostro de Jeff, lo miró a sus ojos azules, no había mentira... ¿De verdad era el malo? ¿Satur le quería hacer daño? ¿Por qué? Solo tenía la preocupación plasmada ahí, Park no observaba nada más.

—No voy a permitir que el Señor Jeon te haga daño, no estás solo, aquí estoy.—Comenzó a hablar el pelinegro.

Fue entonces que Jimin lo notó, estaba usando a su favor la psicología Jeff con el rubio.

—Debí verme estúpido... por haber confiado en Jeon y al final terminar así.—Habló mirando aún hacia abajo.

Jimin sintió el palpitar calmado del Señor Jeon, llevó su mano a su pecho tocándolo, se sentía tan tranquilo y cálido.

—Jeff creo que voy a descansar un poco, podrías ¿salir y dejarme a solas? Quiero reflexionar, te agradezco por estar a mi lado.—Murmuró el omega sonriendo.