3. LA CEREMONIA DE DONES

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Y ahí están- determinó Toni señalando la limusina blanca, que estacionó frente a ellos.

Hal Cooper salió primero, seguido de sus hijas y de su esposa.

FP controló su respiración al conectar la mirada con ella. ¿Cómo podía estar cada vez más hermosa? Sus rizos rubios, su vestido rosa pálido y sus ojos azules... Todo en ella era impresionante. ¿Por qué tuvo que casarse con Hal? Ojalá las cosas hubieran sido diferentes.

Buenos días, familia Cooper. ¿Cómo les fue el viaje?- preguntó Toni cortésmente, sabiendo que FP se mantendría callado, pues Hal Cooper no era santo de su devoción.

Se me hizo largo. ¿Están las habitaciones listas? Nos gustaría descansar lo antes posible- contestó Hal con una sonrisa artificial y sin dirigir ni una sola mirada a FP o al resto de trabajadores.

Claro, señor Cooper. El personal les guiará- dijo Toni dejándoles pasar de inmediato.

Hal entró al castillo decidido y sin mirar atrás.

¿Cheryl y Jason llegaron?- preguntó Polly discretamente.

Sí, subieron a su habitación hace unos minutos- respondió Toni con un guiño.

¿Y Archie?- preguntó Betty deseando ver al chico del que estaba secretamente enamorada.

Está con Jughead en la biblioteca. Van a practicar para la ceremonia- desveló Toni, mientras le deseaba suerte en el proceso.

¡Genial!, ¡gracias!- exclamó Betty, antes de pasar al castillo con su hermana.

¿Desea alguna cosa más, señora Cooper?- preguntó Toni al ver que la mujer no se movía.

Me gustaría saber si está todo bien organizado para la ceremonia- dijo Alice echando un ligero vistazo a FP, que se veía tan guapo y en forma como siempre. Una de las razones por las que le gustaba venir al consejo de agraciados era para poder encontrarse con él. En muchas ocasiones se preguntaba a sí misma qué les pasó para acabar separados, pues hubo un tiempo en el que no podían quitarse las manos de encima. Y, en verdad, lo sabía. Sin embargo, era demasiado doloroso de recordar.

Todo está en orden- dijo Toni con una sonrisa tranquilizadora.

Y, en cuánto a los arreglos florales para el salón de la ceremonia, ¿recibisteis mi pedido?- preguntó Alice para asegurarse.

Sí, pero no hizo falta aplicarlo. No se preocupe, señora Cooper, el capitán Jones se aseguró de deshacerse de todas las peonías antes de que pisara el castillo- respondió Toni ajena a la nueva tensión que creó entre FP y Alice.

¿Ah, sí?- cuestionó Alice, mirando fijamente a FP con una chispa de emoción en los ojos, mientras levantaba las cejas con sorpresa.

FP se aclaró la garganta, maldiciendo la boca de Toni por hablar de más, antes de devolverle la mirada a Alice con la mayor profesional posible. No quería que se enterara, pero ya no tenía sentido ocultarlo.

Eres alérgica a las peonías y es mi trabajo mantenerte segura... Manteneros seguros a todos- dijo para disimular su especial preocupación por ella.

Fue un gesto encantador. Gracias por acordarte, FP- dijo Alice suavemente, utilizando su nombre como si se tratara de una oración celestial. Pocas veces recibía una contestación de su parte, pues solía mantener su fachada de capitán intacta y tenía que conformarse con un par de miradas furtivas.

Los orbes azules y marrones se perdieron por unos segundos entre ellos, mientras un sentimiento intenso se agitaba en sus interiores.

No es nada. Es fácil para mi recordar lo que considero importante- murmuró FP hechizado por ella, mientras asentía con gratitud ante el halago que le dio.

Dones y TalentosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora