Capítulo 27

375 18 2
                                    

Juliet

Me desperté de un salto, chillando cuando mi cuerpo rebotó.

—Buenos días, rayito de sol. —JiMin saltó en la parte inferior de la cama, enviándome hacia atrás—. ¡Espero que estés desnuda!

Me apresuré por las sabanas, llevándolas hasta mi barbilla.

—¡JiMin! —grité, tapándome la cara. Estaba en mi pijama de pantalón corto y camiseta de tirantes, ¡pero aun así!

—Vamos, Tigre —se burló JiMin, todavía saltando como un niño de siete años—.

Es hora de dejar de roncar. Aunque estabas súper sexy.

Estaba bromeando. No roncaba. Oh, Dios. ¿Roncaba?

—¡JiMin, para! —grité, espantada por el semidesnudo hombre, un semidesnudo hombre de alguien más, saltando en mi cama.

Llevaba pantalón largo de Polo, podía decirlo porque había pequeños jugadores de polo sobre ellos. Y sin camisa. Y no debería estar en mi habitación. Su habitación. La antigua habitación de Fallon. ¡Mi habitación!

—¡Fallon! —llamé a su esposa.

—¡JiMin! —Escuché su grito, probablemente desde su habitación cruzando el corredor—. ¡Déjala en paz!

—¿Qué? —Actuó inocente, pero no paraba de saltar—. Dos chicas sexys bajo mi techo. Tengo una cama grande, y Freud dice que todo el mundo es bisexual. Digo que las dos tomen una ducha. Yo miro. Todos ganan.

Alcé mi cabeza de la cama, furia encendiendo mi cara.

—¡Bájate. De. La. Cama! —grité desde mis entrañas.

—Vaya. —Sus ojos se hicieron amplios y rió mientras dejaba caer todo su cuerpo para tumbarse a mi lado—. ¿Es Satanás tu padre o sólo se apodero de ti?

Gruñí y tiré la sábana sobre mi cara de nuevo.

—Odio quejarme, con lo de la habitación gratis y todo, pero...

—Entonces no lo hagas —dijo, sin hacerme caso, bajando la sábana—. En serio. Tienes que levantarte. Vamos a tener una fiesta.

—¿Eh?

—El padre de Tate llega esta mañana —comenzó explicando—. Su encargo está en receso un par de semanas. Y mi papá y la mamá de HoSeok estarán en la ciudad para el fin de semana. Todo el mundo está relajándose. —Suspiró, recostándose y poniendo sus manos debajo de su cabeza—. Estaremos asando y teniendo un montón de personas por aquí. Necesitamos a alguien para limpiar la basura.

Tiré la sábana por encima de mi cabeza.

—Estoy bromeando. —Quitó la sábana de nuevo, sonriendo—. Sabes que me encanta bromear contigo.

Rodé mis ojos.

Jugando con el borde de la manta, tragué el nudo en mi garganta.

—¿Kook estará aquí, entonces? —pregunté, sin mirarlo.

—Kook estará en el Loop —lanzó de regreso—. Adam estará aquí.

¿Quién...? Ah, cierto. Adam, su amigo de la escuela. Él que... como que abandoné... cuando me "perdí" en la casa de la risa. Sí, sarcasmo aquí.

JiMin salió de la cama y caminó hacia la puerta, gritando detrás de él:

—¡Vístete! ¡Preferiblemente en algo que Fallon puede rasgar con sus dientes!

—¡JiMin! —El chillido de Fallon fluyó dentro de la habitación y sacudí mi cabeza, enterrando mi risa en la almohada.

Tutoría había terminado ayer, así que este era mi primer día sin nada que hacer o planear. Empezaba de nuevo en el cine mañana, reclamando mi primer y único trabajo de la escuela secundaria y por mucho que me gustaba el trabajo en ese entonces —oye, ¿a quién no le gustaban películas gratis?—, estaba teniendo dificultades para conseguir emocionarme. Pasar el resto del verano ganando el salario mínimo con los niños que todavía iban a la secundaria se sentía como un paso significativo hacia atrás. Pero sabía que tenía que hacerlo. No podía vivir con JiMin y Fallon para siempre y no sólo necesitaba un trabajo, necesitaba dos.

Cayendo {F.A.S; #3} ➳ Jeon JungKookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora