𝗤𝘂𝗲 𝗽𝗿𝗶𝘃𝗶𝗹𝗲𝗴𝗶𝗼 [𝗖𝗲𝘀𝗮𝗿 𝗽𝗮𝗿𝗿𝗮 & 𝗧𝗻]

Capitulo 32

Lillian: Iré al baño, me acompañas hermana?- Pregunto sin dejar de verme
Tn: Vamos- Dije dejando mi bolso en la mesa.
Andrea: Puedo ir?- Pregunto viendo a Lillian
Lillian: Iremos rápido, solo quiero preguntarle algo a Tn- Dijo sonriendo.

Lillian tomo de mi brazo y caminamos juntas hacia el baño.

Lillian: No vamos a entrar al baño, nos vamos a quedar afuera un poquito lejos para ver a dónde llega- Dijo bajando un poco la voz y yo asenti.

Juntas caminamos hasta llegar cerca del baño, nos pusimos detrás de una pared que se lograba escuchar todo lo que pasaba en el baño.

Mis manos y mis piernas temblaban, estaba demasiado nerviosa y mis ganas de hacer pis estaban aumentando.

Yo me encontraba en la orilla de la pared mientras lillian tenía su cuerpo pegado al mío para lograr escuchar a la perfección lo que pasaría.

Escuchamos unos tacones y de repente escuchamos la voz de la gorda.

Gorda: Ay, hola César- Escuchamos y lillian y yo rápidamente volteamos a vernos mientras mi boca se abría en forma de sorprendida y lillian me indicaba con el dedo que guardara silencio.
César: Hola- Dijo serio.
Gorda: Que casualidad, nos tocó venir juntos
César: Ajá- Dijo y escuchamos como se abría el grifo del lava manos, ya que esos se encontraban fuera.
Gorda: Por que nunca me has querido hacer caso?
César: Y volvemos a lo mismo de siempre, no te cansas?- Volteamos a vernos nuevamente Lillian y yo y nuevamente me indico que guardara silencio.

Tome mi cabello con mi mano y saque un poco mi cara para comenzar a ver lo que estaba pasando, no quería perder ningún detalle de esto.

Gorda: Tu sabes que siempre he estado enamorada de ti- Dijo acercándose a César y sobando su brazo
César: Y a dónde quieres llegar con todo esto?- Pregunto parándose enfrente de ella y uniendo su mirada a la de ella.
Gorda: Quiero tener algo contigo, aunque sea en secreto- Dijo acercándose un poco más a el y en mi garganta se estaba formando un nudo- Quiero que me hagas tuya así como le haces el amor a tú esposa- Dijo tomando su mano y colocándola en su trasero, César no decía nada y dejo la mano donde la gorda la había puesto.
César: Pero aquí no podemos, no podemos escaparnos- Dijo bajando un poco la voz, su mirada no se despegaba de la mirada de la gorda.
Gorda: Cuando lleguemos a Phoenix, puedes hacerme el amor?- Dijo acercando su dedo a la boca de César y el le dio un beso en el dedo.
César: Te hago lo que quieras, llegando allá nos ponemos de acuerdo- Dijo acercándose a ella y ambos cerraron los ojos.
Gorda: Espera- Dijo poniendo su mano en el pecho de César y César volteo a verla extraño- Y si nos ve tu esposa?
César: No nos ve, ella se quedó con los plebes- Dijo acercándo su cuerpo hacia el de la gorda- Podemos darnos una escapada al baño si quieres- Dijo dándole una sonrisa pícara.
Gorda: Un rapidin?- Dijo sonriendo
César: Puedo darte una prueba de lo que tendrás en Phoenix- Dijo sonriendo y con la mano que tenía en su nalga la sobaba.

La gorda con una gran sonrisa asintió y ambos voltearon a todos lados y cuando aseguraron que no había nadie, la gorda tomo la mano de César y entraron juntos al baño de mujeres.

Yo rápidamente voltie a ver a lillian y lágrimas comenzaron a salir de mis ojos.

Lillian: Que paso?- Pregunto preocupada.
Tn: Se metieron al baño- Dije para después tapar mi boca y más lágrimas comenzaron a salir de mis ojos.
Lillian: Limpiate esas lagrimas- Dijo limpiando mis mejillas- Y llenate de valor y vamos a enfrentarlos- Dijo y rápidamente tomo mi mano.

Juntas caminamos hacia la entrada del baño y lillian intento darle vuelta a la perilla pero estaba con seguro.

Pegamos nuestra oreja a la puerta y se escuchaban gemidos, mi corazón se hizo pedazos y nuevamente lágrimas comenzaron a salir de mis ojos.

Lillian rápidamente se quitó una de sus coquetas y metió el piquito del arete en la parte de la perilla donde va la llave, yo no quitaba la mirada de lo que Lillian estaba haciendo hasta que se escuchó que se boto el candado.

Se dejaron de escuchar los gemidos y lillian tiro el arete al piso, abrió la puerta y juntas entramos al baño.

Hubiera preferido no entrar....

Mire a la gorda pegada en la pared sin su camisa y su pantalon desabrochado, César tenía su pelo despeinado y tenía marcas de besos por toda su cara y cuello.

Lillian se acercó a la gorda y César rápidamente se quitó de con la gorda y tomo las manos de lillian.

Yo no podía reaccionar, estaba totalmente en shock.

Lillian: Sueltame- Dijo viendo a César
César: No porque le vas a pegar lillian- Dijo tomando las manos de lillian.

La gorda rápidamente comenzó a ponerse su blusa y a cerrar su pantalón.

Lillian alzó su rodilla y le pego a César, el rápidamente soltó las manos de lillian y ella corrió hacia donde estaba la gorda, la agarró del cabello y comenzó a jalarselo, César seguía tirado en el piso tratando de curar el dolor.

Me acerque a la gorda y también le jalaba su cabello, ella trataba de agarrar mi cabello pero yo rápidamente lo hacía para un lado.

Lillian: Hazte para allá- Dijo alzando un poco la voz- Te puede lastimar al bebé está perra- Dijo y no dejaba de jalarle el pelo a la gorda.

Lillian tenía a la gorda en el piso mientras le jalaba el pelo y le daba una que otra patada, yo me había echo a un lado pero por momentos también aprovechaba y jalaba el cabello de la gorda.

Yo iba a caminar nuevamente hacia la gorda y César se levantó rápido del piso y tomó mis manos.

César: Tu no pelees amor por favor- Dijo sin soltar mis manos
Tn: No me digas amor y no me toques- Dije alzando mi voz.
César: Amor, por favor- Volvió a decir y se puso enfrente de mi.

Jale fuertemente mis manos del agarre de César y le solté una cachetada fuerte en la mejilla.

Tn: En tu vida me vuelves a ver, olvídate que me tienes a mi y que estoy esperando un hijo tuyo- Dije apuntandolo con mi dedo- Si quieres hacerle el amor a esa perra llegando a Phoenix aprovechas y le haces un hijo, porque de los míos te olvidas- Dije alzando un poco mi voz, tome el anillo que tenía en mi dedo y se lo avente- Creo que lo necesitaras- Lillian se acercó a mi un poco despeinada, volteo a ver a César y negó con la cabeza volteando los ojos, lillian tomo mi mano y juntas salimos del baño dejando solos a la gorda y a César.

¿Aquí empezará mi nueva vida siendo mamá soltera?