17. Las pesadillas regresan

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Querida Hillary:

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Querida Hillary:

Por aquí todo va bien. Tengo unos pocos amigos nuevos, en especial Ron. Me recuerda a ti porque es pelirrojo. Pero tu eres más lista, él es un poco torpe, pero es muy bueno y gracioso.

Adivina, ¡estoy en Gryffindor! ¡Descubrí que esa era la casa de mamá y papá! Y me dijeron que mamá era de las brujas más inteligentes de su época. Ahora no queda duda que eres una copia de ella. Ambas sois listas, poderosas y muy guapas.

Y sobre el Quidditch. ¡Estoy en el equipo! ¡Soy el nuevo buscador del equipo de Gryffindor! El capitán del equipo es súper bueno al Quidditch. Se llama Oliver y es muy competitivo, creo que si tú y él fueran los capitanes del equipo, no tendríamos rival alguno.

Desgraciadamente, no todos aquí son siempre amables. Hay un chico en Slytherin que me odia, y el sentimiento es mutuo. Se llama Draco, Draco Malfoy, y es un idiota. Se cree mejor que todos solo porque es rico. De verdad que lo odio, pero tendré que soportarlo.

Espero tu carta de la semana que viene, te quiero.

-Harry Potter.

Cuando Hillary leyó aquella carta de su hermano, se le encogió el corazón. No podía creer que Draco hubiera cambiado realmente tanto.

¿Podría comunicarse con él a través de Harry y Hedwid? No, Harry la mataría y Hedwid chivatearía a Harry.

Hillary no pudo hacer otra cosa que esperar con ansia el día en el que se volvieran a encontrar.

•••

Aurora hincó los codos en sus rodillas. Estaba sentada en las gradas de la pista de hielo, viendo el entrenamiento casi diario de Hillary.

—¿Has vuelto a tener pesadillas?

Regulus se sentó a su lado.

—¿Cómo lo sabes?

—Llevas días ausente —respondió—. Con la mirada perdida y manos temblorosas que se aferran a la cerveza de turno.

Ella suspiró.

—No puedo dejar de pensar en la Profecía. Tuve un sueño y Lily era la que lloraba antes u hija muerta.

—Eso no puede pasar porque Lily ya está muerta.

—Ya...

Ambos se quedaron en silencio. Aurora vio cómo Hillary practicaba cómo caer tras un Áxel.

—¿Ya no bailas? —Regulus interrumpió sus pensamientos.

Hillary Potter: la Elegida de Andraste (reescrito)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora