♡Capítulo diecinueve♡

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Ballon Flowers: demuestran que nunca dejeras de querer a esa persona.

Michael

Estacione el auto y recargue mi cabeza sobre el volante, dejando escapar un suspiro. Este día ha sido agotador.

El trabajo fue caótico, me asignaron un caso a último momento, he estado en la oficina todo el día hasta ahora y cuando por fin planeo hacer otra cosa que no sea leer documentos o escuchar la versión de las víctimas, Enora cambio de planes.

Se supone que iríamos a ver una película de terror en el cine, solemos disfrutarlo, ya que nos gusta hacer chistes sobre las escenas de miedo para que no nos asuste tanto, además, es nuestro género favorito.

Pero, ahora me encontraba frente a su edificio para buscar mi suéter y luego encerrarme en mi departamento dejándome consumir por el aburrimiento.

He de admitir que estaba enojado. Siempre suelo planificar cada cosa y cuando algo resulta ser diferente a como lo había acordado, comienzo a estresarme.

Pase mis dedos por mi sien, apenas estaba haciendo efecto la pastilla que tomé para la migraña.

Pienso que lo peor de acostumbrarte tanto a una persona, es cuando esa persona comienza a cambiar su rutina.

Estaba angustiado por ella, lo admito. Nunca suelo darle el beneficio de la duda a nadie nuevo que entra en nuestras vidas por temor a que Enora vuelva a pasar por lo mismo.

Por otro lado, si sigo evitando que nuevas personas lleguen, solo la voy a cohibir de vivir su propia vida.

Es complicado, yo he estado ahí, he vivido con ella su sufrimiento, no es fácil soltar a alguien que amas y que han lastimado tanto.

Los padres de Enora confiaban en mí, y desde su partida he cargado con ese peso en mi consciencia, si algo malo le llegara a suceder a Enora no me lo perdonaría.

Y lo supe el mismo día en que Lucas decidió romperle el corazón.

...

Me aparté con cuidado, colocando la cabeza de Enora sobre su almohada y arropandola delicadamente sin despertarla.

Me había acostado con ella, acompañándola.

Se veía tan tranquila y frágil. Me rompía el alma verla en ese estado, su rostro algo rojo y sus ojos hinchados de tanto llorar, hasta su maquillaje se había corrido.

Hace unas horas había salido de su hogar brincando de emoción dispuesta a disfrutar esta noche junto a su novio, y ahora, estaba destrozada por su culpa.

Sentía tanta ira, sino fuera por Enora lo hubiera reventado a golpes hasta destrozar su cara.

Empecé a retroceder con suma cautela, hasta llegar a la puerta y salir cerrando despacio, tan lento que tuve que contener la respiración.

Baje las escaleras esperando que sus padres no lo hubieran notado, Enora no quería que la encontrarán en ese estado y tampoco se enteraran de lo sucedido.

Apenas pise el último escalón, escuche como me llamaba Holly.

-Suéltalo Michael, ¿Qué sucedió?

Estaba parada frente a mí con su bata de dormir y brazos cruzados.

-Nada señora Lee, no tiene de qué preocuparse.

-Acabo de escuchar a mi hija llorar en su habitación, Michael. Nunca le mientas a una madre.

Me encontraba en un debate interno entre sí decirle o no. De igual forma sufriría las consecuencias.

Las ventajas de un corazón roto [Finalizado]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora