Razvan
Sujeto a mi mujer antes de que toque el suelo, se desmaya después de ver la verdadera forma de Gabrielle, observo a este último con furia mientras que solo levanta las manos como signo de inocencia.
-Oye, no puedes enojarte conmigo.- espeta mientras cargo a mi mujer entre mis brazos dirigiéndome al interior de la casa.-¿Cómo sabía que se desmayaría?.- la recuesto en el sofá apartando los mechones de cabello que cubren su rostro.
-Era de esperarse.- suspiro mientras me coloco de pie para enfrentar al Arcángel que luce preocupado.-Fueron demasiadas emociones.- asiente.
-¿Qué harás ahora?
-Enfrentar a Satachia.- suspiro.- Se que el está esperando el momento para liquidarme. Siempre intuyo que tarde o temprano intentaría hacer lo mismo con el.
-El que te precipitaras a traer a Elena trajo sus consecuencias.
-La atacaron.- espeto
-Y la siguen atacando.- suspira mientras se acerca a ella.- Sabias perfectamente que podía protegerla.
-Espere demasiado por ella, ya no podía mantenerla lejos de mi.
Solo yo puedo protegerla de todo, no temo mancharme las manos con sangre de ningún ser si con ello evito siquiera que toquen uno de sus cabellos.
Gabrielle siempre ha estado al pendiente de ella desde que nos conocimos, se que lo ideal hubiese sido acabar con Satachia y buscar a Jôsghel, admito que fui impulsivo, pero no me arrepiento de nada.
-¿Qué...- mis pensamientos se ven interrumpidos en cuanto Elena comienza a despertarse, me acerco a ella ayudándola a sentarse.
-¿Cómo te sientes?
-Confundida.- su mirada se cruza con la de Gabrielle.- Así que no estaba soñando.
-Elena.- le llama comenzando a acercarse lentamente intentando no alterarla, no me aparto de su lado.- Lamento haber ocultado quien era.
-No logro entenderlo.- Gabrielle me observa y asiento para que le cuente la verdad.
-Cuando conocí a Razvan ambos éramos enemigos, pero con un mismo propósito, el aniquilar a Satachia.
-Comenzamos a tener encuentros.- interrumpo.- En donde ambos nos dábamos información con respecto a lo que hacía Satachia.
-Mi intención siempre fue protegerte desde que te viste involucrada con Razvan.
-Entonces.- habla después de unos minutos.-Todo lo que pasamos juntas fue...
-Real.- la interrumpe Gabrielle arrodillándose a su lado y tomando sus manos.- Eres mi mejor amiga y todo lo que pasamos juntas fue maravilloso.- los ojos de mi mujer se llenan de lágrimas.
-Siempre estuviste para apoyarme.- se lanza a abrazar a Gabrielle, admito que me está tomando todo mi autocontrol el no apartarlos, mi parte posesiva odia que Elena toque a otra persona que no sea yo.
-¿Todo bien?.- ambas se separan y se sonríen.
-Si.- responde mi mujer.-Nat, perdón Gabrielle.- se sonrojo mientras se ponen de pie.
-Está bien, sé que quizás tome tiempo el acostumbrarse.- asiente.
-¿Puedo tocar tus alas?.- pregunta Elena sonrojada, Gabrielle le sonríe y se gira dándole su espalda.
-Claro.
Elena se acerca cautelosa bajo mi atenta mirada, tímidamente toca las alas de Gabrielle logrando que este se estremezca, las alas del Arcángel son prácticamente de luz, como si fuese una seda muy ligera.
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THE DARK KING (actualizando)
FantasyPor mucho tiempo te busqué... Por mucho tiempo te soñé... Por mucho tiempo te anhelé... Eres mía. Tu cuerpo, tus labios, tus carisias, tus sueños, tu alma. Me perteneces completamente. Tómame. Aquí estoy. Te pertenezco. Ahora y en la eternidad.