Capítulo 12 parte II. Está celosa

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Llamada
- Joseph necesito aprobar la columna y en mi correo no la veo - digo mientras reviso mis correos -
- Déjame mandártela de nuevo - dice el castaño y resoplo -
- La espero - digo sería y nos despedimos para colgar -
Finalizada Llamada

Sigo revisando unos par de planificaciones pero unos minutos después me alejo de la laptop y me quito los lentes, volteo a ver el ventanal y sonrío por lo bella que se ve Bogotá de noche, mi celular suena y me desconecto, agarro el celular y lo desbloqueo, veo que es mamá.

Amanda: "¿Puedes venir a cenar en casa de Marijo?" 7:30 p.m.

Me quedo pensando y si tengo hambre, sonrío porque recuerdo que debo comer, también recuerdo que Marijo cocina muy bueno pero ¿Y si va ella con su prometida? Me moriría si las veo allí juntas, no sé, no creo que sea buena idea. Mi celular vuelve a sonar y bajo la mirada para ver otro mensaje de mamá.

Amanda: "Que Alberto quiere verte y Marijo está encantada de que vengas" 7:33 p.m.

Yo: "Esta bien, ya voy para allá" 7:33 p.m.

Pongo la laptop en reposo y dejo el celular en la barra, me levanto del taburete y me doy la vuelta para ir hasta mi habitación, me miro al espejo y tengo la misma ropa de esta tarde cuando fui al bar, mal no se ve así que agarro la chamarra negra y me la pongo de nuevo, me pongo las botas y me arreglo el cabello.

Salgo de la habitación y voy hasta el sofá donde agarro mi cartera, me acerco a la barra y agarro las llaves junto a mi celular, apago las luces y camino hasta la salida, abro la puerta y salgo para cerrar, camino hasta el ascensor y desbloqueo el celular para revisar que Joseph me haya mandado el correo pero nada, me quejo y al llegar al ascensor toco el botón y espero a que suba.

Unos minutos después camino hasta la camioneta, le bajo el seguro y me subo, dejo la cartera con el celular en el asiento del copiloto, me pongo el cinturón de seguridad y enciendo la camioneta, también enciendo la radio y mientras salgo del estacionamiento va sonando Mala y peligrosa, sonrío y le subo para ir cantando mientras voy a casa de los Cáceres.

Un rato después me estaciono frente a la casa de Marijo, apago la camioneta y volteo a ver hacía la casa, sigue igual de bonita por fuera como hace cuatro años, sonrío de lado y me quito lentamente el cinturón de seguridad, agarro mi cartera y me bajo de la camioneta, la rodeo y camino lentamente hasta la entrada, toco el timbre y se escuchan ruidos desde adentro, me doy la vuelta mientras espero.

- ¡Saura! - gritan y me giro asustada -
- Alberto - sonrío y me acerco a abrazarlo -
- Tanto tiempo sin verte aquí - dice y asiento alejándome -
- Mucho - susurro y asiente sonriendo como siempre -
- Entra, ven - chilla y me rio para seguirlo - Marijo esta en la cocina, te dejo y ve a la sala ya sabes, estas en tu casa - dice emocionado y sonrío -
- Gracias Alberto - susurro y asiente para ir con Marijo a la cocina -

Me acerco hasta la sala y sonrío al ver a África con María José en brazos, me acerco y Paola se pone de pie junto a África, las saludo a las dos y cargo a Marijo, saludo a mamá y a Edward mientras me siento con la castaña en el sofá entre Paola y África, le hago muecas y se ríe, alzo la mirada y solo hay una cosa que me llama la atención, ella no está aquí, suspiro y vuelvo a ver a Marijo.

- Te ves hermosa, serias una linda madre - dicen y alzo la mirada -
- Chistosa Marijo - digo y se ríe -
- Me parece bueno que me des una nieta - pide mamá y niego -
- ¿No quieres ser madre? - pregunta África y volteo a verla -
- Una vez quise - susurro y ella asiente entendiendo -
- Nunca se sabe - dice y se pone de pie - ¿cerveza o ron? - pregunta y me rio -
- Cerveza, por favor - asiente y va hasta la cocina -

Causa y Efecto part II Donde viven las historias. Descúbrelo ahora