(Pov de T/N)
-Que no Sandra, que no quiero ir, ni siquiera se quienes son.- le repetí a Sandra, mi mejor amiga por décima vez en los últimos cinco minutos.
Queria que fuese con ella al concierto que hacia su banda favorita en nuestra ciudad esa noche. A mi no me hacía mucha ilusion ir pues no les conocía, ni siquiera habia oido hablar de ellos hasta ese día. Bueno, oido hablar si ya que era de lo único que hablaba Sandra.
-Porfavor T/N, llevo esperando, meses a que vengan a la ciudad y es la oportunidad perfecta a que amplies tus gustos musicales. Va T/N.- rogó por milésima vez.
Estuve pensandolo unos instantes. Sandra tenía razón. Así podria ampliar mis gustos musicales y que mejor manera de hacerlo que yendo a un concierto en directo.
-Bueno vale, iré.- le revelé a Sandra tas minutos que le debieron parecer horas por la expresión de su cara al oir el veredicto.
-¡Muchísimas gracias T/N! ¡Jamás podré agradecertelo, enserio!.- gritó de alegría.
Si soy sincera, no tenía demasiadas ganas de asistir, no les conocía, no sabía que estilo tenían ni que tipo de musica hacian. Lo que se hace por amistad...
Como en concierto comenzaba a las 21:00 y Sandra pasaría a buscarme a las 20:30, a las 19:00 decidí comenzar a arreglarme para la ocasión. Como no sabía exactamente de que manera vestirme para que quede bien con la temática de la banda, decidí ser yo misma y elegir un atuendo para el día a día.
Agarré del armario una falda vaquera bastante corta per lo suficientemente larga para que me cubra lo que es debido, un top de tirantes negros con brillo que me llega justo por encima del ombligo, unas mediad negras de rejilla, mis deportivas negras de plataforma y por último unos calentadores blancos que me coloqué sobre mis tibias y por encima de las deportivas.
Para el cabello, decidí dejarme la melena suelta ya que no tenía demasiada motivación para recojerme los rizos.
Finalmente para el maquillaje, simplemente me puse corrector, rimmel y me hice la ralla del ojo negra i oscura difuminada con sombra negra. Un poco de colorete, iluminador y brillo de labios.
Cuando se acercó la hora en la que habíamos quedado Sandra y yo, decidí ir bajando para estar lista cuando llegase y así no hacerla esperar. Una vez que me recogió con su mercedes blanco para dirigirnos al pub donde tocarian, no pude no fijarme en la gente que paseaba por allí hacia la misma dirección que nosotras. Iban todo vestidos de negro con botas super altas y cantado musica metalica. ¿En que me estaba metiendo?
-Sandra, que tipo de musica toca esta banda?- pregunté realmente intrigada.
-Ya lo verás cuando lleguemos, creeme te va a gustar.
Decidí hacerle caso pues ya estabamos llegando y los nervios me estaban comiendo.
Cuando conseguimos colarnos en la primera fila, me sentía fuera de lugar. Las personas que estaban en ese lugar no tenian un estio nada similar al mío. Sentía que sobraba. La ansiedad estaba comiendome hasta que oí unos acordes de una guitarra electrica que cautivaron mi atención. Levanté la cabeza y lo que me encontré me dejó descolocada.
Unos ojos marrones increiblemente misteriosos y hermosos. Una cabellera rubia recogida en una coleta con rastas a la cual la decoraba una gorra y una banda debajo de esta. Una vestimenta realmente holgada y unos labios rosados que los decoraba un piercing en uno de los lados.
Me estaba mirando mientras tocaba y pude observar una pequeña sonrojez en sus mejillas. Me latía el corazón con fuerza y cuando apartó la mirada unos instantes para volverla a posar en mi, lo sentí.
Sentí que me enamoraba.
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Mi pequeño Rastafari (1ra parte saga pequeños)
RomanceNunca pensé que sentiria lo que sentí cuando le vi. Nunca pensé que sería en ese preciso instante. Nunca pensé que sería en un sitio lleno de gente, cuando a mi me dan pánico las aglomeraciones. Nunca pensé que seria con él, con el pequeño rastafar...