30. Dinero.

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—Buenos días.—me acerqué lentamente a Alex.

—¿Qué pasa? —preguntaba medio dormido. 

La noche anterior habrían ido a casa de Matt pero con Alex decidimos quedarnos por si volvían ebrios... cosa que hicieron.

—Tu novia te busca. —dije pasando el  teléfono— Te conviene contestar.

—Bien. —tomó el teléfono y se dió cuenta de que había quedado en planes con Alexa y no lo recordó.

Luego de un rato de la conversación de Alex y... Alexa, el chico se levantó y se dirigió a dejar el teléfono a su lugar.

Cinne estaba recostada en el sofá tomando café con una resaca que no imaginan.

—¿Qué pasa, Al?

—Olvidé que debía salir con Alexa anoche...

—Suena mal.

—Lo es.

—¿Qué harás? —pregunté de entrometida.

—Depende de si gusta salir nuevamente hoy.

—Demás que sí. De lo contrario le lloras. —di un sorbo a la taza.

—Realmente la amo, ¿sabes? —decía sentándose a mi lado— No quisiera perderla.

Solté un leve suspiro al pensar en James.— Lo sé Alex, se nota.

Era obvio que estaba embobado con esta chica, y lo entiendo completamente, estábamos hablando de Alexa.
Normalmente era genial involucrarme en planes de salida con ella, es agradable. Además de que hubo un momento en el que me odió pero... ya fue.

Un dia que Alex invitó a Alexa, lamentablemente tuve que ir a preguntarle una cosa sobre si podía cuidar a Nissa durante un tiempo que me iba de viaje, por lo que ella concluyó de que nos llevábamos muy bien y pensó lo que cualquier novio con amiguitas hace pensar: Que yo podía terminar con la relación e irme con Al. Cosa que dudo que sea posible de aquí a trescientos años luz.

Yo soy feliz con James y a pesar de llevar años juntos, no hemos pensado mucho en el tema de casarnos o entablar una familia o algo por el estilo, si no que hemos sido... del tipo de relaciones que solo se quieren por un largo tiempo sin pensarlo.

—Oye —dije teniendo una idea de la nada— ¿Si viajo a Las Vegas?

—¿A qué va eso? —preguntó Alex confundido— ¿Qué pasa con la banda?

—Puedo seguir asistiendo con las letras o melodías igual.

—Pero no de la misma manera.

—¿Quieres que me quede, Al? —sonreí.

—Yo no, solo que te involucras en algo y debes seguir con ello. —dijo evitando el contacto visual.

—Owwww...

—Dile eso a tu gata, ¿si?

Pasó un rato y luego Al salió, dejando a Cinne sola en casa con su gata.
Al final habrían conversado a cerca del viaje y de que, por mas que la apoyaba, se preguntaba cómo iba a seguir apoyando en la banda.

Cinne solo pensaba en que si iba a Las Vegas, podría conocer a un chico Elvis con dinero y que apueste por mujeres con poca ropa... Broma.
Solo se le ocurrió de la nada misma el hecho de querer ir a Las Vegas a pasar noches apostando en casinos o cosas así. Vestir cosas lujosas y subir a autos lujosos. Todo resumido en una palabra:

Dinero.

Pues... el día de mañana era la boda de Lizz, por lo que hoy iba a ser la pequeña despedida de soltera que planeaba hacer con Cinne y un par de amigas más.

𝓊𝓈, 𝓉𝒽𝑒 𝓇𝒶𝒾𝓃 𝒶𝓃𝒹 𝒶 𝒸𝑜𝒻𝒻𝑒𝑒《𝓐𝓵𝓮𝔁 𝓣𝓾𝓻𝓷𝓮𝓻》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora