"Cuando morimos, nuestra vida se convierte en una planta perenne que vuelve a florecer una y otra vez en el multiverso"
-- ¿Crees en la reencarnación?
-- No lo se ¿Y tu?
-- Tampoco lo sé, pero si existe otra vida después de esta ¿Me buscarás?
-- Te...
AQUI LES DEJO COMO SE VE LA (EL) PROTAGONISTA EN ESTA PARTE DE LA HISTORIA.
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18/Nov/1900.
-- ¿Estas emocionada?-.- pregunta mi hermana con entusiasmo
-- La verdad no, solo lo hago por ti-.- contestó seca.
Mi bella hermana mayor, trabajaba para el propietario de una fábrica de muebles y me pidió de favor que la ayudara por falta de personal.
-- Apresúrate Minji, el señor Jeon nos está esperando afuera-.- ruedo los ojos, no quería ir.
Mierda!! Soy solo una joven de 19 años, debería de estar estudiando, pero aquí voy saliendo de mi casa rumbo a un trabajo que no quiero, pero necesito.
-- Ya voy, Dios Zul, eres tan molesta-.- recibo una palmada en la parte trasera de mi cabeza.
-- Respétame, soy tu hermana mayor.
Al salir puedo ver el auto del jefe de mi hermana, debe estar podrido en dinero, esos artefactos son nuevos, hace apenas pocos años solo había carretas jaladas por caballos.
-- Buenos dias-.- saludo cortés, pero solo recibo un movimiento de cabeza del estúpido señor Jeon.
-- Vamos Minji entra-.- ella quiere que suba en medio, quedando casi pegada a su jefe.
-- ¿Que? No, sube tu anda--.-- me hago a un lado y la dejo subir.
Miro de solzayo al jefe de mi hermana, lo admito, si, el es extremadamente guapo, su rostro masculino, mentón fuerte y definido y puedo ver un leve crecimiento en su barba, en algunos hombres podría verse como algo poco higiénico, pero en el se ve... ¿sexy? No lo sé, lo escucho hablar de trabajo con mi hermana y su voz es grave, casi ronca, pero a la vez suave y sensual.
-- Minji-.- escucho a mi hermana-.- hoy te quedarás con el señor Jeon, el te dará un curso intensivo.
-- Ok-.- respondo sin entusiasmo.
El viaje es corto, mi hermana baja en una parte de la fabrica y su jefe y yo nos dirigimos a otra, llegamos a un lugar donde hay bastantes hombres trabajando, llevando grandes trozos de madera de aquí para aya.
Al lado hay una pequeña cancha de juegos, hay varios niños pateando una pelota y es cuando me pregunto ¿Que mierda estoy haciendo aquí?
Cuando giro mi rostro hacia los niños de nuevo veo como la pelota vuela directo hacia mi.
Me encojo en mi lugar esperando el golpe más este nunca llega.
-- ¿Estas bien?-.- la voz rasposa del jefe de mi hermana traspasa mis oídos.
-- Eh yo...-.- aclaró mi garganta -.- si, gracias.
Toma la pelota con sus dos manos y la lanza hacia los pequeños.
