Karina paseaba por uno de los miradores más famosos de Bristol, ella adoraba ir s visitarlo cuando quería desconectar. Estaba en lo alto de una colina, se rodeaba de bancos y podías ver los edificios a lo lejos.
Ella fue directa hacia su banco de siempre, llevaba su libro de lectura en una mano y los cascos puestos, pero cuando llegó se dio cuenta de que había alguien de pie junto a él observando el precipicio.
Una chica rubia de pelo liso, camisa de cuadros y un pantalón corto. Karina se quitó los cascos y habló.
—¿Vas a tirarte?
La rubia se giró hacia ella de la sorpresa y sonrió.
—No, solo me han sorprendido las vistas.
Karina alzó la vista al frente.
—La gente de normal se queda fascinada por los edificios y como se ve todo desde aquí, pero tu estabas mirando el precipicio.
—También tiene buenas vistas.
Karina esbozó una sonrisa y se sentó en el banco. La rubia se quedó unos instantes pensando pero la imitó y se sentó al otro extremo. Vio como Karina sacaba su libro y se preparaba para leer.
—¿Cómo te llamas? —preguntó la rubia.
—Karina, ¿y tú?
La rubia se quedó unos instantes en silencio.
—Me llamo Minjeong.
—¿No eres de por aquí, cierto?
—¿Tanto se nota? —bromeó.
—Yo soy la que lo nota, el resto no se dará cuenta, tranquila —Karina cerró el libro, ahora había otra cosa que le había cautivado aún más—. ¿Estas de vacaciones?
—Algo así, a largo plazo.
—¿A largo plazo?
—Por ahora indefinido —sonrió.
—Pues espero que disfrutes de nuestro maravilloso pueblo, no tiene gran cosa pero es acogedor.
—No me vendría nada mal una guía —sonrió.
—¿Me estas insinuando algo? —preguntó Karina haciendo reir a Minjeong.
—¿Tal vez?
—¿Cuanto llevas aquí?
—Un par de semanas. He estado viendo cosas pero intento amoldarme poco a poco.
Asintió Karina al escucharla.
—¿Hay algo que quieras ver en particular?
Ella se quedó pensando unos instantes.
—Leí en internet que el Dame Emily Park es bastante bonito.
—El Dame... Empiezas fuerte. Esta casi al otro lado de la ciudad —rió.
—Oh...
—Nah, te llevo. Hace mucho que no lo visito.
—¿Estas segura? —preguntó confusa—. No quiero interrumpir tu tarde de lectura.
Karina esbozó una sonrisa. Últimamente su vida se había vuelto monótona, era siempre lo mismo. De casa a clases, de clases a casa, pasear para desconectar y vuelta a empezar. Pero esto... Esto era diferente.
—Sí.
—Pero nos acabamos de conocer —añadió Minjeong.
—¿No eras tú la que quería una guía?
Touché, pensó Minjeong.
—Esta bien, vamos.
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once again | winrina
FanfictionCuando el amor se va, el dolor se queda. Karina lo sabía muy bien. Es lo que sucede cuando la persona que amas, de la noche a la mañana, se marcha de la ciudad sin avisar o despedirse. Ahora, cuatro años después, Minjeong regresa a Bristol con un n...