𝑈𝑛𝑒𝑥𝑝𝑙𝑜𝑟𝑒𝑑 𝑣𝑖𝑟𝑔𝑖𝑛𝑖𝑡𝑦 ʰʸᵘⁿˡⁱˣ [✔]

❻ | ᴀʀᴛ ᴅᴇᴄᴏ

La botella de cerveza ahora se encuentra vacía. La copa con la que el señor Hyunjin ha estado tomando su vino, ahora se ve transparente. Mi cuerpo está sentado en medio de la cama mientras que la persona frente a mi, se encuentra sentado en el suelo, aún no entiendo por qué hizo esa acción cuando claramente hay mucho espacio en la cama para que pueda sentarse, pero supongo que lo hace para no hacerme sentir incómodo. Puf, como si fuese que no me me meterá su pene dentro de un rato.

Aunque adoro que se preocupe por mi.

—¿Y como conoces a Jeongin?—pregunto para romper con la tensión, sin embargo, ya me doy una idea de su respuesta.

—Lo conocí en una fiesta, me acosté con él más de una vez y lo llamaba cuando se me daba la gana, pero cuando Chan lo conoció dejé de hacerlo, ya que de alguna forma sentía que estaba traicionando a mi mejor amigo sin importar que él y tu hermano no sean nada—asiento y en silencio me levanto de la cama para dirigirme hacia la pequeña heladera de las bebidas, sacando otra cerveza más. Claro que me siento en total libertad, después de la regla número dos que puso y el hecho de ya tener alcohol dentro de mi, hace que la confianza aumente.

—¿Y siempre le pagas a mi hermano?—vuelvo hacia la cama y me siento como anteriormente estaba.

—Algunas veces Jeongin ruega por estar conmigo sin pedirme dinero luego, el simplemente quiere hacerlo y luego se va—un poco de repulsión se instala dentro de mi.

Llevo la botella de cerveza hacia mi boca para luego darle un trago demasiado largo.

—¿Y con cuantas personas haz estado?

—Uh, ahora pasaste a preguntas personales.

—No respondas si no quieres—me encojo de hombros y no le doy importancia, después de todo, solo quiero tener temas de conversación y que esta no muera de un momento a otro—siento que me estas tratando como niño.

—Lo eres, en el sentido de la virginidad—un trago más de cerveza cruza por mi garganta. Nuestros ojos se encuentran y una guerra de miradas comienza, pero lo raro es que no me siento intimidado. Gracias cerveza—aunque yo jamás he estado con una persona virgen, ni siquiera la chica que me quitó la virgnidad era virgen, así que se podría decir que yo también puedo resultar siendo un niño en este momento.

—Es raro que digas eso porque eres viejo... de edad, digo—miro hacia otro lado con disimulo y me encuentro con el reloj de la pared, el cual marca las 23:45 pm.

—Eres gracioso cuando me dices viejo—sus carcajadas retumban dentro de esta gran habitación, risas que son contagiosas traspasan lo más profundo de mi alma y logran hacerme reír como un desquiciado—eres gracioso porque despues te arrepientes de decirlo, pero ya te lo dije, no me molesta—veo con claridad como su cuerpo ahora se levanta y toma la copa que había quedado en el suelo—iré a buscar más vino.

Y antes de que el se pueda ir más lejos de la cama, mi voz lo detiene.

—Estoy aburrido.

—Sabes a la perfección que puedo acabar con ese aburrimiento—mi cabeza gira hacia su dirección y miro sus bonitos ojos. Mis dientes muerden mi labio inferior y no he sido consciente que esa acción fué vista demasiado sensual para cierta persona, ya que sus ojos viajaron desde mis ojos, hacia mi boca—solo debes pedirlo.

—No es necesario que yo lo pida, despues de todo, tu eres el que pagará y es tu deber hacer lo que quieras conmigo, ¿o no es así?

—No quiero que sientas que estoy abusando de ti si lo hago de esa manera.

—No lo harás porque tienes mi aprobación.

Y el silencio reina. Nuestras miradas dicen más que palabras y sus acciones gritan por sí solas.