♡Capítulo veintisiete♡

19.2K 963 200
                                    

Gerbera púrpura: representa la individualidad y la originalidad. Es esencial para demostrar la admiración hacia lo único y especial.

...

Michael

Suspire frustrado pasando las manos por mi cabello mientras dejaba una pieza verde sobre la mesa, para así darme otra oportunidad de analizar el jarrón y estudiarlo con más claridad.

Ya había unido varias piezas, fue una tarea complicada que aumentó mi dolor de cabeza, sin embargo, nada que no pudiera resolver una buena taza de café y una píldora.

Apenas pude dormir anoche, la culpa me estaba carcomiendo como un tifón dando vueltas en mi interior al contrario de las manecillas del reloj, con vientos y mareas destructivas.

A las 4:00 am me levanté con resaca, quería ignorar las voces de mi consciencia que no paraban de atormentarme con respecto a mi comportamiento miserable de hace unas horas.

Desde entonces, he estado por más de cuatro horas postrado de trasero en el mueble intentando unir las piezas del jarrón favorito de Enora, tuve que excusarme en el trabajo para faltar hoy, dije que pesque un resfriado, aunque en realidad estaba a pocas horas de mi muerte por la resaca.

A veces el estrés me ganaba ante las ganas de enmendar el desastre que ocasione, pero, al imaginar el daño que le he causado a Enora con mi irresponsabilidad, aunque sea por unos segundos, volvía a retomar mi reconstrucción artesanal.

Algo es seguro, puede que Enora y yo no compartamos la misma genética, no obstante, para mi, siempre será mi hermana menor.

No soy de creer en vidas pasadas, sin embargo, en otra vida lo fuimos y en esta no sería la excepción.

Entendí que cuando creces al lado de una persona a la que has visto sufrir tanto, de cierta manera creas una capa de protección a su alrededor con el que buscas evitar a toda costa que cualquier suceso negativo la vuelva afectar.

Por otro lado, si no sabes poner límites, esta capa se va a convertir en una celda, privandola de su libertad y por ende, podrías cortarles sus alas.

Le prometí a sus padres que la cuidaría, me prometí a mí mismo hacerlo.

Es por eso que ahora la debo dejar volar, y no importa que tan lejos o alto lo haga, yo siempre voy a estar aquí cada que piense regresar.

Y se que ella haría lo mismo por mi, porque al fin de cuentas, ¿eso hacen los hermanos, cierto?

Ahogue un grito desesperado al no poder encajar una de las piezas. Luego de varios segundos intentándolo, me eche hacia atrás y recargue mi espalda en el espaldar del mueble para después frotar mis ojos con mis manos exhausto.

Al escuchar la puerta abrirse levante mi vista y pude divisar a Meghan entrando con varias carpetas en mano.

No se como lo hacía para verse tan reluciente todas las mañanas, su belleza era fresca y natural, tenía un magnetismo inigualable, te hacía quedarte embelesado por horas con tanta facilidad...

《¿Qué te está pasando?》

Sacudí mi cabeza y regresé con Meghan, quien ahora me miraba despectiva.

Estaba molesta conmigo, así que he de imaginar que Enora le contó todo.

—Luces como un pordiosero —me dijo Meg, dejando su cartera sobre la mesa.

—Quisiera ofenderme, pero, no es algo que no me hubieras dicho antes —mencioné socarrón, por lo que Meg puso los ojos en blanco.

Y con ese simple gesto logró robarme una sonrisa corta.

Las ventajas de un corazón roto [Finalizado]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora