𝑈𝑛𝑒𝑥𝑝𝑙𝑜𝑟𝑒𝑑 𝑣𝑖𝑟𝑔𝑖𝑛𝑖𝑡𝑦 ʰʸᵘⁿˡⁱˣ [✔]

❶❷ | ᴀᴍɪɢᴏs

Adoro viajar, ya sea a lugares cerca de donde vivo o también a lugares que llevan horas de viajes y logran que tu culo quede pegado en el asiento del autobús. Claro, no nombro a los aviones porque nunca tuve el privilegio de viajar en uno de estos debido a que los pasajes están demasiados caros y no me alcanza para uno. Sin embargo, nunca me he quejado del incomodo asiento porque adoro viajar, son horas donde me pierdo dentro de mi cabeza mientras miro las imágenes en contantes movimientos.

Hyunjin solo me dijo que el camino duraría dos horas, no sé hacia donde tiene las intenciones de ir ni tampoco si esto se trata de un secuestro, aunque esta última suposición no tiene posibilidades porque él ya hizo que toda mi confianza esté puesta en el, como también ya me ha demostrado muchas veces que jamás me haría daño, no importa las circunstancias en las que nos encontremos.

Mi celular (que está conectado con el bluetooth al estéreo del auto) reproduce una canción de The Weeknd que últimamente no sale de mi cabeza, In your eyes se hace escuchar mientras mis ojos se encuentran cerrados y mi cabeza se mueve de un lado a otro, tan solo sintiendo la canción dentro de mi mientras los movimientos del auto y el ruido del viento, son todo lo que necesito.

Y claro, también necesito tener cerca al señor Hyunjin, pero eso se tiene que dar a entender por si solo.

—¿Quieres comprar algo en el bar?—Hyunjin pregunta mientras el auto se detiene en una estación de servicio, ya que no hay suficiente gasolina y aún nos falta una hora de viaje—puedes comprar lo que quieras, no te preocupes por el dinero.

Veo con claridad como la persona a mi lado me sonríe con ternura para luego sacarse el cinturón de seguridad y abrir la puerta del auto, sin embargo, no sale de este de inmediato, sino que se detiene y espera pacientemente una respuesta de mi parte, acción que se me hace muy bonita y mi corazón comienza a latir con rapidez en el primer momento en que me sonríe.

—Creo que... agua estaría bien—suelto con un poco de timidez, pues aún no me acostumbro a que un hombre me trate de esta manera.

—Si te pones así de tímido, me dan ganas de comerte la boca aquí en frente de todos—y vaya que lo hace.

En un solo pestañeo, ya tenía la boca contraria sobre la mía. Su mano viaja hacia mi cintura y se apoya en esta para acercarse más de lo que ya está hacia mi, su respiración choca con la mía y nuestras lenguas ya se habían encontrado desde hace rato, mientras tanto mis dedos de la mano derecha acarician dulcemente su cuero cabelludo como también su piel. Íbamos a seguir, joder, claro que podríamos pasar los siguientes minutos en esa posición, pero nos tenemos que separar cuando una bocina suena detrás de nosotros y sabemos que quieren cargar gasolina también. Con claridad escucho el pequeño gruñido que sale de Hyunjin y una sonrisa se instala en mi, pues se ve gracioso ante mis ojos.

—Ten—extiende su mano con cinco billetes de 2.000 pesos cada uno. Con demasiada confusión y ojos entrecerrados lo tomo—ve a comprar mientras yo cargo la gasolina, y si demoras, entonces nos encontramos dentro del bar.

—¿No crees que es mucha plata para solo un agua?—cuestiono mientras ahora es mi turno de sacarme el cinturón de seguridad.

—Compra algo para comer y también trae un par de cervezas.

—Pero tú tomas vino.

—Y tú cervezas.

Me guiña el ojo antes de abrir la puerta y salir del vehículo. Rápidamente le copio su acción y mi cuerpo se encuentra totalmente afuera, lo miro antes de comenzar camino hacia el bar y el me sonríe de nuevo, con esa misma maldita sonrisa que me envolvió desde el momento cero. Desde lejos lo veo cargar la gasolina antes de girar mi cabeza y mirar al frente una vez que ya estuve cerca del bar.