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A la mañana siguiente, Eddie despertó con el ruido de Jackie vomitando en el baño. Se puso rápidamente los pantalones de chándal que les habían dado y se aproximó hasta allí.

Cogió una toalla de manos, la empapó de agua fría y se agachó al lado de ella, sujetándole el pelo para que no le molestara.

- Nunca pensé que ver a alguien con la cabeza metida en un váter echando la pota me parecería tan bonito – bromeó pasándole la toalla húmeda por la nuca.

Jackie se giró un momento para echarle una mirada fulminante antes de volver a meter la cabeza en la taza y seguir vomitando.

- Te odio – dijo Jackie una vez parecía que había terminado, limpiándose la boca y apoyándose en el pecho de él – y odio estas jodidas nauseas.

- Ya me lo supongo – dijo él riéndose y dándole tiernos besos en la sien -. ¿Quieres darte una ducha?

- Sí, por favor.

Eddie se separó un momento de ella para poner la ducha en funcionamiento y en ese momento alguien llamó a la puerta.

- Voy a ver quién es – le informó a Jackie dejándola darse una ducha tranquilamente.

Cuando abrió la puerta, encontró a Evelyn cargando una bandeja con comida y detrás de ella a Dustin.

- Buenos días, mi niño – dijo Evelyn feliz, dándole un beso en la mejilla -. Os he traído el desayuno. ¿Dónde está la gordita?

- Buenos días mamá – saludó Eddie cogiendo la bandeja de sus manos y dejándola en una mesita de la habitación -, Jackie está en la ducha. Hoy se ha levantado con muchas náuseas.

- Es normal el primer trimestre – le explicó Evelyn -, sobre todo con el estómago vacío. Que desayune bien y luego se tomé las pastillas que los doctores le han recetado.

- ¿Y él? ¿También venía con receta? – bromeó Eddie señalando a Dustin.

- Me lo he encontrado ya esperando en la puerta.

Evelyn se despidió y al salir por la puerta se topó con Robin y Steve que estaban por llamar.

- Buenos días – la saludaron ambos antes de meterse dentro de la habitación.

Evelyn rio y antes de salir le recordó a Eddie que tenían que hacer hoy.

- Hasta luego cariño. No os olvidéis que después tenemos que reunirnos con el doctor Owens.

- Tío, los padres de Jackie son una pasada – exclamó Robin sentándose en la cama cuando Evelyn se hubo ido.

- Ya te dijo – añadió Steve con cara de alucinado -. Yo les dijo a mis padres que he dejado a una chica embarazada y mínimo me cortan la cabeza. Y a ti te han aceptado con los brazos abiertos y están encantados con todo.

- Lo sé, yo tampoco me lo creo aún – confesó Eddie con una sonrisa triste -. A veces pienso que todo esto no es verdad y que en realidad no he salido nunca de ese sitio. Jackie me hace recordar que es verdad, ella es mi realidad.

Jackie ya había salido de la ducha y oyó todo lo que dijeron. Salió corriendo del baño solo con la toalla y se lanzó en brazos de Eddie.

- Nunca vuelvas a repetir eso – dijo Jackie llorando -. Te lo dije ya una vez, eres amado y querido porque te lo mereces. Porque eres una persona maravillosa. No quiero oírte volver a dudar de ti.

Eddie sonrió y le dio un beso.

- Jackie tiene razón. Somos tus amigos porque nos gusta como eres. Hasta yo ahora considero a Eddie "el freak" como a un hermano – añadió Steve.

Vuelta a tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora