1 mes despuésNarra Noelia.
Me despierto a las ocho como todas las mañanas. Miro la habitación con los ojos entrecerrados mientras bostezo y miro el lado de la cama ya vacío donde duerme Abraham, sonrío enamorada y me abrazo a su almohada. Cierro los ojos sintiendo su olor que al instante invade todo mi cuerpo y vuelvo a sonreír enamorada al recordar como se despidió de mi esta mañana antes de irse a trabajar. Suspiro mientras me levanto con algo de pereza y voy al baño a darme una ducha. Media hora después bajo al comedor ya arreglada y sonrío al ver a los mellis y a Alex desayunar. Me siento donde siempre y a los segundos veo a Maria entrar con una taza de café en sus manos, me la deja encima de la mesa y le sonrío mientras le agradezco. Cuando los mellis terminan de desayunar los acompaño a la puerta y afuera ya estaba Víctor esperando con el coche para llevarlos al cole, le doy los buenos días y me despido de los niños. Entro en casa y veo a Alex en el salón, me sonríe mientras se pone su mochila y le devuelvo la sonrisa. Hace unas semanas que empezó las clases y estaba muy contento. Abraham enseguida le encontró una escuela en donde daban clases de mecánica y Alex se apuntó enseguida.
Alex: Noe, me voy ya ha clase.
Noelia: que te vaya muy bien Alex. - él me sonríe y me da un beso en la mejilla.
Una hora después de que Alex y los niños se fueran, me despido de Maria y voy a casa de Andrea y Tony. Hoy había quedado con Andrea para ir a ver vestidos de novia, ella me está ayudando con casi todos los preparativos. Abraham y yo ya habíamos puesto fecha para la boda y estábamos preparando ya las invitaciones, mañana iría con él a elegir el diseño de las invitaciones. Camino hasta la casa de Andrea y Tony. Éramos vecinos, ellos vivían cuatro casas más adelante que nosotros y podía ir andando sin problema. Al llegar a su casa llamo al timbre y a los segundos me abre Andrea con una sonrisa. Sonrío al verla y nada más entrar nos damos un abrazo. Me invita a un café antes de irnos y acepto encantada. Mientras nos tomamos el café hablamos de como van los demás preparativos de la boda. Le cuento los preparativos que ando haciendo junto con Abraham, como por ejemplo, el lugar en donde será el banquete, el diseño de las invitaciones, si será una boda por la iglesia o por lo civil....
Cuando terminamos de tomar el café salimos de su casa y andamos hasta la primera tienda de vestidos de novia. Nada más entrar nos atienden y me enseñan varios vestidos. Yo miraba todos muy atenta, miraba muy bien cada detalle del vestido. Sería un día muy importante y el más especial de toda mi vida y quería un vestido que nada más verlo me gustara, que hiciera que mis ojos brillaran y que a los segundos de verlo mi mente y mi corazón dijeran, es ese. Suspiro mientras Andrea y yo salimos de la cuarta tienda. No encontraba ninguno que me gustara y eso me estaba empezando a desesperarme.
Andrea: mira Noe, aquí hay otra tienda. - me giro al escucharla y sonrío nada más ver el escaparate.
Noelia: wooow... - digo mientras me acerco al escaparate y miro los tres vestidos que tenían, para nada se parecían a los vestidos que he visto en las otras tiendas. Estos eran más bonitos y se notaba que estaban más trabajados. - son preciosos. - digo con una sonrisa enorme.
Entramos a la tienda y enseguida nos atiende una chica muy amable y con una agradable sonrisa. Ella me pregunta como quiero el vestido, le digo más o menos como me gustaría que fuera y ella me sonríe.
Dependienta: creo que tengo el indicado para usted señorita, esperenme aqui por favor. - asiento y la veo entrar a un almacén algo grande, yo me siento junto a Andrea en uno de los sillones que había allí.
Miro a Andrea muy nerviosa, ella me sonríe y me agarra la mano, me la aprieta con suavidad y me dice que este tranquila. Llevábamos casi toda la mañana viendo vestidos, esta era la quinta vez que salíamos a buscar vestidos y me estaba ya desesperando al no encontrar ninguno. Varios minutos después veo a la dependienta salir y nos mira con una sonrisa.
Dependienta: he preparado el vestido en un maniquí para que lo pueda ver mejor, ya pueden pasar a verlo. - me levanto junto con Andrea y entramos a una pequeña salita.
Habían muchos vestidos puestos en varios maniquís y sonrío al ver cada uno, eran muy bonitos. Me paro enfrente de uno que estaba cubierto con una gran sábana blanca, miro a la dependienta algo nerviosa.
Dependienta: lista?. - asiento muy nerviosa y ella quita la sábana con un suave movimiento dejando al descubierto el vestido.
