THE DARK KING (actualizando)

Capítulo 12 Temor

Elena

Me siento bastante confundida en realidad no sé qué pensar. Han pasado unos días desde que me encuentro en el castillo, no he vuelto a ver a Razvan desde que llegue, ni siquiera he salido de la habitación por miedo, todo esto es demasiado confuso.

Suspiro mientras me acerco a la ventana.

Los días aquí casi siempre son grises, constantemente llueve.

No soy muy fanática de este tipo de clima.

He explorado un poco la habitación, creo que la pequeña choza en la que solía quedarme podría caber aquí como cinco veces. Me he dado cuenta que el guardarropa tiene hermosos vestidos y todos en distintas tonalidades azules.

Se por Loan, que Razvan fue el encargado de que todo se hiciera de modo que estuviera cómoda. Solo he visto entrar a los sirvientes a dejarme mis comidas, pero muy poco hablan.

-Buenos días.- me giro encontrándome con Loan.

-Hola.- susurro

-Lamente no haber venido estos días.- se adentra a la habitación.- Hemos tenido un par de problemas y nos han consumido en tiempo.

-Entiendo. - no pregunto qué clase de problemas pero por el aspecto que tiene se ve que es algo fuerte.

-Que te parece si te doy un pequeño tour por el castillo.

-Eso me encantaría.- menciono alegre ya que estado encerrada aquí y he comenzado a desesperarme.

-Vamos.- me deja pasar a mi primero.- Me da gusto saber que te pusiste la ropa que hay en la habitación.- me sonrojo.

-No quería hacerlo ya que no sabía si era de alguien más...

-Es tuya.- me interrumpe mientras me guía por las escaleras.

-Yo...

-Se que te cuesta entender Elena.- suspira.- Razvan te explicara todo lo que está pasando y el porqué de su precipitada decisión al traerte aquí.

-¿No podrías decírmelo tú?

-No me corresponde.- hago una mueca.- Por aquí.

Salimos a lo que parece ser la parte trasera del castillo, esta parte en si lo alcanzaba a verla por el balcón. La estancia es un tanto sombría, hay algo de neblina, lo arboles son altos, pero están marchitos.

-Se ve muy triste.- comento.

-Lo se.- nos sentamos en una banca.- Razvan pensó en que seria bueno arreglar esta parte del jardín para ti.- frunzo el ceño.- Pero hemos tenido problemas y la verdad no ha tenido tiempo, ni siquiera a podido hablar contigo.

-No te preocupes.- la verdad es que ha sido mejor así.

Nos quedamos en silencio únicamente con el aire que pasa sobre nosotros.

-Se avecina una guerra.- menciona de pronto.- Desde hace meses han pasado ataques a algunas aldeas de la nación.

He escuchado sobre ello, de pronto y de la nada han comenzado a atacar aldeas de la nación, nadie sabe por qué solo mencionan que los estragos han sido realmente horrible.

-¿Tiene que ver con Razvan?.- pregunto cautelosa.

-No lo se.- suspira mientras se frota el cabello con desesperación.- Al principio pensamos que solo se trataba de un par de rebeldes que querían sacar provecho pero...

-¿Pero?.- le incito a que continue.

-Cuando fuimos personalmente para ver cómo había quedado una de las aldeas nos dimos cuenta que no se trataba de un par de humanos.