Mi estómago se revuelve como si tuviera un monstruo que me devorase desde dentro. Salgo de la habitación roja y corro al cuarto de baño. Me pongo de rodillas y abro la boca mirando el bidé. Cuando termino, Bright me ofrece una toalla y yo me enjuago hasta deshacerme del desagradable sabor.
La garganta me arde y estoy agotado, solo quiero tumbarme en la cama y no pensar en nada. Pero no es una buena idea volver a casa. Está mi madre, por supuesto. Puedo convencerme a mí mismo de que conseguiré evitarla durante lo que queda del día, pero sé que no es verdad. Coincidiré con ella por el pasillo, durante la cena, antes de dormir, al despertar... Es lo que tiene
vivir con tus padres.¿Por qué mi hermana no parece tan afectada como yo?
-¿Me vas a contar ya qué es lo que te pasa?
Bright se cruza de brazos. Parece triste. No me gusta verlo así.
-Estoy bien.
-Si tú lo dices.
Después coge mi mano y tira con suavidad para tenerme más cerca.
-Déjame. Acabo de vomitar y me apesta el aliento.
-Me importa más saber cómo estás, pero no me lo quieres decir.
-Ya te lo he dicho, estoy bien.
-Te lo voy a estar preguntando hasta que me cuentes la verdad.
-Eres cabezón, ¿eh?
-Lo soy cuando algo me importa. Tú me importas. -Aprieta su mano contra la mía-. Winnie, ¿es por algo que he hecho? -insiste.
Lo miro a los ojos.
Joder, qué ojos. Tan negrod, tan suyos.
-No tiene nada que ver contigo, Bai. Por eso es tan complicado.
-Yo soy complicado.
-Esto lo es más.
-¿Más aún? ¿Debería ponerme celoso? -Y entonces sonríe para que
yo también lo haga. Y funciona, siempre funciona-. Tienes una sonrisa tan bonita que te follaría el culo ahora mismo.
-Serás vulgar.
Le doy un manotazo y Bright me contagia con su risa. Después me abraza y yo forcejeo luchando por soltarme, aunque me rindo fácilmente. Me gusta
estar entre sus brazos, hace que me sienta protegido.
-Sabes que puedes contar conmigo para lo que sea, ¿no?
-Lo sé.
-¿Tienes hambre? ¿Quieres algo de cenar? Podemos hacer noche de pizzas y Netflix. Te dejo elegir la peli que quieras.
-Tal y como tengo la tripa no me apetece nada cenar. Y menos si es comida basura.
-Mejor, odio las películas románticas y sé que ibas a elegir una de esas.
-He dicho que no me apetece cenar, no que no quiera ver una peli romántica.
-Mierda. Pensaba que me había librado.
-Eres un cabrón.
-¿En qué quedamos? ¿Soy un cabezón, un vulgar o un cabrón?
-Las tres cosas juntas y revueltas.
-Menudo batido.
-Sí.
-¿Te lo preparo? -Y entonces se agarra el paquete, sacudiendo el
bulto que se marca en la tela para que pueda ver lo dura que está-. Es casero y tiene muchas vitaminas.
-Menudo cerdo estás hecho.
-Te encanta que lo sea.
Trato de pegarle otra vez, pero en esta ocasión Bright es más rápido y consigue agarrarme. Repito la operación con la izquierda y sucede lo mismo. Ya no puedo mover los brazos, me tiene sujeto por las muñecas.
-¿Necesitas ayuda?
Intento soltarme. Nada.
-Suéltame.
-Dame un beso.
Se lo doy. Bright me suelta y en lugar de alejarme lo abrazo. Ahora solo busco su calor, rodeándolo por la cintura y hundiendo mi cara en su pecho.
-Siempre termino llorando -digo sollozando-. Y encima te estoy mojando la camiseta.
-Si quieres me la quito.
-Tonto.
-Vale, ya paro. Era solo una broma.
Sonrío.
-Win, quiero que confíes en mí.-Apoya sus dedos sobre mi mentón y lo levanta para que lo mire a los ojos-. Cuéntame qué te preocupa tanto.
Las palabras salen solas por mi boca y ya no puedo dejar de hablar. Me desahogo con él, le cuento la conversación con Tu, la carta que ha encontrado en el trastero, lo que he sentido al leerla y lo que eso implica.
-... y va y mi hermana me enseña la jodida carta... y no tendría que haberla cogido de su sitio... y por su culpa ahora estoy así... y no entiendo por qué no está tan mal como yo.Le cuento también que ahora me da miedo volver a casa, que me estoy volviendo loco, que todo es una puta mierda.
Él me escucha atento. De vez en cuando veo que arruga la frente, pero se queda callado hasta que entiende que he terminado de hablar.
-Eres muy valiente.
-¿Valiente?
-Sí, por compartirlo conmigo.
-No soy valiente, solo confío en ti.
-Las personas además de confiar en otras deben ser valientes para contar sus miedos.
-Supongo. No lo sé. Me duele la cabeza.
Vuelve a abrazarme.
-Sé que es difícil lo que te voy a pedir ahora, Win, pero tienes que intentar no culpar a tu hermana por no estar tan afectada como tú.
-No lo he hecho. En ningún momento.
-Un poco sí... -Pronuncia las palabras con cuidado, procurando no romper nada con su sonido-. Al final, aunque sepas que la culpa no es suya, es Tu quien ha encontrado la carta. Y si no lo hubiese hecho, ahora no estarías así. Pero en realidad te ha hecho un favor. Podría habérselo guardado para ella y no decirte nada. ¿Habrías preferido eso?
-Habría preferido que la carta siguiese donde estaba.
-Vale, pero el caso es que la ha encontrado. Vuelvo a hacerte la pregunta: ¿preferirías que se la hubiese guardado para ella?
-Supongo que no.
-Entonces, ¿coincides conmigo en que tu hermana ha actuado bien?
-Supongo que sí.
-Vale. Win, sé que yo no he leído la carta, pero, según me has contado, tu madre tenía un amante antes de casarse con tu padre y luego no volvió a saber nada más de él, ¿no?
-Exacto.
-Entonces, esto solo te afecta a ti -dice en voz baja.
Al oír su última frase no solo sé que tiene razón, sino que consigue hacerme recordar algo que había pasado por alto.
Algo que podría ser la clave de todo esto.¿De verdad piensas que...?
Sí.
Es una locura. Demasiada coincidencia.
Pero ¿y si fuera la persona que estoy buscando?
¿Lo estás buscando?
No. No lo sé.
Comienzo a reírme. Es una risa nerviosa.
¿Estaré volviéndome loco?
-¿Win?
-Creo que ya sé quién fue su amante.
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Los cuerpos de la habitacion roja. (Adap. BrightWin)
FanfictionMe llamo Win y tengo tres normas: 1. Nadie puede descubrir mi secreto. 2. Solo podemos hacer el amor dentro de la habitación roja. 3. Y la más importante, no voy a enamorarme de él. ⚠️Contenido Homosexual ⚠️Contenido EXPLICITO 🔞