Nada más ver el vestido que tenía enfrente de mi, mis ojos se abren como platos y me llevo las manos a la boca. Era el vestido de novia más precioso que jamás había visto en mi vida, este vestido era un sueño. Me acerco y lo toco con suavidad, mis dedos sienten la fina y suave tela de la cual estaba hecho el vestido y sonrío casi con lágrimas en los ojos, sin duda, era este.
Noelia: es precioso... - digo con la voz algo temblorosa y miro a Andrea y a la dependienta con mis ojos brillosos. - está decidido, me lo llevo. - la dependienta asiente y Andrea y yo salimos para dejar a la dependienta que me lo prepare.
Noelia: ay amiga, ya tengo vestido!!! - grito emocionada y la abrazo, ella corresponde a mi abrazo y acaricia suave mi pelo.
Andrea: amiga, sin duda vas a ser la novia más hermosa de todo el mundo. - le sonrío con dulzura cuando nos separamos.
La dependienta sale de la sala con una caja enorme y sonrío, ahí dentro estaba mi vestido. Pago el vestido, le doy las gracias y Andrea y yo salimos de la tienda. Cogemos un taxi y vamos a su casa. Al llegar ya eran casi las cinco de la tarde, se nos pasó toda la mañana mirando vestidos y ni habíamos comido. Preparamos algo para comer y hablamos mientras comemos.
Noelia: amiga, puedes guardarme tú el vestido? - digo mientras bebo un poco de agua. - no quiero tenerlo en casa, ya sabes.... por si Abraham lo encuentra y lo ve. Él conoce cada centímetro de esa casa y no sabría donde esconderlo, me muero si lo ve antes de la boda. - ella ríe de forma tierna.
Andrea: claro que si, yo te lo guardo encantada. Aquí está en buenas manos. - le sonrío dulce.
Noelia: muchas gracias. - ella me guiña el ojo, reímos y comemos entre risas.
Llego a casa a las ocho de la tarde y sonrío al ver que el coche de Abraham estaba aparcado fuera de la casa, hoy había llegado pronto. Entro en casa y los mellis y Alex estaban en el salón, les saludo con un beso a cada uno y doy un pequeño salto al notar que unos brazos rodean mi cintura.
Abraham: y para mi no hay beso?. - sonrío al escuchar su voz y mi piel se eriza con el tacto de sus labios en mi oreja.
Noelia: mi amor.... me has asustado. - río dulce, giro mi cara a un lado quedando su cara muy pegada con la mía y le doy un beso en los labios.
Él sonríe en mis labios cuando nos separamos y Maria nos avisa de que ya está la cena. Cuando terminamos de cenar nos vamos todos a descansar y yo subo con los mellis a su habitación, les pongo el pijama y les doy las buenas noches cuando se meten en la cama. Voy a la habitación, cierro la puerta y suspiro mientras me siento en la cama y me quito los tacones. Me quito la ropa y Abraham justo salía del baño, sonrío al verlo sin camiseta, solo llevaba sus pantalones de dormir. Él sonríe mirándome de arriba abajo, yo me sonrojo y me pongo rápido el pijama, él ríe mientras se mete en la cama y yo lo hago después de ir al baños a hacer mis necesidades y lavarme los dientes. Nada más meterme en la cama Abraham me abraza y yo me abrazo completamente a él.
Abraham: hoy has vuelto muy contenta mi amor. - sonrío al escucharle decir eso y le miro.
Noelia: si, es que.... hoy fui con Andrea a ver vestidos de novia y ya encontré uno. - digo mientras acaricio su pecho y sus ojos brillan. - mi amor, ya tengo vestido. - digo emocionada y él me da un beso en los labios.
Abraham: no te imaginas las ganas que tengo de verte vestida de novia, de verte entrar vestida de blanco junto con un ramo de flores en tus manos mientras yo te espero en el altar. - sonrío enamorada al escuchar eso y acaricio su mejilla.
Noelia: yo también tengo muchas ganas de verte a ti esperándome en el altar con un traje muy bonito y ver en tu cara esa preciosa sonrisa que tanto me gusta...
Susurro de forma dulce, él sonríe sobre mis labios y me besa lento pero con pasión. Le sigo el beso de la misma forma y él junta nuestros cuerpos por completo. Tenía tantas ganas de que llegara el día de nuestra boda. Sin duda, ese día, sería el mejor y el más especial de nuestras vidas.
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La casa de los Mateo {AM}
FanfictionElla una chica dulce y cariñosa. Él un hombre serio y cortante. ¿Qué pasará cuando ellos dos se conozcan? ¿Logrará ella traer paz y felicidad a la casa de los Mateo después de la tragedia que le ocurrió a esta familia? Descúbrelo en esta historia...