Capitulo 38 «Tocame».

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¿Cómo era que habían dejado de hacer esto?... Se supone que siempre fueron buenos amigos, los mejores, pero estos días las cosas se sentían tan raras entre ambos. Y es que JungKook fue quien se atrevió a preguntar qué era lo que ocurría, después de aclararle todo y obviar los verdaderos motivos de su molestia, Tae le contó que no le agradaban sus palabras hacia el pelirrojo y mucho menos a él. Por lo que le pidió al de tatuajes que ya no lo hiciera y se lo hizo prometer, JungKook no pudo negarse a su rostro...

Ahora con carcajadas trataban de elegir que hacer esa tarde resolviendolo de la manera más seria, 'piedra, papel o tijeras'... Con algunos gritos de celebración y unos saltos sobre el sofá, TaeHyung demostró su triunfo. Ahora la tarde sería dirigida por él y JungKook no podía quejarse.

Buscaron una buena película y allí estaban acurrucados frente al televisor, y el pelinegro con un bolw lleno de cotufas sobre sus piernas, TaeHyung por su parte ocupaba su hombro con una sonrisa metiendo su mano de vez en vez en el tazón.

— ¿Estás despierto? — pregunto y el otro afirmó con un ruido en su garganta —... pensé que te aburriría — continuo el castaño.

— Esas películas antiguas son muy buenas...

— Ajá — soltó sonriendo.

— Bueno, algunas... — rodó los ojos y comió una palomita — pero esta no está mal — asintió.

— De igual forma tenías que cumplir... si yo hubiera perdido me habría visto toda la colección de marvel — arrugó sus cejas.

— No lo digas como si fuera un mal plan... esas son las mejores Tae.

TaeHyung volvió a sonreír, aunque algo seguía molestándole y no sabía que era... JungKook estaba a su lado, estaba aceptando tener una tarde de películas antiguas con él, habían comido helado y ahora palomitas mientras usaba la fría tarde para acurrucarse y usar su hombro como almohada, le había pedido disculpas y hablaban como en los viejos tiempos, sonriendo de locuras que ocurrieron en la infancia... ¿Entonces que pasaba?, ¿Por qué tenía esa sensación de vacío?, cómo si algo le faltará, y no podía concentrarse totalmente en JungKook.

— Nunca dejemos de hacer esto Kook...

— ¿Que? — volteo a su lado tratando de mirarle.

El castaño levanto la mirada y sonrió — Pasar tiempo juntos.

— No dejemos de hacerlo — le sostuvo la mirará y luego la dirigió a sus finos labios.

Por qué haría todos lo posible para mantener a TaeHyung a su lado... Aunque sus sentimientos por él no fueran iguales a aquellos que con todas sus fuerzas trato de extinguir en el pasado y ahora le persiguen convertidos en miseria y amargura. Por qué si bien una vez intento besarlo fue únicamente el enojo recorriendole las venas. Por qué pensaba que el castaño no necesitaba a nadie más que a él, por qué después de sus decepciones amorosas se dió cuenta que no necesita a nadie más que a TaeHyung quien después de su madre es lo único que le queda, aunque también tiene a JiMin, pero no es igual. El castaño a sido su familia, su compañero, su todo... Nunca entendió por qué no podía sentir, amarlo como ya lo hizo en el pasado con aquel que se robó su inocencia, ¿Por qué no podia volver a hacerlo?, ¿Por qué no podía volver a confiar en nadie?, ¿Por qué necesitaba con tanto desespero mantener a Tae a su lado aunque eso significará privarlo de su propia libertad?... Por qué simplemente aunque no le amará, quería ser el único que admirara su belleza.

Entonces acercó un poco más su rostro.

El castaño al notarlo abrió sus ojos un poco alarmado y se enderezó con los nervios apoderándose de él.

Cambio de papel «Yoonmin»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora