capitulo 10

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La sala se encontraba completamente vacía, y era de esperarse, si había llegado unos cuarenta minutos antes del inicio de la primera clase.

Y la razón era netamente para poder escapar del interrogatorio que Mikasa me había estado haciendo desde el sábado sin descanso alguno, exigiendo la verdad con respecto a para dónde y con quién me había reunido ese día.

Lo primero que se me ocurrió hacer fue inventar una excusa que fuera lo suficientemente creíble para que ella se viera conforme y dejara de lado el tema, lo que habría logrado si no fuera porque justo en ese preciso momento Mikasa recibió un mensaje de una de sus amigas de facultad, Annie, felicitándola por su actual cuñado, adjuntando una foto de cuando Eren y yo estábamos arriba de la moto.

Lo bueno dentro de todo, era que en la imagen Eren ya tenía el casco puesto, lo que sería un impedimento para Mikasa en su investigación de saber la identidad del desconocido.

Si ella quería saber, tendría que descubrirlo por su cuenta, porque sin importar lo mucho que me insistiera o amenazara, de mi boca jamás saldría algún tipo de información al respecto.

Además, ¡estábamos hablando de Eren! de seguro si se encontraban, el idiota saldría con uno de sus típicos comentarios que dejarían a mi hermana con ganas de cometer asesinato.

Y sí, mi hermana siempre tuvo menos paciencia que yo.

Para mi desgracia, a pesar de que me mantuve completamente reacio en otorgarle datos que le ayudasen en su dizque investigación, Mikasa, por cuenta propia había llegado a la conclusión de que "mi supuesto romance" era con alguien de la universidad, afirmando que yo era demasiado cerrado como para involucrarme con gente de otros lugares.

Vaya que la maldita tenía razón.

Necesitaba mantenerme lo más alejado posible de Eren, asunto que estaba viendo como algo inútil si tenía en consideración lo mucho que disfrutaba acercándose a mi para molestarme a la más mínima oportunidad que se le presentaba.

Hablando del rey de Roma...

Supe que mi momento de tranquilidad estaba pronto a terminar cuando escuché sus voces cada vez más cerca. Llevé la mirada hacia la puerta, viendo como Eren e Isabel entraban a la sala hablando sobre algún tema en común de lo más animados. Lo que me pareció extraño, pero decidí pasar por alto.

Al fin y al cabo, los dos eran bastante extrovertidos y parecían llevarse bien desde inicio de este semestre.

—¡Levi!—vociferó Isabel en el momento en que sus ojos fueron a dar con mi persona, notándose un tanto sorprendida por mi presencia en la sala—¿Te caíste de la cama o que mierda?—preguntó, caminando hacia donde me encontraba yo con Eren siguiéndole el paso.

Eren se dejó caer en la silla que estaba a mi lado, e Isabel tomó la silla del puesto de adelante y la dio vuelta para quedar frente a frente conmigo.

—¿Pasó algo que me quieras contar?—dijo, apoyando su rostro en la palma de su mano y mirándome fijamente.

Le di una rápida mirada al idiota. La verdad, mucha información no podía darle con Eren sentado a mi lado.

—A Mikasa le llegó la menstruación y anda de insoportable por la vida.

Ella negó con la cabeza, no viéndose para nada convencida por mi vaga respuesta—¿Es solo por eso o hay algo más?—Habló, tratando de indagar más en el tema.

Te Odio Eren Jaeger (Ereri)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora