Capítulo 56

118 10 6
                                    


La inquietud dentro de Kami Miyako, la capital teocrática, estaba al tope, muchos refugiados llegaron al lugar tras ser atendidos por los caballeros estacionados en cada aldea y ciudad por donde Arael estaría o habría pasado, como tal, un gran cumulo de personas se mantenían dentro de la capital; los varones mayores de edad estaban tomando parte de la defensa de la ciudad como milicianos, dentro de ellos estaban incluso mujeres voluntarias, ambos partes milicianas en su conjunto hacían el sector con más números dentro de las defensas a la ciudad capital, por supuesto estaban también soldados de varios rangos, caballeros, magos, clérigos y sacerdotes, etc. cada uno era menor en número a comparación con los milicianos debido a que gran parte de ellos estaba tomando parte del frente del ejército, los que se mantuvieron atrás solo eran tomados como último recurso en caso desesperado, pero no su poder no era menor al frente del ejército en su conjunto; la zona en la que el mayor poder se amontonaba era el templo central teocrático, el centro de la capital teocrática, aquel templo de gran tamaño que era tratado como un castillo divino por parte de los pobladores, no cualquiera tenía permitido entrar al lugar, y quienes lograban hacerlo contaban con gran fervor la gran construcción que esta representaba y que era digna de ser el centro de toda la ciudad y de toda la teocracia, así como también una construcción muy importante representante en la religión de los 6 grandes dioses; el templo principal estaba rodeada por 8 torres lo suficientemente altas como para pasar como hospedajes temporales a los múltiples guardias de la murallas en cada esquina de las murallas octagonales, constaba de 4 pisos superiores y 5 inferiores, un gran patio de ejercicio y otro de descanso, el lugar era inmenso, tanto que la mayoría de gente daba por hecho el gran tamaño que poseía y el dichoso tiempo que tomaba solo ver los alrededores de edificio principal; dentro de pisos superiores, el piso numero dos era donde se encontraba el trono del pontífice máximo y donde normalmente se originaban las reuniones de gran importancia en la que solo un numero seleccionadas de personas podían participar, los pisos 3 y 4 era cuartos de espera, recamaras, comedores, salas simples que un castillo normalmente poseería, el primer piso era una sala de vasto tamaño ornamentada con los 6 grandes dioses, por supuesto, constaba de múltiples entradas secretas que conectaban con todo el templo, y normalmente era tomada como una sala donde dar oraciones por la residentes comunes dentro del templo principal; debajo de ellos se encontraba la sala de entrenamiento secretas que estaba formada por tecnología perdida de la era de los dioses, el segundo piso subterráneo era un lugar donde residían las personas de gran poder político o de gran poder, las escrituras negras estaban dentro del lugar, así como sus esposas o esposos seleccionados, el siguiente nivel era una zona neutral donde se almacenaban armamentos que eran distribuidos a los soldados, caballeros, etc, también era el lugar donde se encontraban los herreros más hábiles de la teocracia capaces de manejar incluso la adamantita, expertos en su clase, quienes hicieron del nivel su taller u hogares, el cuarto nivel subterráneo, era la sala central de oración, un altar dirigido y construido a los 6 grandes dioses, eran también el lugar donde se hospedaban los 6 cardinales, y en donde mayormente se realizaban las más importante toma de decisiones y se dictaban las más importantes ordenes distribuidas a las 6 escrituras; el 4 nivel era un lugar administrado personalmente por los 6 cardinales, no había siervos o sirvientes que se encargaban de la limpieza, ya que de tales cosas los 6 cardenales se encargaban, a excepción de la comida que era traída desde otro lado y sector, el cuarto nivel era administrado, cuidado y mantenido puramente por los 6 cardenales, era un nivel tratado como un lugar sagrado que solo un numero especifico de personas lograban ver; el ultimo nivel subterráneo, en aquel quinto nivel se encontraban los tesoros más preciados, era un lugar importante tanto emocional como físico, ya que era el lugar donde se almacenaban los tesoros de la era de los dioses, el nivel mismo estaba formado como un hexágono, dando como centro la