𝑨𝒍𝒇𝒂 𝒑𝒂𝒏𝒅𝒊𝒍𝒍𝒆𝒓𝒐 ⚝𝑴𝒂𝒊𝒕𝒂𝒌𝒆⚝

♡𝓕𝓸𝓻𝓽𝔂-𝓼𝓮𝓿𝓮𝓷♡

-hora de que hablemos takemichi -susurra mikey apartado sus manos del cuerpo ajeno, pero no se alejo.

Su nariz y la de takemichi estaban a centímetros de tocarse. El pelinegro bajo la cabeza con frustración, estaba enojado por lo que hicieron sus hermanos pero también por el maldito comportamiento de todos esos idiotas qué llego a considerar sus amigos.

-no creo que debamos hacer esto -susurra alejandolo de él.

Mikey sonrió y negó -supongo que tienes razón, pero debemos hablar.

-¿Sobre qué? Terminamos y eso es todo, sí te sentías culpable o algo por el estilo elimina esos pensamientos de tu cabeza porque esto no tiene nada que ver contigo, es algo entre mis hermanos y yo.

-¿Qué sucedió realmente entre naoto y tu? ¡Dime la verdad! ¿Qué te hizo? -pide en un tono desesperado tomando sus manos.

Takemichi se empezaba a sentir sofocado por los horribles recuerdos -nada, no pasó nada.

Mikey gruñó y se alejo pasando sus manos por su cabello con desesperación -mientes, se que estas mintiendo y lo odio.

-será mejor dejar esto en el pasado, porque creo que es lo más sano para los dos y aunque te explique todo lo que paso nada va cambiar, solo nos haremos más daño y no quiero eso.

-deberíamos arriesgarnos, tal vez no nos hagamos tanto daño como el que te imaginas -susurra pasando sus brazos por la cadera del omega -por favor Takemichi.

-lo siento, no puedo...

Cuando estaba por alejarse manjiro sujeto con fuerza su brazo y lo detuvo, Takemichi de forma calmada trató de alejarlo pero cuando sus intentos empezaban a ser en vano empezó a utilizar toda su fuerza. Por primera vez mikey parecía estar usando sus feromonas para retenerlo, cosa que estaba asustado a Takemichi.

-basta, debes detenerte -susurro volteando a verlo, se sorprendió demasiado al ver los ojos del chico rojos y sus mejillas empapadas de lágrimas -lo siento mucho Mikey, pero pronto te darás cuenta que esto es lo mejor para ambos.

-¡No me importa lo que sea mejor! ¡Quiero estar contigo porque para mi tu eres lo mejor! -le grito totalmente molesto -dime que no me quieres y te dejaré ir, dime que ya no sientes nada por mi mirandome a los ojos...

Ambos se quedaron en silencio, Takemichi mordía su labio nervioso sabiendo que lo que estaba por decir le iba a doler y mucho, le sonrió al rubio y de forma lenta unió sus labios en un beso, uno en el que Mikey tomo el control en cuestión de segundos, definitivamente lo extraño y mucho. Es por eso que sabia que lo mejor era dejarlo ir, su situación familiar no iba a arreglarse pronto y él no piensa dejar que lastimen al alfa qué quiere solo para que sus padres le demuestren qué si no obedece pueden haber muchos heridos.

Al separarse antes de que Mikey pudiera hablar Takemichi lo interrumpió -realmente no me gustas más, creo que ese besoe hizo darme cuenta de que tal vez nunca me gustaste y solo estaba aburrido de lo monótona qué era mi vida, no te quiero más en mi vida. Así que dejame en paz Sano.

-lo entiendo -susurro mikey bajando la mirada para después empezar a alejarse -igual no eras más que un juego, nadie estaría feliz de salir con alguien como tú...

Cuando finalmente se fue Takemichi cayó de rodillas entre lágrimas, fue más doloroso de lo que se imagino, pero era lo mejor y aunque le doliera esta seguro de que es lo mejor para ambos, abrazo sus piernas y sollozo un rato tratando de calmar esa tristeza y dolor tan horrible que estaba sintiendo. Unos minutos más tarde se levantó y con la manga de su abrigo limpio sus lágrimas, mientras caminaba de regreso a donde deberían estar sus amigos se topo con varios estudiantes los cuales miraban sus celulares y luego volteaban a verlo.
Al llegar los vio en el segundo piso sentados en el borde con latas de refresco en sus manos.