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Caminos cruzados, destino negado (parte 2).

Miles trató de apaciguar a su creciente molestia.

─ ¿Acaso, él se sobrepasó contigo? –gruñó con clara molestia. Nunca espero oír eso de su maestro, y a pesar de que era una muy grata sorpresa. No le gustaba el hecho del porqué tan repentinamente dijo eso.

Los demás solo trataron no pensar en ese hipotético caso, no querían pensar eso de su líder. ¿A quién engañaban realmente? Un Alfa dominante en Rut era fuera de los límites establecidos por toda la jerarquía social, se perdían en sus instintos salvajes mucho más que otros Alfas.

No se podía simplemente descartar esa posibilidad.

─ ¿Qué? No, Miles. Chico, no creas en eso –murmuró con las puntas de sus orejas coloradas. ─Solo que acepte que necesita a su Omega. –intento hablar con naturalidad.

Aunque su rostro y voz no demostraban como se sentía, el débil brillo en sus ojos era una clara señal de lo devastador que era decir esas palabras.

─Ex. –corrigió con rapidez Pavitr, mientras que sus amigos le daban la razón.

En especial Miles. Podría no agradable del todo Miguel, pero estaba del lado de Peter y esa Omega era la rival de su "papá".

─ ¡Te dije que no debías aceptar ese trato! –se quejó el Alfa.

Desde el principio del desastroso asunto que tenían, no estaba de acuerdo con el trato que ambos hicieron. Causándole más repudio hacia el líder de Spider-society por haber sugerido eso sin pensar mucho como se sentiría Peter.

El boricua quería a Parker como su familia y no quería permitir que un Alfa como Miguel le arruinará la vida del Beta solo para ayudarlo en su calentura.

No.

Peter merecía alguien quien lo amara auténticamente.

─Miles, ya hablamos de esto. No me hagas volverlo a repetir. ―indicó mientras comía su hamburguesa sin pena alguna.

Estaba decente, pero no era tan buena como las del universo de Morales.

─El niño tiene razón, Peter. –reconoció Jessica, con mirada molesta. ─Desde un principio te dijimos que era peligroso. Y que, además, podría suceder que dejarás todo por Dana, pero nunca apareció después de tanto. ¿Acaso, no eres consciente de eso? Incluso si son destinados, el lazo está roto. Tienes oportunidad, pero ese trato te lo impide. –lo alentó.

Spider-Noir asintió antes de hablar:

─Sentir amor es un arma de doble filo, jugar con ello te lastimará de cualquier forma. –soltó. ─Deberías decirle tu sentir lo más pronto posible, para aclarar las aguas profundas de malestar.

─ ¿Podríamos dejar de hablar de esto?

─Lo pospones por mucho tiempo, Peter. –contraatacó el otro Parker de tonos oscuros. ─El tiempo no nos favorece a los Spider-man's, eso debes saberlo mejor que nadie.

Desde de esas breves palabras, quedaron en silencio.

Tratando de buscarle algún sentido o solución a esa situación inusual. Casi todos los presentes, a excepción de Miles y el mismo Peter.

Incluso si era verosímil que nunca apareció para buscar a Miguel antes, ¿Podría buscarlo en un futuro nada lejano? Ese era el latente miedo de Peter.

Ser abandonado apenas el Alfa viera a su destinada.

Sus sinceros y grandes sentimientos por ese Alfa no eran nada comparado con el destino que ellos dos tenían juntos. ¿Qué podría ser él contra lo inevitable? Nada, absolutamente nada. Lo único que tenía era ese trato entre ambos, trato que no sabría por cuanto tiempo sería válido.