tesorería, con una sola entrada y salida, la puerta misma era resguardada por muerte segura, le semielfa, Zesshi Zetsumei, incluso si ella no estuviera ahí, la puerta poseía algunos trucos como para que cualquiera que no tuviese la autorización del portero en este caso Zesshi Zetsumei no se le permitiría ingresar y seria tratado como un invasor, siendo atacado por las múltiples defensas mágicas instaladas en el lugar; antiguamente el control de la puerta misma había sido designada al humano de gran poder y de gran lealtad, pero la decisión de los 6 cardinales, así también como del pontífice máximo de ese entonces acabo dándole a una semielfa tal trabajo, lo cual era raro por su posición como una actual enseñanza y creencias en la supremacía humana, debido a tal posición dicha persona jamás conoció el exterior, no se le permitía salir de los pisos subterráneos a menos que se lo ordenen; las 6 secciones que conectaban con la tesorería central, eran en realidad los 6 santuarios, que eran dirigidas por 6 mikos, princesas sacerdotisas, encargadas de proteger artefactos específicos, ítems cuyo propósito eran ser usados en caso de suma importancia debido a su complicado uso o las consecuencias que estos podrían generar; no específicamente tenían un gran poder de combate por el cual eran elegidas, su rasgo especifico radicaba en el poder que ellas mismas representaban, su sangre y cuerpo claramente poseían sangre de los 6 grandes dioses, como tal, se creía que podían hacer uso de los artefactos que eran considerados oscuros, peligroso o de un riesgo alto sin ser rechazados por estos mismos, bajo sus órdenes estaban algunos soldados de alto poder y de un rango alto, personas que dejaron todo para servir como simples guardias y soldados a voluntad de las mikos; cada uno de los 6 santuarios representaba a uno de los 6 grandes dioses, múltiples tesoros de gran valor se encontraban en su poder, su propia existencia se limitaba a cuidarlos y usarlos solo en momentos necesarios, como tal, eran personas que no poseían libertad alguna, ellas no podían salir del quinto piso subterráneo desde el momento en que fueron nominadas a ser las próximas mikos; en el pasado, una de las mikos había sido atacada por una antigua integrante de las escrituras negras, noveno puesto, Clementine, ella asesino a muchos de los guardias y sustrajo un gran tesoro, "la corona de la sabiduría", un artefacto capaz de controlar un ejército no-muerto, los efectos que traían consigo eran el robo completo de la personalidad del portador, como tal, la miko de ese entonces, era considerada una arma más que una líder, el guardia superior, quien era la persona al mando después de la miko, fue en ese entonces el que lideraba o recibía órdenes para que la propia miko las ejecutara en caso de ser necesario, pero tal caso nunca llego a ocurrir, cuando esta fue robada, los efectos que trajeron consigo fue locura absoluta llevada hasta la muerte, el artefacto que trajo consigo tal estado jamás había sido encontrado incluso entre las cosas que supuestamente posea Clementine tras su muerte, como tal, uno de los grandes tesoros de la teocracia Slane se había perdido, su función propia todavía no había llevado a ser necesaria en ese entonces, pero en la era actual donde el país vecino era gobernado por un no-muerto, este artefacto debía de ser un arma capaz de controlar o nivelar las riendas en una posible guerra, su desaparición fue un perdida enorme para la teocracia tomando las funciones de tal ítem, así como aquella miko, muchas de las actuales 6 princesas sacerdotisas, poseían en su poder artefacto del mismo grado que adquieren efectos negativos en el cuerpo hasta cierto punto antes de ser dañinos; con todo ellos, esa eran las instalaciones del templo principal, un monumento que debía de ser protegido, la construcción hecha en el pisos del subsuelo eran sin duda alguna construcciones hechas por dioses, ya que las propias instalaciones poseían un cierto grado de iluminada de cristales en el cielo que hacían el reemplazo del cielo del exterior, ocasionando que dentro de los pisos del subsuelo poseyeran vegetación, los 6 santuarios sin duda alguna eran los lugares que poseían la mayor vegetación de los 5 pisos, teniendo incluso la capacidad del cambio de estaciones.

Overlord: La Contraparte Del Ser SupremoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora